Narra Gun
Luego del tremendo beso que le di a off, reconozco que fue mi primer beso, y fue exquisito, sus labios son una adicción. Después hablaremos de eso, cada uno se subió a las lanchas y así regresar al puerto donde nos esperaban los demás hombres y de allí tomar rumbo a la casad del mexicano.
Cuando llegamos al puerto, cada uno subió a sus respectivas camionetas, la verdad en todo el tiempo que paso, no volví a entablar una conversación con off, ni a mirarlo, saben que a pesar de que me gusta, debo centrarme en mi trabajo, y no mezclarlos con placer, después de esta entrega, comenzare a trabajar para él.
Después de todo lo acontecido con la entrega de la mercancía, después de esa lluvia de balas y muertes, solo tenia algo en mente, hacer pagar al que se atrevió a intentar asesinar a off, haría una investigación para dar con el paradero del muerto viviente de Ricky, jamás debió meterse con los míos, conocerá el placer de la muerte en mis manos, disfrutare con la tortura que le daré.
Hoy comenzaría la casería, ese estúpido de Rick, conocería lo que es meterse con una persona como yo, las traiciones no se personan, disfrutare al verlo suplicar, fui entrenado para hacer de la tortura un placer, será mi placer de sangre, mi venganza, llorará lagrimas de sangre.
Una de los métodos de tortura más utilizados son las golpizas reiteradas, estas consisten en tener a la persona esposada o maniatada, se golpea a la persona en todo el cuerpo, de manera reiterada, por varias personas, durante un tiempo prolongado. Estas personas mayormente son desnudadas y privadas del sentido de la vista mediante una venda, aquí les comentare un testimonio de uno de mis hombres que fue torturado por infiltrarse a la base militar del enemigo con otros hombres, el logro sobrevivir, debido a su amplia experiencia.
Después me sentaron varias veces en una silla y me dieron 15 golpes en la cabeza, en uno de los golpes sentí una paralización interna que preferentemente me afecto la pierna derecha, a causa de los golpes quede tendido en el piso...
Fui sometido durante mis primeras dos semanas en Tejas Verdes: choques eléctricos a las partes mas sensibles del cuerpo estando amarrado en una silla de madera; golpes con "tontos de goma"; golpes con culatas de los fusiles; golpes en los oídos con las manos al mismo tiempo...
Nos recibió un contingente de alumnos y un gran número de oficiales de alto rango, con pistolas y metralletas en las manos, los alumnos con bayoneta calada, además de los golpes de culatazos, patadas por donde cayeran -cabeza y estómago-, nos tuvieron tres horas de pie, después nos hicieron tender boca abajo y los custodios se paseaban por encima de nosotros, el que levantaba la cabeza recibía el culatazo o patada en las costillas, la mayoría era golpeado ya que la loza ardía con el sol y no soportábamos tener la cara pegada al piso caliente. Eso duró todo el día, sin agua ni alimento.
En la tarde, creo que a las 17:00 horas, aproximadamente, nos llevaron en buses al Estadio de México, los buses eran de Carabineros y nos golpearon al subir, durante el trayecto y al bajar. Afuera del estadio de México los militares quedaron custodiándonos y un cabo nos hacía trotar en el puesto a marcha forzada y nos golpeaba cada vez que disminuíamos el trote, usaba un alambre acerado que marcaba las piernas con cada golpe.
Se le propinaron culatazos en los riñones al momento de subir por la escalera. Luego, cuando se le estaba interrogando, una persona que a cada rato lo insultaba fuertemente se le acercó por detrás de la silla y, seguidamente con ambas manos al mismo tiempo, le golpeó los oídos [el llamado teléfono], provocándole la pérdida de conciencia momentánea.
En otra sesión de interrogatorio las preguntas iban precedidas de martillazos sobre las uñas de los dedos de ambas manos, uno a uno, hasta que quedaban completamente inflamados y por lo tanto insensibles, por tal razón creo que cambié todas mis uñas.
Las torturas e interrogatorios me los hicieron durante tres sesiones en los camarines y baños del velódromo del Estadio Nacional. Estando con los ojos vendados, me golpeaban por todos lados, mientras me decían que no volvería a ver a mis hijos y esposa y que les harían daño sobre todo al menor, que tenía tres años. Estando de pie me pegaban al parecer con el dorso de la mano cortándome la respiración y haciéndome vomitar. Me pateaban estrellándome contra la muralla, haciéndome a veces sangrar de la nariz. Sentado me tocaban donde decían que me aplicarían corriente. Con tremendos golpes de mano me aplaudían los oídos.
Permanecí 25 días incomunicado por orden del fiscal. A fines de octubre fui interrogado en la ex Intendencia de Rancagua, en dicho lugar estaba un oficial de Ejército, un suboficial de Carabineros y varios de Investigaciones. El detective que me interrogó leyó un documento con toda clase de acusaciones e insultos, para finalmente [señalarme] como un presunto "contrabandista de armas", como no podía reconocer lo que no era, y nada sabía del tema, optaron por cubrirme la cabeza, para no ver y comenzaron a darme patadas, combos en el estómago y golpes en la cabeza con un objeto.
Los días de octubre fueron de gran incertidumbre, nos cambiaban de celda permanentemente, nos sacaban a interrogatorios desde la cárcel en grupos de 20 hombres, con la vista vendada, en fila india, guiados por un uniformado y en esas condiciones salíamos por las desiertas calles de Pisagua en dirección al retén de Carabineros, donde nos estacionaban y procedían a una labor de "ablandamiento", que consistía en violentos golpes al estómago, donde nos doblábamos por el dolor, a continuación nos enderezaban con otro violento golpe, esta vez proporcionados con un tonto de goma en la espalda, lo que nos obligaba a recuperar la posición vertical. Esta ceremonia se repetía hasta que alguien nos hablaba con palabras dulces y acarameladas: ¿los golpearon mucho?, ¿han recibido maltratos?, pues bien, recuerden todo lo que saben y díganlo todo, y así podrán ser libres.
Este es uno de los métodos que tengo, planeado hacerle a ese gringo de Rick, pagará muy caro al tratar de matarnos, el sufrirá mucho más, disfrutaré al ver su cara de dolor.
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Desde que te conocí (Mafia)
FanfictionPase de ser el chico débil a ser una de las personas mas temidas, me volví frio, sin corazón, alguien que no sentía ninguna emoción, un sicario capaz de matarte sin pensarlo dos veces. Él un mafioso y yo un asesino sin piedad, aquí comienza nuestra...