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Después de llevar a Alex a la tumba donde Sara estaba con nuestra madre, acompañe a mi hermano a una casa de ahorros, salimos de ese lugar con mucho dinero y compramos algunas cosas, entre ellas, un auto, computadoras, teléfonos, no entendía como, pero un hombre en la cárcel le dio todo el dinero.

Al volver a casa, Alex me ayudó y limpiamos el lugar, se veía menos abandonado.

- ¿Así que ese es el plan para vengarnos?- pregunte una vez más mientras miraba desde el sillón

- ¿Estas dentro?- cuestióno atento

- Claro que lo estoy, somos hermanos y vamos a arreglar lo que hicieron los Lazcano- asenti soltando un profundo suspiro

Alex me miro por unos segundos.- ¿Lo haces por Sara?- su semblante era serio

- ¿Por quien más lo haría?- me crucé de brazos- Es nuestra venganza

- Tu odiabas a Sara- aseguró Alex levantándoce

- Por dios, ¿cómo puedes decir eso?- cuestióne repitiendo su acto

- Y también me odias a mi, _____, ¿Porque?- Alex me miro con curiosidad

- Yo no te odio Alex, nunca lo he hecho, y Sara... ella fue algo difícil, a pesar de ser hermanas, nunca nos llevamos bien

- Después de volver de ese viaje, algo cambio en ti- Alex aún tenía su vista sobre mi

- ¿Y cómo no cambiar las cosas? Mataron a nuestra hermana y... - planeaba revelar mi verdadera molestia, pero no lo hice- Y fuimos a prisión, todos cambian con algo así

Alex asintió.- Saldré a poner algunas cámaras- tomó la caja sobre la mesa

- Arreglare todo en la computadora- me gire y fui al escritorio

Volver a tener la confianza de Alex, sería difícil. El sabía que nunca me agradó Sara a pesar de ser hermanas. Ella estaba mal, tenía algo y yo podía notarlo, en ocasiones me acuso de querer robarle a Rodolfo, cuando el y yo solo éramos mejores amigos. En otras palabras, Sara estaba loca, muchos pensarían que sólo en palabras, pero no... mi hermana realmente tenía algo malo.

Alex termino de poner las cámaras, configure las computadoras y deje todo listo para que mi hermano comenzará con el plan.
Mientras el revisaba las cámaras yo me aleje poco a poco, adentrándome en mis recuerdos del pasado.

Estábamos en la oficina de César Lazcano, Sara ya había sido declarada muerta y Alex estaba muy mal por eso.

- Rodolfo no tiene los huevos par afrontar esto- hablo César con voz firme- No es capaz, mirenlo- nuestra vista se desvió a nuestro amigo, el cual estaba aún en shook

- ¿Y qué piensa hacer?- pregunte mirando a César con seriedad

- Mi deber es proteger a mi familia... mi hijo a cometido un error que puede joderle la vida. Ustedes son inteligentes- César nos miro a Alex y a mi- Saben que no puedo permitir que la vida de mi hijo se vaya a la chingada por un error involuntario

- Creo que no me gusta a donde va esto, Don César- expresé mirandolo sería

- Ustedes saben lo mucho que los queremos- aseguró el hombre parandoce junto a Alex- Les abrimos las puertas de nuestra casa como si fuesen nuestros hijos, ambos se criaron con Rodolfo, han crecido juntos como hermanos. Y los hermanos se salvan, se apoyan, se arrastran por el lodo si hace falta, para ayudarse

- Sólo... vaya al grano- pedí algo frustrada de tanta charla

- Ayudennos- nos miro César una ves mas- Salven a su hermano, y no sólo a el, a nuestra familia

Mientras yo trataba de analizar lo que nos pedía, Chema ya lo había comprendido, lo note en su rostro.

- ¿Qué haces, papá?- cuestióno Chema con confusión- No... no les vamos a pedir a _____ y a Alex que se echen la culpa de algo que no hicieron

- ¡Cállate!- exclamó César con enojo

Mariana se alejó de Rodolfo y se sentó junto a Alex.-  Talvez mi hermano este muy confundido ahora, pero no soy tan estúpida como para culparme por la muerte de mi hermana- negué pasando una mano sobre mi cabello

- Entiende, _____, un día Rodolfo será presidente del emporio Lazcano. ¿Sabes lo que van a hacer mis enemigos para intentar chingarselo?- cuestióno  César mirándome con atención- Ustedes, tu, son fuertes, saben lo que es luchar en la vida, tienes espíritu de sacrificio... Y nosotros hemos hecho tanto por ustedes, por su educación y también por su hermana, Sara, pobrecita

- Por favor- negué con media sonrisa- ¿Cree que así va a lograr inculparnos? Le agradezco en nombre de Alex y el mío, todo lo que hizo por nosotros, pero no lo vale, no vale que nos pasemos quien sabe cuántos años en prisión, por algo que no hicimos

César entrecerro un poco los ojos.- Es el momento de devolvernos el favor... sería una lástima que supieran que no lloraste, ni siquiera una lágrima cuando tu hermana murió

- _____ y Alex no tuvieron nada que ver- aseguró Chema tomando mi mano

- Yo sería incapaz de matar a mi propia sangre, aunque no se si pueda decir lo mismo de usted, Don César

- ¡Callense!- exclamó César- Llevate a Chema- ordenó a Mariana, su mujer

- ¡No!- nego Chema

- ¡Qué te lo lleves!- ordenó con más firmeza

Y así Chema solto mi mano. Ese día caímos en el chantaje de César, tratamos de hacer todo lo posible por ver que había pasado, pero esa no era una opción en la cárcel.

¿Quién mató a Sara? || Chema LazcanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora