🍃 Capitulo 27🦧

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Eran las diez de la noche en la Isla Jeju. El Alfa pelinegro estaba camino a la casa del castaño, con él ya llevaba a los seis ratones indios que le había encargado.

En todo el trayecto, estuvo pensando, en diferentes opciones por las cuales, el omega le había pedido aquello, pero todas eran realmente inútiles y bobas. Estaba curiosamente desesperado. 

Una vez llegó al edificio donde vivía el omega, estacionó su camioneta y bajó con la caja de ratones en sus manos. Se imaginó aquella escena, pero en vez de ratones, flores. Dios, realmente estaba perdido por aquel chico.

Minutos después ya estaba frente a la puerta de su departamento. Tocó el timbre y espero, no tardó mucho para que el chico castaño se asomara a ver quien era, y cuando lo vio, salió del departamento con sumo cuidado, para recibirlo.

— Llegaste.. — Susurró 

— Si, y uhm... te traje los ratones que pediste, seis ratones  — Le extendió la caja

— Ah, eso, gracias — Sostuvo la caja entre sus manos y alzó la mirada para verlo — Hay algo que debo decirte antes de entrar.. — Avisó

Jungkook lo miró con ojos curiosos y luego asintió indicándole que continuará, que tenía toda su atención..

— Ehmm.. no te asustes, no grites, no hagas movimientos bruscos, no entres en pánico ¿si? — Aún sin entender completamente, asintió levemente. — Bien, entremos...

Taehyung abrió la puerta de su departamento y entró seguido de Jungkook, quien seguía confuso.

El castaño se agacho abriendo la tapa de la caja y dejando libre a los ratoncitos que inmediatamente salieron de la caja y comenzaron a correr por toda la casa.

— ¿Qué haces? — El Alfa se agacho para intentar atrapar a aquellos ratones, si los dejaba libre se haría una plaga ¿no? 

— Shhh... no te muevas — Susurró mirando al menor.

Se quedó completamente quieto mientras escuchaba como el castaño susurraba pequeñas cosas como "Salgan" ¿Salgan? ¿Hay alguien más ahí? ¿Quienes? 

Decidió solamente mirar lo que Tae hacía, sus ojos se enfocaron solamente en aquel rostro tan angelical y esas facciones, para sus ojos, perfectas. Como el cabello caía sobre sus ojos levemente y como sus labios se movían a la sintonía de como los fonemas eran pronunciados. Se perdió en él, no es la primera vez, y seguramente no será la última vez.

— Eso... Ya tenían hambre ¿no? — Aquello lo sacó de sus pensamientos. Dos hermosas serpientes se arrastraron de abajo de los muebles para llegar a los ratones y comérselos de un solo bocado.

La primera que se dejo ver, era de un tono verde muy fuerte y llamativo, tenía pequeños detalles de color azul y sus ojos eran de un potente menta. Era larga, de aproximadamente dos metros y sus dientes, eran filosos. 

La segunda era más pequeña, aproximadamente un metro y los detalles que la hacían ver diferente, eran de color rosa opacando el verde. Sus ojos son de un potente morado y sus dientes bien son filosos, aunque no tanto como la azul.

Taehyung sonrió ampliamente y extendió sus brazos para que ambos reptiles se arrastraran por ellos. La serpiente rosa, se enrollo en su brazo derecho de manera rápida hasta llegar a su hombro. En cambio, la serpiente azul tuvo que enrollarse en su brazo, hombro y parte de su pecho.

Jungkook lo miraba fascinado, internamente se estaba muriendo de miedo, si, pero admiraba como el castaño podía hacer eso sin siquiera demostrar cualquier señal de temor o algo por el estilo, es más, estaba sonriendo. 

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