Destino: Los Angeles (5 seconds of summer)

Capítulo 5: Calum

Cuando llegamos a Los Ángeles era muy tarde, así que tomamos un taxi y nos dirigimos al hotel. El vuelo no estuvo nada mal, 15 horas viendo chicas lindas con faldas cortas ofreciéndonos comida.

Mientras recorríamos parte de la ciudad en taxi no hablamos, todos estábamos ensimismados con la belleza de esa ciudad, era nuestra ciudad soñada, nada más que nuestro sueño hecho realidad.

El hotel estaba ubicado frente a una playa pequeña, pero nuestra habitación no tenía vista al mar. Cuatro camas en una misma habitación una pequeña cocina y un sofá con tv, nada mal para lo poco que pagamos.

—Hey chicos debemos ir a dar un paseo para conocer la ciudad —Dijo Ashton alegremente mientras tiraba su morral en una cama.

—Ashton son —Michael miró el reloj de su celular mientras alargaba la “o” de la palabra— las dos de la mañana, no debe haber nada abierto.

—Pero si esta es la ciudad que nunca duerme —Dijo Luke mientras revisaba la nevera

—Esa es Nueva York, idiota —Michael y yo lo dijimos al unísono, lo que hizo que Luke y Ashton voltearan a vernos.

—No vuelvan a hacer eso —Luke tomó un refresco y se tiró en el sofá —Es demasiado extraño.

—Chicos ignoraron cruelmente mi pregunta —Ashton nos miró y vio que todos negábamos con la cabeza —Son unos aburridos.

—No somos aburridos —Repliqué —simplemente no es buena idea salir un… ¿Oye Michael que día es hoy?

— Miércoles

—Exacto, nadie sale un miércoles a las 2 de la mañana

—Entonces ¿qué quieren hacer?

—¿dormir como alguien normal? — Luke se levantó del sofá y se tiró en la cama a mi lado

—Deja de tirarte sobre las cosas —Michael le gritó y le lanzo una almohada —Si lo rompes lo pagaras tu

—Si, como digas mamá —la voz de Luke estaba llena de sarcasmo, por el rabillo del ojo vi como Michael caminó hacia donde Luke pero antes de que pudiera hacerle algo llego Ashton y se interpuso entre ellos.

—Dejen de pelear por Dios

—No estamos peleando, esa es nuestra expresión de amor… Además, Luke comenzó —Michael se acostó en la cama libre —Ahora por favor acuéstense, mañana debemos tener energía para… lo que sea que vayamos a hacer mañana.

La ciudad estaba muy fresca así que decidí dormir solo con una pantaloneta. Mañana será un gran dia.