Capítulo 17

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Ya estábamos listos para salir, vi a Derek salir de su cuarto con una camiseta negra y unos vaqueros, era guapo, muy guapo, pelo negro corto ligeramente ondulado, cara bien perfilada, ojos marrón oscuro casi negro... Me fijaba en esos detalles siempre que podía, tiene buen físico y como era de esperar es mas alto que yo. Ryan sin embargo era un poco mas corpulento, se le notaba el gimnasio y la buena dieta. Pelo castaño casi rubio y ojos verdes. De no ser por ser tan cerrado sentimentalmente estaría con la que quisiera.

Cuando estábamos todos listos Derek abrió la puerta y me agarró de la cintura para que pasara, salí y después nos fuimos hacia el coche, realmente podíamos ir paseando, estaba cerca, pero si íbamos a comprar muchas cosas mejor el coche. Al llegar Derek aparcó mientras Luke Ryan y yo entrabamos en el centro comercial.

-Dice Derek que vayamos entrando, nos espera en la heladería de la primera planta. -Dijo después de colgar el teléfono.

Fuimos a comprar comida y cosas básicas para la casa, además yo vi cosas para decorar mi casa y me hizo ilusión comprarlas. Al acabar fuimos a la heladería como Derek indicó y nos le encontramos sentado con el móvil en una de las mesas.

-Te has librado de la compra, no creo que se tarde tanto en aparcar. -Dijo Ryan sentándose a su lado.

-Había mucha gente. -Habló sin dejar de mirar el móvil.

- ¿Os parece si tomamos algo ya que estamos aquí? -Propuso Luke.

-Ay si porfa, tengo hambre. -Y era verdad, aunque un helado siempre entra.

-Pues nada, ¿De qué lo queréis?

- ¡A mí de Chocolate!

- Yo de fresa

- Y tu Derek?

- Eh? Ah, nata está bien. -Después de eso Luke fue a por los helados y Ryan y yo hablábamos mientras esperábamos.

- ¿Qué hay en el móvil que te tiene tan ido?

- Una vieja amiga, me la encontré el otro día al salir del trabajo y me dio su número, nos estamos poniendo al día. Es Alma, no se si te acordaras de ella.

- Ah sí, si me acuerdo. ¿Cómo le va?

- Bien, vive cerca de donde trabajo, es enfermera.

- Me alegro de que vaya bien, mándale un saludo de mi parte.

Y así como si nada, estaban los hablando sin yo enterarme de nada, ¿Tan importante era chica como para no despegar la cara del móvil? Llegó Luke con nuestros helados y nos quedamos hablando un rato, al terminar decidimos dar una vuelta por allí y ver algunas cosas más, Le di la mano a Luke, ya era costumbre, últimamente le notaba mas lejos de mi que antes y echaba de menos estos gestos. Ryan y el iban hablando y yo estaba concentrada en mirar las distintas tiendas. Ya había asumido que Derek no me miraría en todo lo que quedaba de tarde así que simplemente me concentré en pasar el rato.

- ¿Chicos os importa si os dejo aquí? Alma me ha dicho de vernos, y vendrá al centro en un rato.

-Claro, no nos queda nada mas que comprar, te esperamos en casa.

Y sin mas se despidió y se fue, hice como que me daba igual, pero me molestó, yo se que no siempre tiene que estar con nosotros, pero hoy era un día para los cuatro, pocas veces salíamos juntos... En fin.

-Ly, ¿Por qué estás de morros? ¿Todo bien?

-Si, estaba pensando en que ese peluche quedaría mono en mi habitación. -Era mentira, pero sí que quedaría mono.

- Mide más que tú, ¿Dónde meterías eso?

-Encima de la cama, claramente. – A decir verdad era adorable, un oso panda de mas o menos metro y medio con un lacito morado.

-Venga, te lo compro, te pega mucho, es adorable.

- Luke no hace falta, puedo comprármelo yo y no estoy segura de ello.

- Que sí, te lo quiero regalar, pero hasta que vuelvas a tu casa tendrá que estar en la nuestra, no lo voy a llevar a tu casa ahora.

-Está bien... Gracias, de verdad, eres un amor. -Le di un beso y le abracé con emoción.

Nos fuimos a casa después de un rato y al llegar colocamos la compra y algunas cosas más, la verdad es que no estaba de humor para cenar, no se porque pero me encontraba triste, cuando Luke y Ryan me dijeron de cenar les dije que me dolía mucho la tripa y que había vomitado, que la suma del helado y del coche me habría sentado mal. Me tumbé en la cama con mi nuevo peluche y lo abracé. Me quedé dormida al poco tiempo después de mirar un rato Instagram.

Mis TresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora