dos.

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En el oscuro campo se hallaba un tierno gatito caminando lentamente con temor a lastimarse con alguna cosa, guiándose con la linterna que llevaba en la mano acompañado de un muy, confiado ardilla que caminaba a su lado con la mirada fija en el camino.

La noche ya había llegado, dejando así  la hermosa luz de la luna que los acompañaba alumbrando, algo, su camino.

Caminando con lentitud debido a que el gatito tenía algo de miedo, ambas personas lograron caminar por todo el bosque hasta poder cruzarlo y dejando a la vista un hermoso campo lleno de flores de distintos tipos.
Para ese entonces, ya era más de media noche, la luna se encontraba en su punto más alto, lista para comenzar a descender.

Con cuidado comenzaron a caminar entre las flores  que tenían una gran altura, llegando le hasta la cintura a ambas personas, que a la vez dejanban un agradable aroma que se iba combinando con el aroma de cada uno. Un dulce aroma de gatito y otro de ardilla.

—Ten cuidado, Jeongin. —advirtió jisung que tenía la mirada fija en el camino, mientras estaba adelante del felino. —Ten cuidado con esa roca. —volvió a advertir el castaño escuchando como jeongin soltaba un quejido de dolor, al parecer no le hizo caso —¡Ten cuidado te dije! —expresó soltando un suspiro escuchando como el felino le respondía con un chasquido.

Jisung sonrió al escuchar el tierno sonido que había salido de los labios del gatito.

Caminaron así un buen rato, escuchando las advertencias del castaño y los quejidos del menor que se tropezaba de vez en cuando con las rocas que estaban entre el pasto.

—Guarda silencio, jeonginnie. —dijo jisung haciendo una señal de silencio con uno de sus dedos encima de sus algo voluminosos labios.

El castaño comenzó a mover su cabeza de un lado llevando su mirada de un extremo a otro, escuchando atentamente. Jeongin que se encontraba a su lado comenzó a temblar con temor pero, guardando silencio.

Su alma de gatito se escondió rodeandose con su cola, temblando.

En ese momento, se escuchó un sonido algo extraño para los dos que provenía del pasto.

Justo cuando menos se lo esperaban comenzaron a escuchar los gruñidos  de un lobo que se iba acercando a ellos por el aumento del sonido.

—Agachate Jeongin. —demandó Jisung agachado, pero vió como Jeongin no se movía. Parecía petrificado. —agachate. —volvió a demandar en un susurro.

De un momento a otro, Jisung ya no vió el cuerpo de Jeongin sino, que en cambio de eso vió a un gatito que se  ocultaba temblando con temor, al lado de la mochila negra.

Al parecer el temor fue tan grande para Jeongin, que lo único que pudo hacer fue dejar a flote su animal.

Soltando un chasquido, el castaño tomó entre sus manos al felino, ocultandolo.

—Yo te protegeré, gatito. —avisó dejando sueves caricias sobre en el pelaje del felino, que se encontraba oculto entre sus manos, escuchando de fondo los gruñidos que se iban acercando cada vez más y más.

Los lobos eran conocidos por torturar a cualquier tipo de animal  que se atreviera a cruzar su territorio. Y eso lo sabían las demás especies que ni de broma se atrevían a cruzar ese territorio tan protegido por los lobos.
A excepción de los ______ ya que al ser ___ igual que ellos. Tenían la bienvenida de ir a su territorio.

Aunque Jisung tenía algo de miedo en su interior, no quería empeorar las cosas. Ya tenía un gatito miedoso entre sus manos.

Justo cuando el castaño acercaba la mochila oscura de Jeongin se dejó de escuchar el gruñido de lo que al parecer pudo reconocer que era un lobo.

Jisung, pensando que lo peor y había pasado. Acercó la mochila con total confianza a su lado para poder colocarla en su espalda y continuar con su caminata.

Se levantó del suelo dispuesto a caminar. Pero algo lo detuvo, pudo sentir como algo lo sostenía de la pierna, para ser más específicos una mano.

Soltando un grito, para nada masculino, Jisung giró su cuerpo con temor encontrándose a un joven de cabellos negros que se reía a carcajadas señalandolo con una de sus manos.

—¡Tenías que ver tu cara! —habló el pelinegro soltando una gran carcajada
—¡Oh dios! —exclamó.

Jisung aún no salía de su asombro, pero poco a poco fue consciente de toda la situación.

—¡Eres un imbécil!—gritó con enojo el castaño al reconocer el olor de ese animal, era un conejo. —¡Ve a molestar a otro, estúpido! —volvió a gritar.

—¡Wo! ¡Wo! ¡Wo! —dijo el pelinegro. —¡No te enfades, hermano!—musitó con una gran sonrisa escuchando el chasquido de parte del conejo frente a él. —los vi tan solos desde mi hogar, que quise acompañarlos. —soltó con gran total confianza el pelinegro señalando en un dirección, que Jisung pudo reconocer como una madriguera.

—Tienes que preguntarle a Jeongin.—habló Jisung com firmeza.

—Y dónde está tu amigo, el tierno? —preguntó com extrañeza al no verlo de un momento a otro. Jisung que estaba a su lado comenzó a abrir sus manos dejando a la vista un gatito que seguía levemente temblando acurrucadose en el pecho del mayor. —¡Oh! ¡Ahí estás! —dijo con una sonrisa viéndolo tiernamente.

Jisung dejaba leves caricias sobre las orejas del gatito.

—Él quiere venir con nosotros, gatito.—avisó el castaño señalando el cuerpo del pelinegro frente a él, que miraba curioso al gatito.

Era la primera vez que se cruzaba con uno de esa especie, por eso no reconocía su olor. —¿Lo dejas venir conmigo? —preguntó suavemente.

El gatito solo maulló con un "miau" muy tierno para ambas personas que soltaron un pequeño chillido de ternura al verlo tan pequeño.

—Lo tomaré como un sí. —dijo el pelinegro con una sonrisa dejando tiernas caricias en la cabecita del gatito que aún permanecía en las manos del castaño —¿Y a donde se dirigen?

—Vamos al territorio de los lobos —avisó Jisung soltando un suspiro pensando en lo que aún le faltaba por recorrer en su travesía —este pequeñín debe cumplir con un reto—dijo haciendo una seña al gatito en sus brazos.

—¿Al territorio de los gatos?—susurró curioso el conejo por la aventura que estaban llevando ese par —yo tengo un amigo en ese territorio.

Jisung al oír las palabras del pelinegro entreabrió los labios con sorpresa, acaso un conejo puede ser amigo de un lobo. Más sorprendente viniendo de un lobo.

—¿Enserio? —preguntó asombrado Jisung recibiendo un asentimiento por parte del conejo —entonces eres bienvenido a este grupo. —dijo con una sonrisa al pensar que no iba a ser tan difícil su misión. —¿Y cómo te llamas? —dijo manteniendo esa linda sonrisa en su rostro.

—Mi nombre es Changbin. —respondió con una sonrisa característica de los conejos —¿Y ustedes?

—Yo me llamo Jisung. —dijo el castaño —y él se llama Jeongin —volvió a decir referiendose al felino entre sus brazos que soltó un pequeño sonido como si estuviera confirmando la información dada por Jisung.

—Mucho gusto—musitó Changbin haciendo una leve reverencia. No fue la mejor manera de conocerse, pero esperaba que se llevarán bien. —espero que puedas cumplir con tu reto, pequeño gatito.

Escuchando de fondo la risa del castaño, los ahora tres miembros de ese grupo, comenzaron su caminata hacia el territorio de los lobos con una gran sonrisa en el rostro.

૮₍'。• ᵕ •。'₎ა

Gatito Valiente | hyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora