❝呪い❞
▭ 𝓢𝓲 𝓺𝓾𝓲𝓮𝓻𝓮𝓼 𝓵𝓵𝓮𝓰𝓪𝓻 𝓵𝓮𝓳𝓸𝓼, 𝓹𝓾𝓮𝓭𝓮𝓼 𝓱𝓪𝓬𝓮𝓻𝓵𝓸 𝓼𝓲 𝓽𝓮 𝓵𝓸 𝓹𝓻𝓸𝓹𝓸𝓷𝓮𝓼.
Granja de humanos, una cruda realidad ha sido descubierta y ahora los que les espera será peor. Entre los cuatro, lograrán escapar de...
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𝓑𝓸𝓼𝓺𝓾𝓮 𝓲𝓷𝓯𝓮𝓼𝓽𝓪𝓭𝓸 ═════════ ❃ ═════════
—Estoy contenta, tu herida se curó bien. . .¡Creo que puedes quitarte el vendaje! —comenta la rubia al lado de la de orbes naranjas, sacando el parche que cubría la oreja de Ray— Para mí, está bien, es solo una incisión. . .
Frunció el ceño sin dejar de mirar la oreja del chico.
—Gracias Anna. . . Por cuidarme la herida y ayudarnos con los preparativos. ¡Y gracias de nuevo a todos! —dirigió esto último a los demás.
—No tienes que agradecernos, no hicimos mucho, fue lo mínimo para ayudarte. . . Hubiéramos preferido acompañarlos. . . Incluso si sabemos que no es posible. Para ser sincera, queríamos ir todos juntos. —dice esto último teniendo una sonrisa triste en su rostro— Don y Gilda son los más frustrados con esto. . . Ellos son quienes más preocupados de no poder acompañarlos en este viaje pero. . . Todos sabemos. . . Que esta es la mejor opción posible. . . —la repentina caricia hacia su cabellera lavanda la puso rígida. Se siente extraña sentir el tacto de alguien más tocar su cabeza— A fin de mantener a todos vivo, que es lo más importante. Ellos realmente confían en ustedes.
Al día siguiente, se encontraba el grupo con los trajes puestos. Llevaban mochilas y armas en su espalda. Se estaban despidiendo de sus hermanos, a la de ojos naranjas le dolía tanto que se echaría a llorar ahí mismo si no fuera por el azabache, quien jugaba con su mejillas.
—Bien, aquí vamos!
—WAAAAAH! EMMAAA!
—¡LESSIE!
—Si te haces daño, no te lo guardes, ¡dilo!
—¡Sobre todo no te fuerces!
—¡Si!
—Ray también, ¡Eh! ¡¡No te pongas en una situación peligrosa!!
—Entendido.
—Señor, me gustaría decirle algo, ¡por favor! Por favor, traiga a ellos tres de regreso con vida. —las palabras que soltó ganó la mirada sorprendida del pequeño grupo.
—Gilda. . .
—Soy perfectamente consciente de que esta expedición es particularmente peligrosa. . .¡incluso para ti! —exclamó con su mirada en el suelo— Y también soy consciente de que las cosas pueden estar yendo muy mal. . . Y que hay algunos riesgos y situaciones inevitables. . . Es por eso. . . Te lo imploro, en caso de que te veas obligado volver aquí, si las cosas van mal. . .
