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Ambos caminamos hasta la dirección en donde estaba mamá, no podía creer lo que estaba viendo, pero era ella, la verdadera Grace.
Logre ver que Diego camino hasta que dar a lado de ella, quise detenerlo, pero el sólo se acercó aún más, ella le sonrió y yo solo observe.

Diego- ¿Escuchaste?- pregunto mirándome- Es su cita

Grace- ¿Tienes algún problema con eso?- cuestióno mirandolo

- No para nada, es sólo que nos sorprende- trate de arreglarlo

Diego- Si, la idea de que ustedes dos... no puedo imaginarlo en mi mente, eso es... repugnante- dijo pensativo, mientras mantenía sus brazos cruzados

Grace- ¿Eres un poco extraño? ¿Verdad?- nos miro algo incómoda

Diego- Si- sonrió levemente- Bueno, no- corrigió de inmediato

- ¿Sabes en donde está Reginald?- pregunte cambiando el tema

Grace- Dijo que tenía una reunión breve y que volvió pronto, eso fue 20 minutos atras- explicó rápidamente

Diego- No hay que hacer esperar a una dama- sonrió y me miro

Grace- Diganselo si lo encuentran- dio un trago a su bebida y se comenzó a alejar

Diego- Oye, Grace- la llamo provocando que se detuviera y nos mirara confundida- Fue un placer conocerte

Grace- Igual- nos sonrió y se alejó

- Eso fue... emotivo- asenti con media sonrisa- Pero es tiempo de seguir el plan, cariño

Le di un beso rápido a Diego y subi al segundos piso, al llegar al pasillo, pude ver como uno de los rusos golpeaba a cinco.

- Por favor,  ¿Dime que no acabas de golpear a un niño?- pregunte atrayendo su atención

El hombre no respondió y comenzó a acercace a mi. Era hora de la pelea, me quite los tacones y corrí hasta impulsarme y saltar sobre el. Logré golpearlo, pero también logró devolverle el  golpe. Cinco apareció de nuevo y se encargó del hombre, mientras tanto yo me percaté de como dos de los otros hombres, golpeaban a Diego. Lila sólo paso ignorando el pedido de ayuda que le hizo, camino hasta el hombre ruso que peleaba con cinco y lo atacó.

- No sabía que alguien que estuvo en el manicomnio peleará así- músite para mi misma

Ayude a Diego, golpe a unos hombres y cuando logramos safarnos, mire por la ventana y me percaté de que Reginald y Grace estaban afuera, listos para irse.

Diego- Papá- dijo con rapidez y me miro

- Vamos- corrí bajando las escaleras

Para cuando salimos de la casa, el ya se había ido, y cinco sólo estaba ahi parado.

Diego- ¿Era el?- pregunto deteniendoce junto al pequeño

Cinco- Si- dijo algo serio- Saben, intuyo que papá está envitandonos

Lila- Lamento ser aburrida chicos, pero, es hora de que nos largemos- dijo comenzando a caminar

Mi mirada se posó en Lila y claro que la de cinco también, el había notado como la mujer había peleado allá arriba.

- ¿Cuándo hablas en plural? ¿A quienes te refieres?- pregunte sería

Lila- No veo muchas ambigüedad en este caso- respondió obvia

Cinco- Escucha, no se quien eres, ni de donde vienes, pero como sea, mi consejo, es que regreses de inmediato antes de que mi hermana te mate- amenazó provocando que yo sonriera levemente

Diego- Tiene razón cinco, vámonos- pidió acercandoce a nosotros

- ¿Enserio?- pregunte mirandolo mal

Lila- Acabo de salvarte la vida, niño basura- dijo molesta- Si no hubiera llegado, de ti sólo hubiera quedado un blazer y dos calcetines sangrientos

- Escuchame- la mire amenazante- Numero uno, no lo llames ni lo basura y número dos, no depende de ti para salvarlo, me tiene a mi y a los demás- dije mientras presionaba con fuerza su hombro

Sin más me aparte y me paré nuevamente junto a cinco, el cual aún la miraba mal.

Cinco- Eres demasiado buena, preguntas demasiado, sabes demasiado, y luchas como una profesional

- El niño tiene un punto- asenti cruzandome de brazos- ¿Te enseñan a pelear en el manicomnio?

Diego- Es un buen punto- se nos unió está vez

Lila- ¿Entonces como se como cuidarme de pronto soy la villana?- pregunto algo indignada

- Déjame pensarlo...- hice una pausa- Si, talvez si

Cinco- No se quien eres, pero me fastidias y la fastidias a ella- me apunto- Y no es bueno que se sienta enojada, así que mejor te apartas- pidió con firmeza- Si vuelvo a verte, vamos a matarte

- Estas advertida, chica basura- sonreí a medias

Cinco no dijo nada más y se alejó de nosotros, sin mas también me aleje, note que Diego se quedó con Lila, pero no me me molestaba, esta vez no, sabía que le restregaria el "¿Porque no lo ayudó allá arriba?". Era un punto a nuestro favor.
Diego nos alcanzó minutos después, era hora de volver a casa y tomar una buena siesta.

Volvimos a la saca de Elliot, agotados, golpeados y sin nada de información sobre Reginald.

Stay away || Diego Hargreeves y tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora