Varias horas después, exactamente a la 1:29 de la mañana, Kibum golpeo la puerta de Minho.
Tenía una copia de la llave de su apartamento, pero no podía pensar claramente como para tomarla del tazón de cristal en su mesa. Además, incluso en su mareado y enfadado estado, algo le dijo que sería descortés entrar en su casa sin llamar en medio de la noche.
Por lo que volvió a golpear la puerta hasta que, después de algunos minutos, escucho los sonidos que se acercaban.
Minho abrió la puerta mientras pasaba una camisa por su cabeza. Por un momento, Kibum quedó sorprendido por la visión de su pecho desnudo con sus músculos definidos y sin rastro de vello.
Era un pecho muy bueno. Un reconocimiento ridículo e irrelevante que probaba su deshecho estado mental.
Minho bajó su camisa para cubrirse y lo observó.
—¿Qué paso?
—Nada— dijo estúpidamente. Su mente comenzaba a funcionar lo suficientemente lucida para saber que lo había levantado en medio de la noche. Su cabello era un desastre y su mentón estaba cubierto de barba. Parecía adormilado y confuso, y extrañamente sexy.
Ese pensamiento lo hizo sentirse extrañamente consiente de sí mismo de una forma que nunca se sintió junto a Minho.
—Perdón. No debería haberte despertado.
El alto lo miró impacientemente, dejándole claro que creía que sus palabras eran absurdas. Lo jalo hacia adentro y cerró la puerta detrás de ellos.
Kibum no era consciente de cómo había sucedido exactamente, pero terminaron sentados lado a lado en el sofá. Los ojos de Minho se veían de un gris metálico en la tenue luz de la sala de estar mientras lo observaba sobriamente.
—¿Pasó algo con Woohyun?
Kibum asintió con furia.
—Me boto. El bastardo terminó conmigo.
Minho inhalo pesadamente y dejo salir el aire. Kibum escucho la respiración, a pesar de que lo estaba viendo.
—Lo lamento ¿Qué paso?
—No lo sé realmente— se sentía confuso, como si hubiese bebido demasiado, a pesar de que sólo había bebido una copa de vino en la cena. Se sentía adormilado, como si alguien la hubiese golpeado en la cabeza y aún no hubiese procesado el impacto. Mayoritariamente se sentía enfadada —Empezamos a discutir y luego no pudimos detenernos.
—¿Sobre qué discutían?— el tono de Minho era suave, cuidadoso. Nunca había estado emocionado con Woohyun, pero tampoco quería verlo herido.
—Sobre ti mayormente. Cree que es inapropiado que seamos tan cercanos. Lo llamó “intimar” haciéndolo sonar como que algo sucio sucedía en nuestra amistad.
Cuando Minho no respondió, Kibum dirigió su mirada en su dirección. Él se sentaba rígidamente a su lado, observaba el suelo. Finalmente dijo:
—Lo lamento si me interpuse en su relación. No debí haber pasado por tu casa antes.
—No, no es tu culpa. Él estaba siendo estúpido y posesivo. Además, había mucho más que eso. Uso eso como excusa para decir lo malo que soy en las relaciones. Diciendo que soy demasiado frío y controlador, y que me reprimí por mucho tiempo para estar con alguien de verdad.— su voz se quebró al escuchar sus palabras y como lo hicieron sentir —Bastardo— se calló por un minuto, miraba hacia abajo, al espacio vacío de aire, pero su enojo estaba cambiando a algo más —No creo que tuviera razón sobre mí— dijo finalmente.
