I - cansada

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Manhattans, Nueva York.

- Te lo e dicho. Quiero el divorcio el fin de semana. Ya tenemos en esto mas de cinco meses.

Decía Alicia caminando por la sala de estar recogiendo todo lo que se encontraba fuera de lugar y un Matteo sin camisa y torso desnudo persiguiéndola enojado.

Era Domingo y ningunos de los dos trabajaban. Pero para Alice los domingos eran un día para organizar todo lo que tenía pendiente, ya que esta de lunes a sábado en el hospital y se le hacia muy difícil organizar sus pendientes y algunas que otros expedientes que le daba la enfermera Rose Miller de esos Pacientes desconocido y el rol de Alice era asegurar el trabajo de la chica y verificar si eran correcto aunque sabia muy bien que lo estaban por que Miss Miller es una impecable en su trabajo y tenía en ella la mejor confianza en su labor. También los domingo le encantaba organizar su casa, por mas que ella y su esposo le pagaban a la señora Rocio De Jesús una mexicana de sesenta años y encargada del servicio doméstico. No le importaba tener la casa organizaba sabia que su esposo era un sin vergüenza y este dejaba todo tirado. Es por eso que ella misma se encarga de limpiar la casa todos los domingo y luego hacer sus organizaciones.

Matteo era un hombre libertino y ella se enojaba por el. Hace años era el hombre más prestigioso y su empresa la mejor en marketing pero su salida con amigos y mal gastar su dinero en bebida dañas órganos (como Alice le dice) le llevo hacer de un hombre educado y humilde a uno ogro y mal educado. Haciendo perder la paciencia de su esposa y de la mujer que le juró amor en el altar.

Entrando a la realidad, Matteo miraba con enojo a Alice y tomándola del brazo hizo que ella lo mirara con atención.

- no me puedes hacer esto. Alice! — ella se soltó del agarre de el y le miró con ceño fruncido y con sus  brazos cruzados. — no ahora que hemos logrado esto junto.

Sonriéndole ella puso su mano derecha en el hombro de el.

- cuando tu esposo elige salir de fiesta cada noche, olvidando sus compromisos y deber, más olvidando a su esposa y la atención en ella. No hay mucho que hablar.

El le quito el brazo y la atrajo a el por la cintura haciendo que ella se pegue a el y mirar arriba para ver esos ojos negros que poseía el y que ante la volvía loca pero que ahora solo siente una forma extraña "llámenles algo parecido a la Amistad".

- eres mi esposa y te amo.

- pero yo no te amo y tu tendrás que darme el divorcio o viajaré a Las Vegas y haré el divorcio express. Decide.

Dicho eso se soltó de el y recogiendo las cosas que ante había recogido de toda la sala de estar, se encaminó a las escalera que la llevaban directo a la habitación.

****
Misma noche del Domingo, Alice sentía dolor de espalda. Ya tenía cincos horas sentada en el computador y por fin ya pudo terminar de revisar y organizar todo. Soltando el Marcador color verde lumínico y cerrando el portafolio con el nombre del hospital en el centro "Harrison Health Center". Suspiró al por fin encontrar paz, se puso en pie cubriendo su pijama de terciopelo rosado con la bata que tenía encima por el aire condicionado. Caminó directo a planta baja donde vió las luces apagadas sorprendiéndose al notar que ella estaba sola.

- ya se fue de nuevo.

Si fuera inter diarios que el se fuera le era un poco mas de aceptar pero el muy hijo de puta salía todos los días a la misma horas. Era triste vivir con alguien así, era triste no compartir con su esposo, era triste no ser tocada por el, pero aun era triste que ella no deseaba nada de las anteriores. El podía hacer y deshacer por que ella ya no le importaba, pero el muy cabeza dura se la hacía difícil.

Siguió caminando hasta llegar a la cocina, era sencilla, color blanco en todas sus paredes al igual que lo era las paredes de las casas, pero sus gabinetes y muebles eran de color caobas y eso le encantaba a ella. Fue ella quien dibujó su casa y se la dió al arquitecto para que la hiciera al margen del dibujo.

Abrió el refrigerador y tomando un baso de vidrio de la puerta y una jarra de jugo de naranja, se sirvió y bebió sintiéndose refrescante.

Pensó en su esposo y el como hará para que el le diera el divorcio. No le será infiel, no será una adúltera "no lo merecía y no era capaz". Hablaría con sus padres? Sus padres eran unos sin vergüenza igual que el y ellos nunca la aceptaron a ella como esposa de su hijo. Tenían dos años de casado y nunca han venido a casa de ellos. "No hacen falta". En conclusión tenia una breve misión, hablaría con Matteo para ponerse en contacto con sus abogados y filmar  el divorcio o ella hará el divorcio express. Cansada de pensar subió las escalera de nuevo y se tiró a la cama para luego quedar dormida.

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