Entrégame tu corazón de nubes.

19 3 0
                                    

Si compartimos algo especial con alguien, ¿cómo sabrá que fue especial para nosotros?

Podría iniciar con nuestras miradas cruzadas, nuestras voces nerviosas o nuestras frases, miles de frases clavadas en el corazón.

Sin hablar, sólo con vernos podemos entender tantas cosas, no somos distintos pero nos complementamos, somos como una sola persona.

Le damos un punto, un punto y seguido, como un libro, hemos escrito tanta historia, que es momento de una pausa, pausa, pausa la música, el tiempo, la conversación, la antigua relación que teníamos y dime, ¿qué somos ahora?

/Mensaje de whatsApp/
-Si algún día me subiera al camión, ¿me darías una monedita?
-Jajaj, claro, ¿por?
-Entonces sería la moneda de la suerte

4 palabras, un sentimiento "moneda de la suerte" como algo tan sencillo, nos puede retumbar en la cabeza por minutos, minutos que se vuelven horas, horas que se vuelven días, días que se vuelven meses, meses que se vuelven un libro.

Cada pregunta que me surgía era contestada con tu amor, paciencia y dedicación, hasta el momento es grato cada momento que me regalaste.

/Mensaje de whatsApp/
-Tengo que decirte algo, pero no sé si sea el momento.
-Dime, estoy segura que si no es el momento viajaré en el tiempo para decirte que no lo hagas.
-De verdad que no tengo idea de dónde sacas tantas ideas.
-Aún es un misterio para el universo entero.
-Jajaja vale, pues, me gustas.
-¿Es... en serio?
-Sí, sé que es muy probable que ya no sientas lo mismo por mí, pero quería asegurarme que lo supieras.
-No lo dudes, también me gustas, aún, escuchar tu voz, lo lindo que eres, tu sonrisa, tu cabello, simplemente espectacular.
-Vaya mi niña, tú también eres increíble, también tienes una linda sonrisa Jul, me encanta tu voz, es demasiado tierna.

¿Es muy egoísta decir que fui la persona más feliz del mundo? No importa, no hay que comparar felicidades, pero aquella se quedó tan dentro de mi corazón, que aún la siento y me hace querer gritar, correr, brincar, decirle al mundo entero que te amo.

Como era costumbre, volteé al cielo y parecía que me entendía, pues en ese momento se despejó y todas las nubes me permitieron ver el brillo, el brillo de las estrellas y sentirme conectada con él.



Sé feliz como el cielo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora