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El viernes después del trabajo Deku y Todoroki acompañaron al rubio a hacer unas compras para los cambios que tenía planeado hacer en su casa, compraron pintura, muebles y todo tipo de elementos que el rubio creyó necesitar.

Deku no pregunto más por su enamorado y Bakugou lo agradeció pero si tuvo que acompañar a Midoriya a comprar un regalo para su suegra y escuchar lo genial que era mientras contaba como le gustaba pasar tiempo con los padres de su novia y por eso había decidido pasar el próximo fin de semana los cinco juntos lejos de la ciudad. Contaba todo con tanta energía y alegría que el rubio solo quería chupar limón para cortar con tanta dulzura.

Ese fin de semana Bakugou lo estuvo espero por casi tres meses, espero tanto tener esa paz, esa tranquilidad, ese silencio placentero y esa libertad que cuando la tuvo se enojo pero no estaba enojado por tenerla, estaba enojado porque no podía parar de pensar en ese pelirrojo.
Deku se había ofrecido a ayudarlo con la remodelación pero Bakugou se nego diciendo que no necesitaba de su patética ayuda que seguro lo iba a atrasar y que no quedaría como él quería y un montón de excusas más que solo servían para tapar el verdadero motivo.
Quería estar solo, si, talvez era algo obvio pero el quería estar a solo y sin pensar, no quería hablar, solo pintar, hacer fuerza con muebles y mancharse la ropa. Todo lo que esté relacionado con los cambios en su casa era mejor que pensar pero pensó más de lo que deseo y se odió por eso.

Estaba acomodando la ropa en el nuevo Placard cuando encontró la remera que había usado la noche que lo conoció y gruñó, se sentía patético parecía una colegiala enamorada ¿Que estaba pasando con él? Él no es así. Se acordó que lo conoció pelinegro y si tuviera que decir la verdad no sabe que peinado le queda mejor, el rojo que tenía ahora es hermoso y tan rojo como sus ojos ¿Lo habrá hecho con esa intención?. Se supone que la gente cuando se hace tipo de cambios de look es porque cambian algo de ellos mismo, entonces si el que tuvo el cambio de look fue Kirishima ¿Porque Bakugou sentía que había cambiado él?. "Quizás cambiamos los dos esa noche". Pensó. Frunció el ceño y la tiró para que se pierda con el resto de la ropa.
El resto del fin de semana se baso en lo mismo, el tratando de no pensar y de solo escuchar música, comprando cosas que necesitaba, acomodando y descansando. Eso fue lo que busco que pasará así que estaba satisfecho.

Una semana se cumplió del reencuentro.

Kirishima estaba en la caja y agradecía que no hubieran tantos clientes porque si no no podría seguir mirando por la ventana la entrada del hospital de enfrente para ver si lograba ver pasar al rubio.
Decir que se sentía poco hombre y que probablemente sea el hombre menos varonil del mundo es un poco exagerado pero Kirishima sentía que era peor que eso. Se siente un cobarde. Le dedicó tantos suspiros, tantos minutos, tantas palabras y tantos, tantos, tantos pensamientos a Bakugou que saber que lo tiene enfrente y que no se animó a cruzar en toda la semana lo deprimía cada vez más.
Vio por la ventana como Momo y Todoroki hablaban con Denki mientras reían y se asustaban. Suspiró y apoyo su cabeza en sus manos mirando de nuevo al segundo piso ¿Por qué ellos no podían tener una relación así?, ¿No podían al menos ser amigos?, ¿Conocerse? Entiende que es incómodo conocer a alguien después de estar una noche pero sabe que se podría por lo menos intentar. Piensa también que Bakugou es poco masculino, sabe que tiene sus datos y su número de teléfono ¿Le cuesta tanto mandarle un mensaje? Quizás el cenizos después de verlo ya no quiere volver a saber de él.
Siguió mirando por la ventana un par de minutos perdido en sus pensamientos hasta que una mano paso por sus ojos y lo miró de reojos.

- Amigo... No te va a comer.

- ¿Por qué no?.- hizo puchero.

- Porque es un edificio.

- Yo si quería que me coma.

- ¿Eh?

- ¿Eh?.- vio la cara de confusión de Denki y se rió por lo bajo.- Nada, ¿Cómo te sentís?.

Esa nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora