¿Qué es el amor?©

Capítulo 1 ~Primer día de clases~

"Esas vacaciones habían sido las más divertidas de mi vida. Había conocido a mucha gente nueva y me había hecho nuevos amigos. Pero todo acabo cuando el vehículo dio la vuelta al camino que me llevaba a una nueva vida. Era triste pero no volvería a ver a esa niña con la que jugaba todos los días en las montañas..."

Había pasado otro aburrido verano y tenía que volver a días aun maaaaaas aburridos en la escuela. Bueno, por suerte este era el último año. Además me encontraría con mi mejor amigo Krilin otra vez.

-¡Goku! ¡Espera!- Me gritó mi amiga Bulma que todos los días desde hace 5 años me acompañaba al colegio que quedaba solo a unas dos cuadras de la universidad que estudiaba ella.

-Hola Bulma.-Pare mi camino para que me alcanzara y la salude con una sonrisa.

-¡Goku! ¿Por qué no me esperaste?- Me grito alterada y agitada ya que venía corriendo.

-Jaja lo siento es que estaba pensando.-Le dije con una mano en la cabeza y riéndome.

-Claro es obvio porque caminar y pensar es muy difícil para ti.-Dijo con una sonrisa y burlándose de mi con los brazos cruzados.

Caminábamos a paso lento, no importaba, por que íbamos 10 minutos adelantados. Cuando estábamos llegando a la calle de mi escuela alguien ya nos esperaba en la esquina.

-¡Es Yamcha!-Grito muy emocionada Bulma.- ¡Yamcha! ¡Hola Yamcha!- Empezó a decirle mientras recargaba su mano en mi cabeza y movía la otra mano saludándolo.

-Hola mi amor.-Dijo el antes de darle un beso mientras yo miraba a otro lado con mis dos manos detrás de mi cabeza.

Krilin llegaba por la otra esquina con una chica de pelo rubio y ojos celestes. Ambos venían platicando y se los veía muy contentos, supongo que esa es la chica de la que me hablo todo el verano.

Krilin fue mi mejor amigo desde que tenía 12 años y entrenamos con el maestro roshi en kame house. Mi abuelito me había dicho que él era un buen maestro de artes marciales y yo me emocione un mucho. Cuando llegue con el maestro, también había un niño que quería entrenar con el así que los dos nos volvimos grandes amigos a partir de eso... Después de terminar el entrenamiento mi abuelo dijo que tendría que estudiar, que no todo eran peleas. Como a Krilin también le exigieron lo mismo ambos estudiamos en el mismo colegio. Ese verano que tan pronto se había acabado, Krilin me había contado que había conocido a una chica que le agrado mucho y se había mudado cerca de su casa. Se llamaba 18, nombre que me pareció extraño y muy gracioso. Todos los días con la misma historia, pasaba días y noches contándome de ella.

-¡Hola Goku!-Grito Krilin con una mano arriba saludándome. Yo respondí saludándolo con la misma alegría.

-18, él es Goku.-Dijo Krilin a esa muchacha cuando llego en frente mío.

-Krilin ¿esta es la chica de la que me hablabas todos los días?- Le pregunte. Pero él se puso nervioso y comenzó a mover sus manos por todas partes. Por su parte, esa chica sonrió.

-¡GOKU! ¡No! ¿Qué estás diciendo? ¡CÁLLATE! - Y me golpeo fuerte en la cabeza. Yo no entendía nada de lo que estaba pasando, solo note que la cara de Krilin se puso roja como un tomate.

-Bueno, nos vemos.- Dijo Bulma despidiéndose yendo a la universidad, pero cuando se dio la vuelta un chico la empujo, arrebatándole el camino.- ¡OYE! ¡¿POR QUÉ NO TE FIJAS POR DONDE VAS IDIOTA?!- Grito Bulma muy enojada. Pero ese muchacho de pelo puntiagudo la ignoro y se dirigió al mismo edificio de Bulma. Ella con el ceño fruncido solo siguió su camino seguida por Yamcha.

-Vaya, que raro. Emm Goku ¿vamos?- Me dijo Krilin apuntando a la escuela.

-No, yo los alcanzo más tarde. Voy a comprar algo de comer.- Dije con una sonrisa. La comida siempre me ponía de buen humor. Y es que esa mañana solo había comido una porción de torta, un muffin, galletas, jugo, y 4 tostados.

-Tu siempre comiendo...Bueno, nos vemos en el salón, te guardo un lugar.- Dijo alejándose con 18.

Cuando me acerque al kiosco que estaba frente al colegio había una chica primero que yo, ella estaba esperando a que la atendieran. Tenía puesto un vestido azul, una coleta, y su pelo era de color negro, con dos mechitas de cabello delante de sus orejas. En eso, un señor con bigote se acerca a la ventanilla del kiosco y le pregunta que necesita.

-Hola, si, eeh, quiero... quiero un agua natural...-Dijo apuntando al refrigerador, mientras el hombre la sacaba.-Y un pastelillo de crema.- Yo mire al pastelillo que observaba ella, lo mire, se veía exquisito. Pero con el dinero no tenía más que para un par de caramelos.

-Muy bien señorita. Serian 15 yens.

-¿15? Uuumm... no tengo tanto. Solo tengo 10... ¿le puedo dar lo que me falta mañana?- El señor la miro dudando.- No se preocupe, yo estaré aquí todos los días de la semana. Estudio en frente. Así que mañana se lo devolvería.-Dijo con una sonrisa tratando de convencerlo. Era extraño, nunca había visto a esa chica en la escuela. ¿Sera nueva?

-Mmmm... Está bien, pero tendría que anotarla. Dígame ¿Cuál es su nombre?- Dijo agarrando una lapicera un papel.

-Soy Milk.- ¿Milk? ¿Dónde había escuchado ese nombre antes? Me parecía conocido...

El hombre escribió su nombre y la muchacha se dio vuelta, sorprendiéndose con mi presencia. Casi se caía del susto, pero yo la agarre de los brazos para que no se cayera. Ella se quedó mirándome muy atentamente. Y por alguna razón yo tampoco podía dejar de mirarla, era como si ambos nos sintiéramos confundidos.

-Sí, dígame Goku ¿Qué desea?-Dijo el señor interrumpiendo el momento. Él ya me conocía, iba seguido a ese kiosco y me había vuelto un buen amigo del dueño. Yo me di cuenta que aún no soltaba a esa chica, cuando dirigí mi mirada a ella de nuevo se veía que se había sonrojado un poco ¿Por qué? ¿Hizo algo vergonzoso? La solté, camino para adelante frente a la calle, esperando a que no pasaran más autos para poder pasar a la vereda de en frente.

Deje de mirarla, ya que el kiosquero me pregunto de nuevo que era lo que quería.- Eeehh, quiero todo el dinero en dulces.

........

El salón estaba repleto. Desde el año pasado había visto a unas 10 personas nuevas. El profesor aun no llegaba a la clase, así que todo el curso se encontraba rodeando a los compañeros nuevos. Todos ya habían escogido un lugar, yo me sentía tranquilo todavía, ya que me sentaría al lado de Krilin como todos los años.

-Eeeeh, eeeh ¡Goku!- Dijo Krilin un poco nervioso cuando iba llegando al lugar en el que siempre nos sentábamos, pero cuando vi mi lugar, ya estaba ocupado por una mochila lila, la misma que llevaba 18 cuando nos saludamos.-Lo siento, no pude encontrar lugar para ti. En realidad le dije a 18 que sentara al lado mío porque como es nueva... bueno, necesita alguien que la guie ¿no? Jaja...- Decía nervioso. Yo, por mi parte, buscaba otro lugar en donde sentarme. Miraba a todos lados, pero los asientos tenían una mochila en cada lugar...

-Muy bien alumnos, siéntense ya en sus lugares.-Dijo el profesor cuando entraba al salón. Todos empezaron a moverse y se me hacía difícil mirar para encontrar lugar, y en un momento todos ya se habían sentado y yo era el único parado en todo el salón.

-Señor Goku, ¿Por qué no se ha sentado todavía?-Me dijo con los brazos cruzados.

-Es quee... no hay más lugar profesor.

-¿Qué? ¿No hay lugar? Por allí hay uno, siéntese de una vez.- Dijo apuntando a una esquina y perdiendo la paciencia. Mire a donde apuntaba, no lo había notado, era el último asiento que quedaba, y era al lado de Milk, la muchacha que me encontré en el kiosco. Entonces era cierto, era una de las nuevas, y por eso seguro no la había visto, era una más de las rodeadas por mis compañeros. Caminaba al lugar y no despegaba la mirada de la chica. Ella estaba escribiendo y no notó que estaba en la misma aula que ella. Cuando me senté, dejo de escribir y se fijó quien era que se había colocado en el asiento de al lado...

Continuara...

Fin del primer capítulo. Espero que les haya gustado!! No se pierdan el siguiente capítulo... "La chica nueva"