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CAPITULO 13 *¿REALMENTE VINISTE A DISCULPARTE?*

La secretaria parecía haber aprendido la lección, por lo que Feriha decidió dejar la torturarla con su silencio. Después de todo, no era su culpa no conocerla. Lo que si irritó a Feriha fue simplemente que la mujer no debería despreciar a personas que sin antes conocerla.Su respuesta sorprendió a Rita. Cuando los conocidos Emir se sentía ofendidos por lo que estaba en un rango inferior a ellos, a menudo eran más severos. La secretaria miró a Feriha.

💭 ¿me perdonó tan fácilmente?💭 Dijo.

_👱🏻‍♀ " lo siento mucho. No volveré hacerlo" 😌se disculpó.

Durante dos años había estado trabajando como secretaria de la compañía. Durante éste largo y arduo periodo. Ella había aprendido cómo manejarse cuando había problemas.

Después de pensar mucho en cómo había reaccionado antes, Feriha se dio cuenta de que no tenía intención de hacerle pasar un mal rato a la secretaria.

Entonces, cuando la empleada de Carlos se disculpó con ella como si su vida dependiera de que ella la perdonara, simplemente asintió.

_Feriha: "Está bien☺️. ¿En qué piso está su oficina? 🤔 le dijo. Luego, se encogió de hombros y agregó: "Puedo llegar hasta allí sola". 🤗

Sonaba mucho más amigable que antes, lo que fue suficiente para tranquilizar a Feriha de que la misteriosa joven no tenía intenciones de hacerla perder el trabajo.

Pero ella negó con la cabeza e insistió.

_👱🏻‍♀ "No, señorita. El mismo Sr. Sarrafoglü me pidió que la acompañara arriba". 😌

En la Compañía, lo que decía el Sr. ningún empleado se atrevía a desafiar, mejor dicho, lo que Emir quisiera, lo conseguiría de una manera u otra, y como podía percibir su nerviosismo en la voz de Azra, Feriha se daba cuenta de que ella le temía a Emir como todos ahí, lo que no la sorprendía en absoluto.

El hombre tenía una expresión dura la mayor parte del tiempo, y eso hacía que fuera sorprendente si alguien afirmara lo contrario y dijera que Emir no podía lastimar ni a una mosca. En opinión de Feriha, la mayoría de la gente le temía a Emir como Baris y ella misma. Los dos generalmente eran buscapleitos, algo que no debía ser ignorado. Pero, frente a Emir, rápidamente se ponían tan tímidos como ratones.

La secretaria parecía decidida a hacer lo que tenía que hacer, así que Feriha asintió y la siguió hasta el piso 62. Junto a la oficina había una espacioso pero no había ruidos, quizás porque ya muchos empleados se habían retirado y por eso Feriha sintió que el lugar era tan silencioso como un cementerio a medianoche, había un área pequeña con varios escritorios, y en la puerta había un cartel en que se podía leer claramente

👉"Oficina de los Secretarios". 👈

Por el contrario de lo que ella había supuesto, cinco personas seguían trabajando en la oficina y, a través del cristal, podía ver un sexto asiento que estaba libre en ese momento. A Feriha le costó mucho esfuerzo no hacer evidente su sorpresa. Emir, tenía, ¡seis secretarios! Entonces se le ocurrió que, como era el jefe de una empresa tan grande, Emir probablemente tenía un montón de trabajo que manejar todos los días y era lógico que necesitara tantos secretarios.

Un hombre que llevaba gafas se levantó de la silla y se acercó cuando vio a Azra con esta muchacha que aún no conocía.

_👤 :"Hola, Azra, ¿y ella es...?". 😃

Aunque no podía identificarla, Feriha le era bastante familiar. Con sus veintipico de años, parecía una estudiante modelo de la universidad. Esa sonrisa dibujada en su rostro lo hacía ver como nada más que una buena persona. Azra le dirigió a Feriha una mirada incómoda y se volvió hacia el hombre; respondió de forma cortés.