Capítulo 16

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—¿Qué estás haciendo? —Me recuesto en el umbral de la puerta y ella me mira sorprendida

—Em...Yo. Lo siento por lo del plato, estaba buscando helado. —Rejunta las piezas rotas del mencionado objeto y las tira al pequeño bote de basura.

—Pensé que tu horario de robar comida era a la media noche —Comento y ella me sonríe.

Grave error; No puedo evitar dejar de pensar en varias cosas cuando me sonríe.

Ramón cálmate.

—Pues hoy quise adelantarlo. En tu casa no hay helado de fresa ¡Es el mejor de todos los sabores y en tu casa no hay ni un poco! —Chasqueo la lengua al escuchar su comentario ¿El mejor de todos? Ya quisieras

El mejor siempre será el chocolate.

—El helado de chocolate siempre superara a los demás sabores de helado—Ella frunce el ceño

—Por supuesto que no. El fresa es el mejor

—No, el chocolate.

—Fresa

—Chocolate

—Fresa

—Fresa

—Chocolate —Sonrió al ver que cayó en mi trampa

—Me caes mal —Hace un puchero y habré el refrigerador

Mi vista cae a un libro que se encuentra en la repisa de la cocina.

Miro de reojo a Poppy, sigue buscando el dichoso helado. Agarro el libro y leo el nombre de este

Perdido en ti

¿Acaso esto es un libro de romance? Dicen que no se debe juzgar un libro por su portada, pero claramente este es uno de romance. Me sorprende que Poppy lea este género, según recordaba le disgustaba muchos los "Típicos clichés románticos" como ella los llamaba.

Me atrevo a abrir el libro y leer unas páginas.

"Introduzco uno de mis dedos en su intimidad y la escuchó soltar un jadeo. Una de mis manos masajea su endurecido pezón mientras que con la otra aumento el movimiento en su húmeda y caliente entre pierna

—C-Caden—Dice entre gemidos, lo cual me pone aún más duro

Acelero los movimientos y suelto un par de maldiciones mientras lo hago. Me siento en el jodido paraíso al hacer esto, no me quiero ni imaginar que será estar dentro de ella. Sus caderas se mueven con desesperación y deseo pidiendo más. Sé que está a punto de llegar al clímax

—Vamos Nube, déjame sentirte"

Trago grueso mientras cierro el libro. Definitivamente abrí el libro en la página equivocada. La curiosidad me mata y vuelvo a abrirlo. Aún hay más escenas así.

Si alguien hace unos minutos me hubiera dicho que Poppy lee libros eróticos me hubiera echado a reír.

—Bueno supongo que me tendré que conformar con tu querido y amado helado de chocolate— Destapa él vote de helado y hunde una cuchara en este para luego llevársela a la boca.

Ganas de estamparla contra la pared y besarla con todas mis fuerzas no me faltan.

—¿Qué me miras?

—Nada en particular— Suelto de inmediato —No tenía idea que te gustaran este tipo de libros— Sus ojos se ponen en blanco al ver el libro que está en mis manos

Intensamente EnamoradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora