Mi angel de musica

sir Gastón Lerouz

En la fiesta todo seguía de manera normal algo que a Eric le encantaba, baile música canto y tratar de regresar a la normalidad.

Pero sus ojos se posaron en su maestro tenía 2 años sin verlo personalmente pero siempre al pendiente de su salud y su bienestar, ya que fue como un padre para él.

Sin embargo no dejaba de mirar a la joven Christine, la cual estaba rodeada por sus amigos seguro escuchando el chisme que él también quería.

-sabia decisión de regresar tu amada casa maestro -dijo Erick al ver a Gastón reír y divertirse-tienes mucho que contarme, qué te pareces al terminar la fiesta vamos a mi oficina, te recuerdo que no puedes beber en exceso ni comer demasiado, así que seré tu niñero no permitiría que nada malo te pasará en mi presencia.

- tan joven ya pareces un viejo-dijo el mencionado entre risas-mejor vamos ahora no quiero que persa le de información a mi querida nieta para que se preocupe... bueno tiene que venir pero está varada en el aeropuerto, tardará tres días en venir seguro la extrañas.

-eso ya me lo había comunicado ella, le dije que tenía que reservar vuelo lo antes posible para estar contigo pero al parecer tú adelantaste todo y la olvidaste a ella-dijo Eric molestó mirando eso maestro reir-suerte que persa pudo alcanzarte, no tienes edad para hacer esto, ella y yo nos preocupamos por ti.

Los dos caminaron hacia las oficinas dejando la fiesta atrás, ya habían hecho acto de presencia mucho tiempo así que desaparecer era una buena opción por un rato.

-lindo lugar ya te acoplaste -hijo Gastón mirando todo el lugar en especial los recortes de periódicos y revistas enmarcados casi al inicio de todo-en verdad hace cuánto tiempo tú mi ángel y mi más bella creación... siempre pensé que volarias alto pero no que conquistarás el cielo.

Erick sintió que todo eso valía la pena de mano de quien lo ayudó y que una vez fue todo lo que él quiso ser pero no estaba ahí para hablar exactamente de lo grande que era y de lo talentoso.

Quería respuesta sobre esa chica y las quería ahora, no era bueno esperando.

-déjame sentarme para que comience el interrogatorio mis viejos pies ya no funcionan como antes y esta columna bueno ni comentarios-dijo el mayor sentándose poco a poco-y ni se diga de este corazón...ya casi no late

-Ya me han informado sobre tu salud y no entiendo qué haces aquí deberías estar descansando o de reposo estas cosas no te hacen bien, sabes que estamos haciendo lo posible con los mejores médicos pero Dios tú eres terco-dijo Erick aprovechando para sentarse y ofrecerle agua-nunca entendí cómo actuabas pero sí sé que siempre tienes un plan y cuando apareces es peligroso.

-por favor solamente quería ver a mi gran amada operada junto a mi ángel es mucho pedir para este viejo-suspiro tratando de ser dramático-pero no imaginé ver a mi estrellita junto al ángel es impactante, cómo se porta la adorable Christine.

Erick estaba fuera de control con eso, no le gustaba eso, que su maestro posara su atención sobre alguien vago, aunque ella tenía un talento oculto no podía llamarse estrella ni nada, aún no, pero si su maestro vio algo que él también vio ella estaba destinada a grandes cosas.

-cómo? cuándo ?por qué Y porque no me lo dijiste?-dijo serio Erick en verdad quería respuestas su título estaba en juego o más bien su ego siempre quiso ser el favorito y fue el último pero por la diferencia de edades entre él y Christine ella tuvo que ser la última-ella es un desastre.

-bueno...a ver fue cuando trabajaba aquí luego de retirarme de la enseñanza tenía un año y medio para terminar mi contrato con el teatro y poder irme, en ese entonces mi querida nieta estaba haciendo unas pasantías y me acompañaba de vez en cuando a tocar el piano , Giry entrenaba a las niñas del ballet pero sabes que ella se quedaba con las chicas más grandes cuando caía la noche y en una de esas noche ella apareció con dos niñas su hija Meg y Christine, las cuales estaban de vacaciones y estaban al cuidado de ella-se acomodó en el asiento-Meg se quedaba mirando a las bailarinas pero Christine se acercaba a mí y me preguntaba porque tocaba y cantaba tan bonito, la pequeña se nota que no tenía miedo a nada mi nieta le decía que yo estaba ocupado y que no podía entretenerme con tonterías.

-los dos sabemos que tú tienes un talento y tenías un horario muy apretado para estar con tonterías-interrumpió Erick molestó sabiendo cómo era esa chica.

-con el tiempo ella se acercaba más y más a mí preguntándome y dándome nuevamente la esperanza de ver sangre joven y una luz en un carbón-en ese momento rio-ella me recordó a ti siempre detrás de mí pidiendo que le enseñara.

-no me compares con ella-Erick le dolió en su orgullo.

-en fin acepte a darle clases en mis horas de descanso, no le cobre ni nada, tampoco tiene registro y su Progreso o la recomendé a ningún otro maestro, me sorprendió la gran rapidez y el gran talento que tenía, así fue un año y medio en la cual ella aprendió y fue mi última alumna pero no de manera oficial, ya que no terminó su entrenamiento y no la presente de manera oficial al teatro ya que ni ella lo consideraba clases profesionales- sonrío y dio un suspiro casi de lamentó-me hubiera gustado hacerlo sólo eso, así que tranquilo tú sigues siendo el número 1 pero veremos hasta qué punto.

-qué quieres decir con eso, logré lo que ningún otro ha logrado Y esa niña aún le falta mucho-Erick sentía que esa no era la respuesta que quería pero aún estaba dolido simplemente por no ser el último y más grande.

-pero háblame, estaré aquí hasta que estrenes tu obra, pero dale por favor un poco de atención a este pobre viejo-dijo Gastón sonriendo-vamos me la debes.

-para usted maestro todo lo que pida sabe que no puedo decirle que no-sonrío recordando todas las veces qué Gastón lo dejó ayudarlo con las obras y en esas veces aprendió todo.

Luego de un rato regresaron a la fiesta , risa y música y un poco menos de tensión.

-maestro que alegría verlo-dijo Cristine acercándose cuando ya no había nadie-veo que siempre está rodeado de buenas personas y no tan buenas.

-mi niña has crecido y espero que tú también-dijo dándole un cálido abrazo-cómo olvidar a la pequeña que me interrumpe a tanto.

-así que sigue acusando problemas aún de grande-dijo Erick acercándose con un poco de agua para Gastón.

-Lo mismo digo-dijo riendo el persa-recuerda la ocasión en la que siempre te molestaba con tu apellido.

-ya me disculpé mil veces por eso no tengo la culpa de que se parezca al nombre del autor-dijo Cristine avergonzada-va a quedarse hasta el estreno de la obra?

-qué historia del apellido?-le preguntó Eric en susurro al persa.

-Christine solía llamarlo sir Gastón Leroux como el autor del libro del fantasma...-fue interrumpido por Erick.

-claro no digas más por la x en veces de la z- suspiro saliendo que en un tiempo él también lo llegó a confundir.

Así pasó un rato hasta que alguien preguntó el nombre de la nueva obra y que pronto sería revelada.

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Buenas mis queridos lectores les explicó.

1. me habían robado el teléfono y así que no podía escribir ya desde hace dos semanas tengo uno nuevo.

2. Adivinen a quién le dio covid y tuvo que estar fuera por un tiempo, cuídense chicos esto no es juego qué es demasiado horrible.

3. Más horas laborales menos tiempo para escribir pero estaré al pendiente de actualizar.

Gracias a los que aún sigue leyendo.