Gatito Valiente | hyunin

siete.

Ya todos estaban sentados para poder cenar la rica comida que había sido preparada por las delicadas manos de la señora Hwang.

— ¡Bien, ya pueden comer! —dió una venia hacia los alimentos puestos en la mesa de madera de un color oscuro—espero que les guste.

Todos se pusieron a comer soltando uno que otro suspiro al sentir el delicioso sabor de los platillos.

—¿Y cómo está tu mamá, Changbin?—preguntó la señora Hwang, hace muchos tiempo que no veía a su vieja amiga—espero que se encuentre bien, al igual que tus hermanos y tu padre.—lo último lo dijo sin ganas, desde que conoció a Seo, el padre de Changbin, nunca le cayó bien.

Rivalidad de jóvenes.

—Todos se encuentran bien en casa, mamá Suni —respondió el joven mientras devoraba la comida de su plato, amaba la comida de la señora Hwang. —Y papá también.

Changbin se llevaba bien con su padre, pero sabía de la rivalidad que tenía este. Algo que les había sucedido en su juventud.

La señora Hwang soltó un chasquido esperaba otro tipo de respuesta.

—Mamá —llamó hyunjin a su madre—¿Ellos se quedarán? ¿Aquí?—preguntó soltando un suspiro, desde que se había levantado del sillón el menor, que estaba a su lado, no soltaba para nada su mano. Ni disfrutar de su comida podía.—¿Estas segura?

La señora al oír la pregunta asintió.

—Ellos se quedarán —sentenció —ya que son parte de nuestra familia—declaró con una gran sonrisa—más que todo tú, pequeño gatito —le dijo al joven mientras le guiñaba un ojo.

Jeongin agachó la cabeza algo sonrojado, sentía como sus mejillas se iban calentando. Dándole un toque muy tierno a los ojos de los demás que no dudaron el soltar chillidos de ternura, avergonzado más al menor.

—¿Y dónde dormirán?—preguntó algo extrañado Hyunjin, sólo habían tres habitaciones en su casa y ellos eran cinco personas —¿No hay habitaciones disponibles?.

Suni estaba por llevar un bocado de su comida , pero se detuvo a medio camino al oír la pregunta de su hijo.

—Simple  —habló dejando sus palillos en su plato —changbin-ah y Jisung-ah dormirán en la habitación de invitados —informó, viendo como los mencionados asentían a sus palabras con una sonrisa en el rostro —Y tu, Hyunjin, dormirás con jeonginnie —declaró con una sonrisa traviesa en sus labios. Tenía un plan en mente.

—"Si Hyunjin no se casa con Jeongin, me dejo de llamar Hwang Suni"—le hablaba la señora Hwang a su loba interior que afirmaba a sus palabras con gruñidos suaves.

Hyunjin se sorprendió por las palabras de su madre , se atoró con su comida en la garganta, dando inicio a una fuerte tos.

Jeongin preocupado, le tendió un vaso de agua , el mayor lo tomó con prisa.

—¿T-tú dormirás conmigo?—le preguntó con la voz rasposa al felino que lo veía preocupado, dando suaves palmadas en su espalda—¡Y no piensas decir algo en contra!—exclamó con dureza desconcertado ante la tranquilidad del contrario.
Jeongin negó suavemente —¡¿Que te sucede?! —inquirió con el ceño fruncido, asustando un poco al pequeño que no sabía que hacer ante la acusación—primero vienes a mi casa , así como si nada. Luego mi lobo corresponde a tus órdenes, como si te conociera de años. ¡Y ahora piensas que dormiré contigo!—gritó a toda voz enumerando las situaciones, sorprendiendo a todos los presentes que veían la escena—ya no tengo hambre—mustitó levantándose de su sitio , para luego salir del comedor a pasos firmes, soltando gruñidos.

En el comedor solo quedó Jeongin que bajaba la cabeza tristemente soltando un suspiro, y gatito se sentía lastimado ante las palabras de Hyunjin.

—"Él no me quiere" —se dijo su gatito en lamentos.

—No le hagas caso a Hyunjin—le habló tiernamente la señora Hwang dejando caricias en el cabello del menor.

Los otros dos jóvenes veían toda la escena sorprendidos, pero sin dejar de comer—Él está algo confundido ahora —le aclaró.

Ella conocía bien a su hijo y en todos los años de su vida, Hyunjin nunca le  había enseñado a Sam a alguien que no sea de su familia. Jeongin era el primero.

Suni tenía un buen presentimiento en su pecho al ver al pequeño castaño. Sentía que era el indicado para estar con su pequeño lobito.

—Innie está triste —declaró jeongin en voz baja llevando una de sus tiernas manos a la altura de su corazón. Suni sabía que quien hablaba—"Él no me quiere" repite—recitó las mismas palabras de su gatito. La señora Hwang soltó un pequeño gruñido al ver la cara triste  del menor —¿Ahora que haré mamá suni? —y sí la señora Hwang ya le había pedido que lo llamará así.

—No le hagas caso —volvió a decir ahora acariciando las mejillas suaves del menor—Hyunjin es algo tonto al inicio —declaró, escuchando como el pequeño pelinegro soltaba una pequeña risa ante sus palabras— todo saldrá bien, confía en mí.

La señora Hwang le regaló una gran sonrisa que fue correspondida por jeongin, que sonrió mostrando su tan tierna sonrisa metálica.

Suni no se aguantó y soltó un chillido de ternura apretujando las mejillas del menor con suavidad.

—¡Eres tan tierno , Jeonginnie!—declaró—espero que tus futuros hijos salgan como tú y no como el tonto de mi hijo —confirmó sonrojando al pequeño gatito.

Dentro de Jeongin se oyó un pequeño meow en respuesta.

En eso se oyó un pequeño sollozo que sorprendió a la señora Hwang ,giró su mirada encontrándose a Changbin limpiando sus lágrimas rápidamente.

—¡Ay! —dijo—¡Ven a mis brazos Changbin-ah! —habló hacia el conejo mientras abría  sus brazos a ambos lados, lista para un abrazo.

Changbin no perdió el tiempo y se fundó en un tierno abrazo con la señora Hwang. Los otros dos jóvenes veían la escena enternecidos.

Mientras esto sucedía en el comedor, un Hyunjin se hallaba en su cuarto discutiendo seriamente con su lobo interior.

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