-SOS UNA MIERDA! TODAVÍA NO ENTIENDO PORQUE EMPECE A SALIR CON VOS!
Me quede quieta antes de abrir al escuchar los gritos que se sonaban del otro lado de la puerta y posiblemente en todo el piso. Pense seriamente unos segundos si entrar o dar una vuelta a la manzana, no quería estar en zona de guerra.
Finalmente me encamine a la escalera nuevamente para ir a la tienda comida de enfrente a comprar algo.
-Podrías cerrar la boca de una maldita vez!- escuche a mis espalda seguido de un portazo y varios insultos de mi compañera de departamento- Hola Kaia.
Matt, el novio de Paige.
-Hola Matt- respondí, él paso rápidamente a un lado y bajó las escaleras.
Lo mire un momento y volví a mi departamento.
Abrí con cautela de que Paige crea que era su novio (posiblemente ex-novio) y quiera revolear algo a mi cabeza, mire el diminuto living que teníamos, despejado, cocina, despejado, estaba encerrada en su habitación. Sigilosamente camine hacia la mía.
-Oh Kai ya estas en casa- dijo saliendo antes de que yo siquiera tocase el picaporte- estoy pasando por un infierno- medio sollozó, la mire y tenía la cara colorada por haber estado seguramente llorando.
Les presento a Paige Harrison, mi amiga y compañera de piso, la conocí un par de semanas después de llegar a la ciudad, ella había puesto un anuncio en internet buscando alguien con quién compartir el alquiler del departamento y voilà, aqui me tienen.
La historia de nuestra convivencia no es tan interesante, lo siento.
-Que pasó ahora?- traté de sonar lo mas consoladora o empática posible, a pesar de que me sentía incómoda viendo a la gente llorar.
-El muy idiota estuvo hablando con otras chicas por internet- hizo un gran puchero- Kai te juro que si hubiesen sido como amigos me importaría una mierda pero se pasaban fotos- empezo a llorar otra vez.
-No llores por él, no vale la pena Paige.
Frote mi mano por su espalda.
-Hoy era nuestro aniversario de diez meses- siguió llorando- ha- había comprado entradas para este club del que escuche hablar-senti como se sorbia los mocos en mi hombro.
-Por que no vas igual? Para distraerte y tal vez encuentres alguien con quien pasar un momento de diversión- Inmediatamente dejo de llorar y se separó asustando me.
Había dicho algo malo? Ups?
-Tienes razon, toda la razón- me miro como si hubiese descubierto el fuego- y como tengo dos entradas vas a venir conmigo, a mierda los hombres.
-Si, a la mierda los homb- espera que?
-Vamos a vestirnos con vestidos muy provocativos y mucho maquillaje e iremos a emborracharnos a este club.
Oh no, no era lo que quise decir.
Por que no llama a su primera opción? Esa amiga que ahora no recuerdo el nombre?
-Tengo un vestido negro que compre hace unas semanas y aun no usé- me sacudió levemente de los hombros- o espera este club tiene una regla con la vestimenta lo olvidé.
Se metió nuevamente en su habitación, solte un suspiro y arrugue la nariz ante la idea de no poder quedarme a descansar en mi cama.
Deje mi mochila en mi habitación, me puse ropa cómoda y camine a la cocina para comer algo.
Veinte minutos después apareció Paige con la cara lavada y varias perchas en las manos, dejo todo en el sillón de la sala y se sentó delante mio.
-Quieres que te cuente sobre este lugar al que vamos a ir?- la miré masticando mi sandwich- bien, por lo que vi en su pagina de internet, porque tienes que ser una especie de miembro para entrar, debemos usar cosas rojas por lo menos ahi dentro, para llegar podemos tener abrigos de otros colores- empezo a enumerar algunas cosas con los dedos- aunque lo mas importante de todas es la discreción, ya sabes es algo así como un club secreto.
-Si es un club secreto, como conseguiste entrada?
Ella sonrió con autosuficiencia.
-Recuerdas mi amiga, Anne?- asentí- su hermano es miembro exclusivo, él nos escuchó, en realidad me escuchó, hablando del lugar y me ofreció entradas- al ver que no conteste, agregó- No es emocionante?
-Es raro.
-No es raro, es una nueva experiencia, conocer nuevos lugares.
-Y por que quieres ir a ahi desde un principio?
-Escuche cosas interesantes del lugar.
-Como escuchaste esas cosas? no que era secreto, discreción y todo eso?
-Simplemente las escuche, tal vez eran dos miembros del lugar.
Me levanté a buscar jugo de la heladera con Paige pegada a mis talones.
-Vamos a ir- afirmó, la miré por encima del hombro- no puedes dejarme sola en esta, acabo de terminar con mi novio y fue tu idea salir, siempre te niegas a salir conmigo.
-No me gustan los lugares cerrados con música super alta y repletos de gente sudando.
-Este lugar no es así, es mas como un bar con música en vivo o por lo menos los jueves - miro algo en su celular- hoy no hay música en vivo, es viernes.
-No lo sé.
-Tampoco lo sabrás si no vamos- me miro con ojitos de cachorro.
-Puedo pensarlo un momento?
-Puedes pensarlo en la ducha, a las once nos vamos- sonrió feliz y se fue a la sala.
Saqué mi teléfono del bolsillo para ver la hora.
08:34 pm
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Red Club
RomanceAlgunos deciden cambiar el camino para ser alguien mas. Algunos deciden ocultar algunas partes. Y otros deciden solo dejarlas ver en el club rojo.