(...)
A la mañana siguiente Kruspe despertaba en su cama con una fuerte jaqueca, la noche anterior había bebido demasiado.
El hombre de bellos ojos azules camino hasta el baño para tomar una larga ducha, luego de dicho baño se dispuso a revisar su móvil. Leyó unos mensajes de su hija Kira y otros del trabajo.
Camino hacía la cocina y preparo café, mientras bebía un poco del mismo encendió un cigarrillo y sin pensar marcó el número de Yokasta.
Llamada.
Yokasta : - Hallo Kruspe, disculpa pero debo cortar -
Richard : - Hallo Yokas, no cortes por favor -
Yokasta : - Otro día hablamos por ahora no quiero oírte -
Richard : - Yokas, necesito verte quiero disculparme por todo -
Yokasta : - En estos momentos no me encuentro en Alemania, cuando vuelva veré si podemos hablar -
Richard : - ¿No estas en Alemania?, ¿Donde estas?, ¿Estas bien? -
Yokasta : - Estoy bien, gracias por preguntar, nos vemos luego -
Richard : - Espera Yokas, ¿Yokas? -
Fin de la llamada.
(Richard)
Yokasta corto la llamada, intente volver a llamarla pero no atendió. ¿Será cierto que no esta en el país?. De todas formas a mi eso ya no tiene que importarme.
Fui hasta el estudio y me encerré allí todo el día, necesitaba un día solo con mis guitarras y nadie más.
(...)
(Yokasta)
Le corte la llamada a Kruspe encendí un cigarrillo y comencé a fumar.
Camine hasta el balcón, mire el hermoso paisaje que me regalaba la ciudad de Moscú cuando la voz de Till me llamo.
Till : - ¿Yokas? -
Me giré a la derecha y allí en el balcón de al lado estaba Lindemann.
Yokasta : - ¿Cuándo volviste? -
Till : - Hace unos minutos, justo iba a llamar a tu puerta pero te encontré en el balcón -
Yokasta : - Esto de ser vecinos de balcón es divertido -
Till : - Sí lo es, ¿Te encuentras bien? -
Yokasta : - Sí, solo salí a ver el paisaje -
Till : - Bien, por suerte hoy se terminaron mis charlas de negocios, ¿Salimos? -
Yokasta : - Claro -
Till : - Genial, ponte algo cómodo -
Yokasta : - ¿Tienes algo en mente? -
Till : - Es una sorpresa -
(...)
(Narrador)
Till manejaba mientras Yokasta miraba por la ventana.
Yokasta : - ¿Aún no me dirás a dónde vamos? -
Till : - No, dije que es una sorpresa, no seas impaciente -
Yokasta : - Está bien, es que tengo curiosidad -
Till : - Solo unos minutos más de viaje y llegaremos -
Yokasta : - Esta bien -
Lindemann estacionaba su camioneta bajo el primero y luego abrió la puerta de Yokas.

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Das Modell
Fiksi PenggemarElla lucho para aceptarse como es, él lucho para obtener todo lo que tiene, por cuestiones del destino sus caminos se cruzaran y solo ellos sabrán que hacer con lo que se le presente en sus vidas.