No es que mis ojos se hayan quedado sin lágrimas.
No es que mi corazón haya dejado de sentir.
No es que ya no me deprima.
No es que mi cara ha empezado a fingir.
No es que me haya vuelto más seca.
No es que finjo ser feliz.
No es que ahora tenga mi mente hueca.
No es que la tristeza no me volveré a permitir.
No es que ya no me importes.
No es verdad que olvidé todo de ti.
No es ya no tenga ningún conforte.
No es que me quedé sin sueños por cumplir.
Es que mis lágrimas decidieron ya no llorarte.
Y mi corazón me rogó ya no sufrir.
Es que dediqué mucho menos tiempo a pensarte.
Para encontrar más felicidad en mi sentir.
Es que ahora me permito estar más contenta.
Y busco razones para sentirme feliz.
Es que ahora puedo sentirme sin ti completa.
Y lucho para cerrar esta gran cicatriz.
Es que a pesar de que aún te pienso,
no quiero quedarme estancada aquí.
Es que no seguir este dolor tan extenso,
siento que ya es tiempo de dejarte ir.
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Las palabras que se quedaron cuando te marchaste.
Poesía"Mis ojos te siguieron mientras cerrabas la puerta detrás del escritorio. El escritorio y sus papeles no se movieron, pero tú jamás regresaste."
