IV

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—¿Cuál era su relación con el señor Saiz? —Hago lo posible por ignorar el hecho de que hablo con mi padre y me concentro en hacer de detective.

—Era mi amigo.

—¿Se puede saber por qué decapita ratas?

—Es un hobby. —Se encoje de hombros.

Suena demasiado loco y asqueroso. Lo miro con el cejo fruncido. Su vista continúa seria, como si no hubiera dicho lo que dijo. Ahora sé que esta es una manía que ambos comparten, ya que anteriormente me lo aseguró. 

No hago más preguntas, dudo mucho que me de alguna pista sobre quien es el culpable. Además, estoy demasiado nervioso con su presencia para permanecer más minutos en este lugar. Opto por pedirle los aparatos tecnológicos que utiliza, estos pueden tener información importante y en este momento cualquier rayo de esperanza puede ayudarme. Quiero resolver esto lo antes posible. 

Decido revisar primero los correos de su celular. Muchos son de su trabajo, anuncios, redes sociales. Pienso que no hay nada importante pero de repente ingresa un mensaje que llama mi atención: 

"Estoy seguro. Ya te dije que esa sangre causa graves consecuencias."

No comprendo el mensaje pero algo me dice que es importante. Abro el chat del que proviene el texto: "Paul" debe de ser algún amigo. Detenidamente leo cada uno de sus mensajes y hay palabras que me provocan sorpresa: "Ratas", "Muertes", "Dolor", "Débil"

Quedo en shock por unos cuantos minutos al leer eso. Todo parece estar demasiado claro pero no me animo a aceptarlo. Con incredulidad sigo revisando el aparato, vuelvo a el correo pero ahora lo hago con más paciencia. Noto que no he revisado papelera y la sorpresa vuelve cuando la abro. Correos de una página web de venta de pelucas y maquillaje indicando que hay pedidos por retirar son los que me hacen abrir grande los ojos. 

Es demasiada información por procesar y no tengo idea de por donde comenzar. Luego de un rato analizando todo me inclino por ir más a fondo con ese tal "Paul" primero. Le envío un mensaje como si fuera Marco y lo invito al parque de la ciudad. Este no tarda en aceptar la invitación y con rapidez salgo hacia esa dirección. 

Me trueno los dedos varias veces en el camino. Los nervios me hacen hacer esto y debo admitir que todo esto me está sobrepasando. 

—¿Paul? —pregunto a alguien que reconozco por su foto de perfil.

—Sí, —Me mira sin reconocerme—,¿Y tú eres?

"El hijo de Marco", "Enzo Dalas", "Un adolescente que revisó un celular y le pareció interesante tu chat". Me entra una gran duda sobre que responder a esta pregunta. El hombre nota mi inseguridad y por ello me apresuro a responder.

—Necesito saber si tienes algún dato que me sirva para resolver un caso que estoy investigando. —Por su mirada veo que no comprende y por ello continúo—.Hace unos días se encontró muerto a Asier Saiz.

—¿Murió? —Abre los ojos como platos.

Asiento y le explico un poco lo que parece haber pasado. No le brindo muchos datos, solo los necesarios para que se sienta en confianza. 

—¿Y por qué vienes conmigo?

—Al investigar me encontré con que la víctima tenía una amistad con Marco Dalas y...

—¿Amistad? —Me interrumpe. No entiendo a que se refiere, le indico que diga lo que sabe—Seguramente él te dijo eso, pero la realidad es que Asier era su amante.

Quedo en shock por segunda vez en el día ¿Amante? ¿A caso mi padre es bisexual? ¿Cómo puede ser posible? No logro articular palabra, las piernas me tiemblan y quedo inmovil en el lugar. 

Paul me ayuda a sentarme en un banco cercano y hago lo posible por volver a la normalidad.

—Por lo que veo te sorprendiste, —Oigo la voz de el hombre—,no tiene nada de malo que él haya sido pareja de otro hombre, si es por eso que te pones así.

Claro que no es por ello. El problema aquí es que aunque entiendo que mi padre no es una buena persona, no es fácil enterarse de algo así tantos años después de que me haya hecho tanto daño. Volver a verlo después de todo este tiempo fue difícil, pero no se compara con el descubrir que tu padre no es nada de lo que creías. Siento que viví con una persona a la que ahora no conozco. 

Siento que mi cabeza va a mil por hora y comienzo a atar cabos... 

La mujer de Marco no sabía que él asistía a su casa porque él lo llevaba cuando ella no estaba.

Tomo mi celular y abro la captura que tomé del celular de mi "padre". Agrando la imágen y noto aquello que antes había ignorado: el remitente "Asier Saiz". 

Seguramente el amante había comprado su maquillaje como drag queen con su correo.

Aunque no deseo saber más sobre la persona que me dio la vida, hay preguntas a las que debo darle una respuesta y eso lo haré aunque deba soportar las consecuencias. 

—Paul, —Llamo la atención de él—,¿Sabes sobre lo que Marco hace con las ratas?

—¿Te refieres a que las decapita y junta su sangre? —Asiento—Lo sé, pero no puedo brindarte información de eso.

—¿Entiendes que puedes estar siendo cómplice de un asesinato? —Me mira sin entender—Quizás Dalas tenga algo que ver en el asesino de Saiz.

—¿Y eso por qué lo haría? —Me encojo de hombros como respuesta, él suelta un suspiro antes de hablar—Soy veterinario y como tal soy quien más sabe de esto, —Empieza—,las ratas son animales que trasmiten muchas enfermedades, puede ser trasmitida por su orina, sangre o incluso su olor; —Noto que no está cómodo hablando de esto—;Marco en un momento me pidió información sobre estos animales y se la di pero nunca pensé para que la quería. Un día me di cuenta de que se había vuelto adicto a asesinar estos animales y le pregunté porqué lo hacía, a lo que me respondió que cuando logras que una persona se contagie con la sangre de las ratas se vuelve débil, no tiene fuerzas ni siquiera para levantarse y lo hace fácil de herir. En ese momento no entendí, pero tiempo después lo hice y me da terror de solo pensar en lo que puede estar haciendo. 

«No lo puedo creer»

Recuerdos que dañan ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora