August Pov

1.4K 118 2
                                    


Esperé a que mis padres llegaran a casa. Se suponía que llegarían en menos de una hora.

 Me falta algo y no sé qué ¡Oh sí! ¡¡Los chicos!! Joder, lo olvidé

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me falta algo y no sé qué ¡Oh sí! ¡¡Los chicos!! Joder, lo olvidé.

"Los necesito en mi casa"

Tuve que enviarle mil mensaje de texto a Frank porque no los veía. Matt, por otro lado, me respondió en el momento me aviso que venía durante una semana.
Si mi papá o mi mamá me matarían, quiero testigos.
¿Tal vez sea demasiado dramático? ¿No, yo? Nunca.

Ayer después de la noche de mierda y todo lo que pasó Jess me dio la última advertencia, ella estaba dispuesta a darme una oportunidad pero primero tenía que hablar con mis padres, si eso no pasaba no había acuerdo.

Desde el fin de semana pasado estábamos más cerca que nunca, después de que Ben salió del mapa.
No podía perderla, no esta vez, es increíble. Le tengo más miedo cuando está enojada que con mi mamá, ella sabe donde presionarme para manejarme, soy tan sumiso.
Sí, lo admito. Me disgusta cuando veo a Sophia y Matt dándose demasiado amor frente a mí, pero cuando veo a Jess soy su cachorro, excepto en la cama. Bueno, esa no era la información que necesitaban saber, mierda, estoy nervioso, hablo demasiado cuando estoy nervioso, y tal vez se pregunten ¿August Meyer?¿Nervioso? Solo tres personas lograban ponerme así, en primer lugar mi padre Evan Meyer, si el está molesto o enojado lo mejor que puedes hacer es correr, a la única persona que le hará caso en a mi madre que con tan solo decirle algo mi padre vuelve a la normalidad, otro sumiso. Ven viene de familia.
En segundo lugar Frank Lent, o cielos a veces pienso que es más hijo de mi padre que yo, nadie quiere estar enfrente a él enojado al igual que con mi padre mejor que corras si no quieres recibir un golpe. Matt tenía esa imagen de chico malo, pero les dejo algo en claro, es todo menos eso. Una vez que llegas a su interior, ves el lado cariñoso, solo aparenta ser malo. Pero Frank aparentaba ser niño bueno, y lo era, pero también tiene su fase que me pone nervioso.
Y la nueva persona Jess Lendof, con tan solo su presencia.


Nerviosos subo una historia para mis fans. Si tengo fans.

«No te mientas August»

«Esos 512K en Instagram no se consiguen solos»

«Son por tus padres»

«It's because Im hot»

«Tienes razón»

«Siempre la tengo»

«Siempre la tengo»

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Frank apareció en mi habitación.

—¡Has venido!—Grité y me vio extraño.

—Sí, me llamaste cuarenta y dos veces y me enviaste como 145 mensajes de textos amenazándome de que si no venía me golpearías.

—Sí, lo siento. Pero te necesitaba aquí, ahora mismo, en este momento—digo alterado.

—Bro relájate—me agarra por los hombros—Respira—inhaló aire y luego exhaló. Lo seguí y hice lo mismo que él.

—Entonces, ¿Por qué me necesitabas?—habla una vez que me calmo.

—¿Qué servicios brindaré hoy?—la puerta se abre y Matt aparece con su mochila y otra bolso.

—Eres repugnante—

—Yo no soy quien le da otro significado—dice inocente.

Tira sus cosas al suelo y luego se acuesta en mi cama.

Frank volvió a preguntarme qué estaba haciendo aquí, pero recuerdo que hoy Matt no me dejó escuchar lo que sea que Chelsey y él estaban hablando.
Voy a negociar y ¡Lo hice!¡Hice hablar a Frank!

Ohhhhhh Matt y yo sabemos lo que está pasando, lo sabemos, a él le gusta ella ¡Atención, gente a Frank Lent le gusta Chelsey Plent! Lo escuchaste aquí primero ¡Incluso sus apellidos riman que son goals!

Los chicos populares más guapos no están fuera del mercado, chicas, lo siento, se los han llevado ¿Quién lo hubiera dicho?

Los escuché, escuché el ruido de abajo, y no eran de ninguna de las mucamas, debería ir ahora.

Puse al corriente a los chicos de mi posible asesinato.

Corrí escaleras abajo y le pregunté a Melin, una de las sirvientas, dónde estaban mis padres. Afuera junto a la piscina.

Mi mamá estaba apoyada en una de las tumbonas con las piernas cruzadas, mientras mi papá la miraba con las manos en los bolsillos de los pantalones de su traje.

—Padres—les hago notar mi presencia.

—Hijo—me saludó mi papá y mi mamá sonrió dulcemente.

—¿Los chicos están aquí? Sus autos están afuera—

—Sí, están arriba en mi habitación—me siento en la tumbona que estaba al lado de la de mi madre.

—Mamá, papá—me gané su atención, ellos ahora me miraban—Ya no estoy con Brooke y no planeo volver con ella pronto o nunca.

Mi padre se toma el tiempo de respirar—¿Qué hiciste?—dijo con frialdad.

Miro al suelo y luego directamente a sus ojos—No voy a estar con Brooke porque tú lo quieras—

Mi padre cierra los ojos—Cuidado con lo que dices August—me advierte.

—No papá ¡Ya estoy harto!—me levanto—Por ti podría perder a la chica que me gusta, no me voy a casar con Brooke, métete eso en la cabeza—digo elevando mi tono de voz.

—¡¿Esto es por una chica que te gusta?!—dijo enojado—Porque te gusta ¿Echarás todo por la borda?

—Yo no tiré nada, iba a tirar mi vida porque quieres que me case con alguien para que te beneficie solo a ti—respiro para tomar aire—Herí a la chica que amo por tu culpa, millones de veces, no lo haré devuelta, no esta vez—en este momento ya estaba enojado, por si no se dieron cuenta.

Mi papá se acerca a mi—¡Siéntate Evan!—mi mamá por fin habló. Después de unos segundos, mi papá se sienta a su lado—Siéntate August—tomo mi asiento nuevamente. Sí, ella era la que llevaba los pantalones en el matrimonio y la familia.

—¿Quién es esta chica?—me preguntó mi mamá con seriedad.

—Jess, Jess Lendof—digo nervioso.

—Ella estuvo en la fiesta de año nuevo en lo de los Forc ¿No?—siento con la cabeza—Conocemos a sus padres

—No me importa quién sea ella—dijo con más calmado mi padre—Brooke es la indicada—sonreí falsamente.

—¿Por qué no me dejas decidir quién es la indicada para mí?—ganándome una mirada asesina de mi padre.

—El domingo por la noche, cena en el restaurante que solemos ir, tráela queremos conocerla—mi madre dice y la cara de mi padre cambia drásticamente la observa a ella como si hubiera dicho la peor tontería—

—Gracias mamá—la abracé—No a ti—me burlo de mi papá.

Y me miró fijamente.

—No voy a ir—dijo él.

—Irás—lo amenazó ella, él rodó los ojos. Ya estaba calmado.

—Si le dices algo malo o algo que la hiera a Jess, buena suerte en la búsqueda de un heredero—sonrío y me voy—Oh cierto, soy tu único hijo—le grito para que me escuche y puedo escuchar cómo se ríe mi mamá.

Corro de regreso a mi cuarto

—¡Soy un hombre libre!—grité abriendo la puerta con los brazos abiertos.

De Intercambio ✈️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora