Capítulo 5

49 14 1
                                    


Capítulo dividido en dos partes, los detalles y escenas son muy largos, espero sepan comprender, ¡disfrute la lectura!

*

Desordenado, la habitación estaba echa un desastre y el clima comenzaba a volverse frío, la luz del sol entraba por las ventanas y las cortinas se mecían por el viento invernal. En especial cuando ciertas personas se encontraban muy unidas entre sí, en medio de la cama, acurrucados como si sus vidas dependieran de ello.

Como si fuesen una pareja enlazada, Jimin y Yoongi dormían plácidamente en posición de cucharilla. 

Sintiéndose sofocado, Jimin quiere quitar los brazos que lo apresan como una presa para el alfa de la manada, esas extremidades cálidas alrededor de su cintura, pero no tiene éxito en el intento. Ni en ese, ni el siguiente que amenazaba con un despertar de mal genio, por la Luna ¡Ese omega se estaba sofocando con cada segundo! Y su mal genio, hizo acto de presencia en clara efervescencia cuando los ojos de un brillante almendrado se dejaron ver tras la cortina de pestañas oscuras y curvas. Esos bonitos ojos que no dudaron en mirar hacia todos lados intentando enfocar el lugar donde se encontraba.

Cuando se dio la media vuelta, se encontró con la sorpresa de que la persona que lo mantenía pegado a su cuerpo no era nada más y nada menos que el idiota de Min Yoongi. 

Y más aún cuando ambos, estaban como la madre Luna los había traído al mundo.

ANOCHE.

— ¿Por cuanto tiempo vas a mirarme?

El alfa se quedó estático ante el reproche del más bajo, tomando asiento en la silla que había justo al lado de la mesa de noche.

— ¿No vas a hablar? -pregunta Jimin con los brazos cruzados.

Ciertamente, Yoongi no sabía como poner contento a un omega, lo único que le había enseñado su madre era regalar flores como sinónimo de disculpas, pensaba que un ramo de flores arreglaba todo tipo de males al rededor.

Ahora mismo, culpaba a su madre por no enseñarle adecuadamente.

— Esta noche habrá una fiesta en el salón principal. 

— ¿Estás pidiéndome permiso para salir? Pues me importa un bledo lo que hagas con tu vida, Min.  —rodó los ojos, volviendo a acostarse para darle la espalda, sin embargo el pelinegro lo tomó del brazo obligándolo a sentarse. —¿Qué crees que estás haciendo?

—Ven conmigo.

El omega alzó una ceja acercándose lentamente al cuello del más alto, olfateando un poco, una acción que dejo a Min Yoongi un poco desconcertado, pero que aún así no le importó en lo más mínimo. Jimin se dio cuenta de que el alfa estuvo bebiendo, zafándose de su agarre bruscamente para nuevamente volver a la cama.

— Estas ebrio.

—No lo estoy.

—Lo estás.

—Tan difícil es que salgas con un alfa dominante? 

— Ya estoy atado a ti de todas formas. 

Las palabras de Jimin sonaron como un eco en su mente, incapaz de refutar la declaración del rubio, si lo pensaba bien tenía razón. Ambos estaban atados por un matrimonio que fue arreglado por sus familias, ninguno de los dos estaba dispuesto a seguir al otro, simplemente eran prometidos para aparentar frente a las demás personas.

Si lo veía de esa manera fue totalmente absurdo el haberle pedido salir de la habitación cuando ni siquiera estaban en buenos términos. Conociendo al omega, con su afilada lengua y su actitud lo más probable es que si insistía más, este lo echaría de la habitación sin importarle quien había pagado por ella.

Tampoco podía negar que estaba un poco desanimado.

— Como quieras. —fue lo único que dijo antes de adentrarse al baño y darse una ducha, apoyando los brazos en la pared, dejando que las aguas cristalinas mojaran todo su cabello y corrieran por todo su trabajado torso, digno de un alfa dominante. 

Mientras dejaba el agua correr, su lobo interior le reclamaba no salir y quedarse con el omega.

— Deja de joder.

Es mi omega.

— No lo es, ahora cállate y vuelve a tu rincón. —frustrado cerro la llave de la regadera y coloco una toalla al rededor de su cintura mientras recogía otra para secarse los cabellos húmedos.

El cuento que su abuela le contaba antes de dormir cuando solamente era un pequeño alfita, no era más que un rumor, una simple leyenda sobre ese hilo rojo del destino. Una historia que englobaba a una pareja, un Omega y un alfa que enlazarían sus almas; su ser hasta el punto más íntimo sin retorno.

Aquella leyenda, aseguraba que los destinados se encontrarían como almas gemelas y pasarían el resto de sus vidas juntos. Ambos llenarían el vacío en el otro y su ser se encontraría en paz hasta la muerte. Pero como lo recordaba, era solo una leyenda.

Por supuesto que Yoongi no era muy creyente de esa historia a la que todos temían, un lazo con un omega no era muy común entre la sociedad, solo aquellos pocos fieles a sus instintos llevarían la marca entre su cuello y hombro. Claro, sus padres aunque eran alfas, uno de ellos si llevaba una marca con la excusa de que eran una pareja formada por la madre luna.

Cuando el pequeño Yoongi en ese entonces, le había preguntado a su madre la razón por la marca de unión que ella ocupaba en esa zona tan delicada a lo que ella había respondido: "— Tu padre y yo fuimos testigos de la madre luna al volvernos una pareja destinada a estar junta"

 El infante se había creado toda una película en su mente, pensando que era genial que dos personas que se amaban, luego de morir de vejez en su próxima vida volverían a reencontrarse, porque el destino los había atado. Incluso él mismo, en la actualidad, hubo una ocasión que pensaba que había encontrado a su destinado.

Él dejó de creer en el destino, porque el destino ya le había jugado una y en el mismo juego Min Yoongi claramente no se quemaría.

Jimin daba vueltas por toda la cama, buscando una posición cómoda en la que dormirse, pero su omega estaba muy inquieto, ese lobo de pelaje blanco y ojos grisáceos/azulados estaba chillando del dolor. Un dolor que Jimin podía sentir claramente, pero no sabía el por qué, hasta que finalmente el olor de las feromonas del único alfa en la habitación llegó hasta sus fosas nasales y el sonido de la puerta cerrándose le respondió.

No podía ser que su pequeño omega se sintiera de esa manera por ese alfa tan dominante, tampoco se dejaría llevar por sus instintos, cuando claramente sabía que su próximo celo estaría llegando. El plan era alejarse lo más rápido posible de Min Yoongi, antes de que el ciclo de calor comenzara.


You are my destiny -YOONMIN- OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora