¿Stalker?

Vas a matarlo

Miró la puerta con un puchero en sus labios.

"¿Por qué tardan tanto si solo iban por una botella de agua?"

Revisó la hora en su celular y suspiró.

"Me harté."

Se levantó con pereza y caminó hasta la puerta, literalmente llevaba 25 minutos esperando a que los demás llegaran a la sala de prácticas. Abrió la puerta con molestia y asomó su cabeza en ambas direcciones.

"OH, HYUNG."

La voz de Soobin lo llamó a la lejanía. Bufó molesto y caminó con rapidez hasta su cuerpo, más que dispuesto a golpearlo por el retraso.

"Por un demonio Soobin, llevo esperando 25 minutos."

Dijo molesto, ignorando a las personas frente a él.

"Hyung..."

Soobin apuntó detrás de él, haciendo que Yeonjun se girara.

"Yo también estaría molesto."

Hoseok sonrió de oreja a oreja, dejando que sus dientes fueran visibles.

"Te dije que los chicos estaban ocupados, no debiste haberle dicho a Jungkook que los llevara a comer."

Esta vez había sido Seokjin el que había hablado.

"Lo siento."

Hoseok rascó su nuca apenado, aunque en realidad era Yeonjun el que se encontraba literalmente congelado frente a ellos.

"Lo siento mucho."

Hizo una reverencia frente a sus mayores.

"No los había visto."

Su cuerpo se relajó y levantó la mirada.

"Hoseok, muestrales lo que te dije."

Sus ojos se entrecerraron cuando el nombrado llevó su mano detrás de su espalda.

"NO, SOOBIN CORRE. TE VA A MATAR."

Su cuerpo se abrazó con fuerza al de Soobin, mientras intentaba hacerlo moverse de su lugar.

"SOOBIN, MUÉVETE. ES UN CUCHILLO."

El rostro de Soobin demostraba lo avergonzado que se encontraba. Por otro lado ambos chicos lo miraban confundidos, en una lucha mental entre reír o preguntar a que se debía su reacción.

"SOOBIN, NO SEAS IDIOTA. CORRE."

La paciencia de Soobin era suficiente para ello, pero su vergüenza no.

"Lo siento mucho, hyungs."

Soobin sonrió forzadamente mientras intentaba quitar a Yeonjun de su cuerpo.

Hoseok comenzó a reír con incomodidad, mientras Jin se había apiadado del pobre Soobin. Ayudándolo a separar a Yeonjun de él.

"Yeonjun hyung, ve a la sala de prácticas."

Dijo sonriendo.

"No...él quiere matarte."

"Por favor, hyung."

Yeonjun conocía bien ese tono, la paciencia de Soobin estaba llegando a su límite. Era el mismo tono que usaba su madre cuando era pequeño y hacía un berrinche en público.

"Si, Soobin."

Su boca hizo un pequeño puchero. Hizo una reverencia a sus mayores y se giró levemente.

"Pero te vigilo, Hoseok hyung."

Y después de decir eso comenzó a caminar de vuelta a la sala de prácticas, con la cabeza agachada y sus pies arrastrándose. Pudo escuchar la risa de Hoseok, no había sido una risa exagerada pero sabía que sus sunbaenim los consideraban unos bebés por lo que podía imaginarlos viéndolo como un cachorro que acababa de ser regañado.

Después de cerrar la puerta de la sala de prácticas caminó lentamente hasta la esquina de la habitación, se sentó con las piernas cruzadas y comenzó a jugar con sus manos en el piso.

5 minutos pasaron y nadie volvía por lo que decidió tomar su celular para poder leer un poco.

"No hice nada malo, ¿Cierto?"

Su razonamiento le decía que de estar en una situación similar a la de su AU no dudaría en ir a buscar a Soobin.

"Tae es demasiado inteligente, se que puede cuidar de Kai muy bien. Si, obvio puede cuidar de Kai."

Ladeó al cabeza conforme seguía con las capturas, o al menos así era hasta que...

"Noooooo, Hoseok hyung ¿Qué hiciste?"

Su mano viajó hasta su mejilla y sus ojos miraron la imagen aterrorizado.

"¿Qué pedo?¿Qué pedo?"

Parpadeó con rapidez, intentando razonar todo lo que acababa de pasar.

"¿Cómo puede dudar de mi bebé? Aceptaste matarlo ¿Y ahora dudas de él? No te reconozco, hyung."

Sacudió su cabeza confundido.

"¿Cómo que adiós Kai? No, Kai no. Él estaba con Tae."

Frunció el ceño.

"Drogaron a Tae, eso tiene más sentido. Espera...¿Drogaron a Tae?"

Bloqueó su celular y miró el piso aún confundido.

"No eres un bebé, Yeonjun. Yo sé que no lo eres."

18 minutos después la puerta volvió a abrirse y tres animados maknaes entraron sonriendo.

"Hyung, te trajimos Japchae."

Hueningkai levantó la bolsa con comida.

"Oh, ¿Soobin hyung te regañó de nuevo?"

Yeonjun levantó su rostro, mostrando su puchero.

La puerta volvió a abrirse y Soobin entró rápidamente.

"Hyung, no puedes gritarle cosas así a la gente."

El líder suspiró.

"Sabes que a nosotros no nos molesta como reaccionas a tus historias, pero debes aprender a controlarte. Si no puedes con esa sencilla tarea entonces no deberías leer cosas que te pongan de esa forma."

"¿Puedo preguntar que pasó?"

La voz de Taehyun interrumpió a Soobin.

"Le gritó a Hoseok hyung que era un asesino."

"YO NO HICE ESO."

Se levantó ofendido.

"Sólo le dije que iba a matar a Soobin..."

"Hyung."

Reclamó Beomgyu.

"Debes cuidar más ese tipo de cosas."

"Pues si, pero él se rió y aún así Soobin me está regañando."

Bajó la voz y dejó que su cabello cubriera sus ojos.

"Además...no solo Beomgyu desapareció, ahora también Hueningkai, y drogaron a Taehyunnie."

Sorbió por su nariz a la par que mordía su labio inferior con algo de fuerza.

"Hyung..."

Soobin suspiró y se acercó a él levemente. Del otro lado de la habitación los tres menores los miraban en silencio.

"Lamento que Kai desapareciera, hyung. Te prometo que lo vamos a encontrar."

Soobin extendió sus brazos y Yeonjun se acercó para poder esconder su rostro en el cuello contrario.

"¿Acaba de decir "Vamos"?"

Kai susurró.

"Sip, eso dijo...Al parecer te vamos a encontrar."

"Cada día perdemos más a Soobin hyung."