Das Modell

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(Yokasta)

Hace unos tres días que fue el evento en el que conocí a parte de mi banda favorita, Rammstein, miraba las fotos que tome esa noche recordando el momento en que conocí a Till, Richard y Paul. Minutos después revisaba parte de la última sesión de fotos en la que trabajé.

Miré el reloj de la sala, éste marcaba las 20:00 hs, así que decidí darme un descanso de mi vida rutinaria dando un paseo por el Central Park de New York.

Luego de unos cuantos minutos llegué a mi tan adorado parque, para mi buena suerte la pista de patinaje sobre hielo Wollman Rink ya estaba abierta así que me lance sobre el pequeño puesto que alquilaba patines. Pocas cosas me tranquilizan en está vida una de ellas es patinar sobre hielo.

(...)

(Till)

Hace unos días que estoy en New York, ya que luego del evento en el que acompañe a Sophia decidimos pasar unos días juntos aquí, pero esta mañana Sophia me despertó con la noticia que tenía que viajar a Rusia porque había olvidado que tenía un compromiso allá. Ella quería que la acompañara pero me negué ya que quería pasar unos días aquí, tuvimos una discusión y Sophia aceptó de muy mala manera el hecho de que me iba a quedar en New York.

Traté de tranquilizarla y después bajé con ella para acompañarla hasta el aeropuerto.

Pasadas unas horas estaba de nuevo en mi habitación de hotel, miré por la ventana y el bello paisaje Neoyorquino con sus luces nocturnas y algún poco de nieve o escarcha en sus árboles y calles me invitaron a dar un paseo. Nada mejor que caminar por el famoso Central Park, pensé, amo las caminatas de invierno o en una fría noche.

Tome mi grueso abrigo negro de pana y un gorro de lana gris, y partí rumbo al parque. Luego de una agradable caminata bajo las luces de New York llegué a mi destino, escribí algunos poemas en mi móvil al sentirme inspirado por tan bello paisaje de gente que iba y venía.

Luego de estar sentado en una banca por varios minutos decidí acercarme a la pista de patinaje sobre hielo que se encuentra al aire libre, me situé en una orilla para mirar a los pequeños y sus padres jugar en la pista hasta que unas largas faldas negras flotaron sobre el hielo y captaron mi atención, parecía una bella hada oscura pero no maligna, oscura por el dolor que había vivido, pero aún así sonreía mientras patinaba y sus ojos se iluminaban con las luces de los faroles del parque.

Estaba completamente hipnotizado por ella, luego de algunas piruetas la joven se enredó en sus propias faldas y cayó al hielo, rápidamente corrí hasta ella mientras me resbalaba por el hielo.

Till : - ¿Estás bien? -

(Yokasta)

Me encontraba patinando muy feliz hasta que mi falda se enredó y caí en el hielo. Comencé a reír por mi torpeza, sólo a mí se me ocurre patinar con falda larga, de pronto alguien estaba a mi lado preguntándome si me encontraba bien. Al ver esos bellos ojos verde grisáceos me di cuenta de que Till Lindemann estaba a mi lado en el hielo con cara de preocupación, ¿De dónde salió él?, sacudí mi cabeza y le respondí tranquila como si nada me pasara.

Yokasta : - Estoy bien gracias por preguntar -

Till : - Un momento yo te conozco... -

Yokasta : - Creo que sí, soy... -

Till : - Un hada... -

Yokasta : - ¿Cómo? -

Till : - Digo eres Yokasta, ¿Verdad? -

Yokasta : - Hasta ahora no me cambio el nombre así que sí soy ella jajaja -

(Till)

Esa noche hacía frío pero su risa fue tan cálida que nunca me di cuenta de ello, sonreí al ver su rostro, vaya ésta chica si que es bella.