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𝐏𝐎𝐕. ______ 💠
Desde el incidente donde quede ridiculizado delante de mi aniki y el desconocido ya han pasado 2 semanas y por lo que me eh dado cuenta ese "Kacchan" no ha venido a ver a mi aniki en todo este tiempo, ¿todavía se sentirá mal por lo que me hizo? Ojalá si porque ahora por la culpa de ese idiota tendré que usar un parche en la nuca por el resto de mi vida.
¿Aún sigo molesto por lo que pasó? ¡Obviamente que si! Ese niño no analizó la situación y solo actuó por impulso, además que todavía no cicatrisa completamente y cuando muevo el cuello me duele.
Mi aniki se a sentido triste estas semanas porque ese estúpido no se aparece, pero yo creo que es mejor así, despues de toda la experiencia que eh ganado en el corto tiempo que lo conozco definitivamente no quiero pasar otro segundo a su lado, si me pidieran describir sus defectos me pasaría todo el día hablando de él.
Todo estaba normal y tranquilo por el momento, aniki y yo viendo televisión, kassan cocinando el almuerzo y toosan trabajando como siempre, solo viene en la madrugada, se acuesta a dormir y en la mañana muy temprano se va a trabajar, pero a pesar de no tener mucho tiempo para estar con nosotros es alguien agradable y bueno.
Estaba que disfrutaba esa paz momentánea, hasta que escuche como alguien tocaba la puerta, deje que kassan fuera a abrir y seguí mirando la televisión pero a diferencia de mi, aniki volteo la mirada y sonrió, eso me sorprendió un poco por lo que por la duda voltee también y vi a la persona que menos quería ver en esos momentos, la única persona que era capaz de ponerme de mal humor con solo verla, vi a Katsuki parado en la entrada de la casa y no estaba solo, estaba con una mujer exactamente igual a él solo que está era una adulta y le sonreía a mi kassan como si fueran amigas de confianza.
- ¡Mitsuki-san! ¡Que bueno es verte de nuevo, llegaste justo a tiempo para el almuerzo!- dijo con un tono alegré kassan dirigiéndose a la notablemente alfa de cabello rubio cenizo como su primogénito.
- ¡Claro Inko-san! ¡No llegaría tarde ni aunque quisiera, Katsuki estuvo insistiendo mucho para venir desde hace días!- ví como la de ojos rubis empezó a acariciar bruscamente la cabeza del menor de los Bakugo mientras esté soltaba leves gruñidos dirigidos a su madre, aunque está solo los ignoraba.
- ¡¡Vieja loca, te dije que no quería que nadie se entere!!- ¿ahora que le pasa a este chico? ¿Porque siempre es tan ofensivo con todos? ¿Acaso no respeta ni a su propia madre? ¿Y porque siempre que lo veo párese que su cara está roja? Que niño más raro...
- Kassan, ¿ya está listo el almuerzo? Es que ya estoy empezando a tener hambre...- me dirigi a la peliverde jalando levemente con una mano la esquina de su polera rosa para lograr llamar su atención.
- ¡______, que bueno que me hiciste acordar! Ella es Mitsuki-san, es la mamá de Katsuki y a venido a conocerte- kassan dirigió su mirada a mi y me empujó levemente hacia el lugar donde se encontraba Mitsuki-san junto al niño de mal carácter.
