14.- Eliminar las plagas

4 1 0
                                    

Siendo ya bastante tarde, Lycan llego a casa, se echo en el sofá, y encendió la televisión con la idea de mirar unos minutos la programación, pero en muy poco tiempo, se quedo dormido el resto de la noche.

Pasaron bastantes días, donde Lycan aprendía mas sobre si mismo, su raza, sus límites y su potencial, así mismo, exploraba la cabaña con gran detalle y dedicación, encontrando mas de un secreto en ella. En el pasar de estos días y semanas, descubrió que los hombres lobo cambiaban su color de iris según su poder, más allá del color que diferenciaba entre omegas, betas, y alfas, la forma del iris podría cambiar conforme el poder del licántropo también lo hacía. En este tiempo, aprendió a dominar de mejor manera todas sus habilidades, su instinto, mejoro su fuerza, agilidad, resistencia, regeneración. y su control hacia su forma "animal", logrando con esto ser aun mas poderoso que antes,

Pasadas ya varias semanas, donde Lycan no había tenido contacto directo con la sociedad, había escuchado cierto rumor sobre que la institución volvería a su actividad normal, pues el director estaba de nuevo sano, y el colegio estaba por finalizar su reconstrucción. La escuela tenia un gran peso en la ciudad, así que sabría que una noticia así estaría en los noticieros, por lo que decidió encender el televisor para informarse mejor.

- Veamos que tal va todo.

- Y en otras noticias, todo parece indicar que las clases volverán a tomar su curso en l...-

- De pronto, la transmisión se cortó, para dar un aviso urgente

- - ¿Y ahora qué pasa?

        - Noticia de última hora, se informa y alerta sobre una posible explosión en una zona privada de la ciudad, se sabe que la explosión fue aproximadamente hace una hora, a continuación, veremos imágenes tomadas poco después de la explosión, sugerimos discreción. -

Lycan miro con atención las imágenes, recordando perfectamente la zona en la que se situó esa explosión, pero esperando estar equivocado, pero conforme mas lograba ver, se daba cuenta que estaba en lo cierto.

- Ese lugar... mierda, ¿Qué diablos ocurrió? Era de las zonas mas seguras de toda la ciudad, ¿Cómo ocurrió esto? Esta todo en llamas, dudo mucho que Vayolet sobreviviera a eso...

Casi como si estuviera planeado, justo después de que Lycan hablara. Se transmitió una grabación donde se lograba aprecias como una figura salía corriendo del lugar.

- ¡¿Vayolet?! ¿Cómo diablos...? Espera, ese camino, se dirige hacia... carajo.

Apago el televisor, tomo su chaqueta y salió tan rápido como pudo de su casa.

Momentos después, llego justo al lugar abandonado donde Vayolet y el tuvieron el encuentro con los criminales hace ya semanas. De inmediato detecto el rastro de Vayolet dentro del lugar, junto con otros rastros, algunos desconocidos, pero un par de ellos los recordaba de aquel día, empezó a escuchar movimiento dentro del lugar, por que se quedo en una de las ventanas, confundido en que poder hacer.

«Si entro al lugar como lobo, Vayolet me descubrirá y seguro le provocare un trauma, pero si me limito a mi forma humana, con el número de imbéciles que pude detectar, sería muy difícil salir bien librado de ahí»

Sus pensamientos fueron interrumpidos, cuando escucho el detonar de un arma.

- Al demonio.

El disparo había venido del segundo piso del lugar, donde Vayolet se encontraba acorralada contra la pared, teniendo frente de ella un gran número de criminales armados.

- ¡Aléjense de mí! Me iré de aquí, lo juro, solo, déjenme ir...

- ¿Irte? Pero si eres la razón de que estemos aquí, alguien tan especia como tú, merece un trato digno, ¿acaso no nos recuerdas?

- Ustedes... son los de aquella noche.

- Los que golpeaste aquella noche, si, eran mis muchachos, y como no nos gusta tener el mismo problema dos veces, esta vez estamos mucho mejor preparados.

- ¿Con armas? ¿De verdad?

- Bueno, para alguien de tu categoría, elegimos dar un trato mucho más... especial.

- ¿Especial?

- Así es, déjanos mostrarte que tanto.

Justo después, Lycan salto y cayo justo entre el criminal y Vayolet.

- Uno, dos, seis, diez... trece hombres armados para una simple chica ¿es todo lo que pudieron conseguir?

- ¿Angel?

- ¿Sabes Vayolet? Cuando te mencioné que deberías mudarte aquí, no creí que lo hicieras tan pronto, primero debes eliminar las plagas.

En ese momento, el criminal interrumpió, apuntando su arma contra Lycan.

- Si yo fuera tú me quitaría del camino, pues aun llegaran mas con nosotros, antes de que la fiesta empiece.

- Empecemos de una vez entonces

Lycan mostro sus garras, y antes de que el criminal reaccionara, dio un zarpazo contra su rostro, inmediatamente después comenzó su transformación, la cual tardo solo unos segundos. Comenzó a correr y escabullirse usando las paredes a su favor, en cada movimiento rasguñaba y heria a un criminal, a una velocidad tal que para los ojos humanos era apenas perceptible. Con sus garras atravesaba gargantas, estómagos, pechos, dejando que los criminales se desangraran sin saber exactamente que pasaba, solo logrando ver su mirada carmesí. Lycan freno frente al presunto líder de todo el grupo criminal, atemorizándolo al instante, dejándolo helado, cosa que aprovecho Lycan, para clavar sus garras en el pecho de su víctima, pero sin atravesarla, si no mas bien, buscando cierto órgano vital, Lycan sostenía la mirada de su víctima, que entre quejidos y agonizantes gritos, sentía como las garras salían lentamente de él, y antes de que la vida se perdiera de sus ojos, miro como su corazón, estaba en la palma de aquel hombre lobo, el cual cerro su puño, destrozando el órgano, y asesinando al líder. Uno de los criminales, trato de frenar la carnicería, tomando su escopeta y disparando a quemarropa contra el pecho de Lycan, el cual apenas reacciono, mirando como de inmediato se regeneraba su cuerpo, sin dejar rastro de aquel disparo. Lycan tomo del cuello a su atacante, antes de que este tratara de huir.

- Mi turno.

Lycan le arrebato la escopeta, libero a su víctima, solo para golpear su rostro con la culata, golpe que mando al criminal al suelo, aturdido. Cuando apenas iba a reaccionar, el lobo piso su pecho para inmovilizarlo, metió por la fuerza la boquilla de la escopeta dentro de la boca del criminal, y entonces acciono el arma.

- Novato...

Lycan estaba envuelto en su sed de sangre, asesinando, mutilando y torturando a cada criminal que estaba en el lugar, llenando su cuerpo de más y mas sangre. Solo quedaba uno de ellos, el cual Lycan fue cazando poco a poco, hiriéndolo de forma pequeña, pero constante, todo el cuerpo estaba lleno de cortes y heridas. El cuerpo de la victima empezaba a caer, faltándole sangre y energías, el criminal solo trataba de arrastrarse a la salida, pero cuando justo llego a la puerta, sintió las garras del lobo atravesando sus piernas, frenándolo, haciéndolo ponerse boca arriba, para que lo mirara, haciendo que lo ultimo que aquel criminal mirara antes de morir, fuera a aquella bestia de ojos rojos, ya que justo después, Lycan lo degolló de tajo con sus garras.

Lycan disfrutaba de la masacre que había causado, hasta que una voz, le recordó porque estaba en ese lugar.

- ¡¿Angel?!

LycanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora