Únicamente los que lograron mantenerse junto a ella, fueron capaces de ver que, en el momento que aquella rubia de rasgos delicados y definidos, con una mirada y forma de caminar que irradiaba seguridad, con una belleza que sacó más de un suspiro a todos, y cuyos elegantes tacones resonaron en el piso de todo el lugar, entro a la oficina de la CEO todo estaba por cambiar para mejor.
— Te estoy diciendo que lo canceles de inmediato Han, no podemos seguir con este proyecto, no me arriesgare a poner en duda la imagen de mi empresa por un par de edificios defectuosos ¿Entiendes? — Decía la japonesa por su celular, mientras alguien a quien no vio por estar de espalda, entró a su oficina. — No me importa lo que cueste, prefiero perder un par de millones ahora que una docena de clientes después por un proyecto fallido, así que haz algo productivo con el sueldo que te pago y resuelvelo.
Las dos chicas se quedaron sorprendidas al escucharla, llevándose una pésima primera impresión de la japonesa, que incluso perdía su paciencia con su abogado, por algo que al final no era culpa de nadie.
Pero no duró demasiado, aquella voz se le hizo conocida a una de ellas, y al tenerla de frente después de tanto tiempo comprendió la razón.
La castaña que acompañaba a la rubia, a quien presento como la princesa y prometida de la CEO fue la única que no notó como los rostros de las dos involucradas eran una mezcla de sorpresa y felicidad.
— Su alteza real la princesa Yoo Jeongyeon, se encuentra aquí el día de hoy para conocer a la señorita Myoui, su futura esposa, como fue acordado por su Majestad el Rey Yoo Changjoon y el Primer Ministro de Japón, Myoui Akira. — Anunció la castaña siendo enormemente ignorada por Jeongyeon y Mina quienes compartieron una sonrisa y dejaron claro lo poco que les importaba el resto del mundo.
Esa fue sólo la primera de las veces que la CEO sonrió de felicidad después de tanto tiempo, dejando claro que al igual que sus empleados también era capaz de sentir algo mas que rabia, y experimentar el más puro de los sentimientos conocidos, el amor.
Su emoción era tal, que poco les importó como se dio su reencuentro, lo único que podían hacer era dar gracias por volver a encontrarse después de tanto tiempo.
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Al fin apareció la princesa, Jeongyeon hermosa.
¿Les esta gustando?
Saludos.
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Sugar & Coffee || JeongMi
Short StoryMina y Jeongyeon se gustan, pero por la cobardía de la japonesa y la educación de la coreana, ninguna se atreve a dar el primer paso. Hasta que la vida las hace encontrarse de forma inesperada. Mina no sospechaba que su crush, era nada más y nada me...