Peter [Spiderson]

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Peter había aprendido que en el momento en que entraba a un sitio, ya fuese su casa, la casa de Ned, la escuela o la imponente base de los vengadores, sentía una sensación distinta.
Al entrar a su antiguo hogar, siempre había sentido: un vacío, a pesar de que el lugar estaba lleno de lujos; soledad, sobre todo a la hora de la cena; y un silencio que no lo dejaba tranquilo, así que al llegar lo primera que hacía era poner música de vinilo para luego hacer su tarea.
En cambio en casa de tía May era distinto, a pesar de que no había nadie a la hora en que llegaba de la escuela, había una calidez que le llenaba el corazón. El lugar estaba rodeado de fotos y siempre, había un tenue olor a algo quemado, lo que significaba que May había intentado preparar algo antes de irse al trabajo. Así que lo primero que hacía era abrir las ventanas y ventilar, esperando que el olor se fuera.
Pero llegar a la base de los vengadores era distinto, desde lo ocurrido con el papá de... el castaño solía ir cada jueves a entrenar ya fuera con Happy o con el señor Stark, para mantenerlo en forma y preparado ante cualquier situación. Peter solía sentir que ese sitio era imponente, y no sólo hablando de que el edificio era gigante, ya que allí vivían y habían vivido parte de los héroes que había admirado desde niño, por lo que siempre quedaba admirando el edificio antes de entrar.
Y como cada vez que iba, Peter camino hasta la entrada, puso su huella digital y paso una tarjeta que le daba acceso a gran parte del complejo para luego ir directamente a la sala en donde podía encontrar a Visión o al coronel Rhodes, si es que no estaban en una misión.
Dejó su mochila en la encimera, de la cocina y fue directamente al taller de su mentor. Stark, tras lo ocurrido en Alemania y la lesión de Máquina de Guerra, había estado viviendo temporalmente en el complejo y en vez de tener una habitación propia, lo primero que hizo fue traer la mitad de su taller para poder crear una prótesis funcional a su buen amigo. Ahora que ya la tenía, el taller solía ser el punto de reunión entre filántropo y la araña o también un sitio en donde Tony se ponía a configurar su traje, el de la araña o el de máquina de guerra.
Sin pensarlo mucho, Peter fue directamente al taller, esperando a que no tuviera que ir por el extinguidor, ya que la última vez mientras que el Sr. Strak actualizaba a una de sus máquinas asistentes, hubo un cortocircuito que causó unas chispas y seguidamente fuego. El millonario tomó el extinguidor cercano y trato de acabar con el fuego, pero se dió cuenta que estaba vacío cuando ya lo tenía en la mano. Le lanzó una mirada al mocoso y en un segundo, el chiquillo corrió por el complejo a buscar un extinguidor, al cabo de unos minutos llego con uno y pudieron apagar el fuego.
Sólo por si las moscas, Peter decidió devolverse a la cocina y traer el extinguidor consigo.
— Hoy no se esta incendiando nada —comentó el mecánico viendo por el rabillo del ojo a la araña, ya que estaba concentrado en unas donas que comía.
— Sólo fue una corazonada, Sr. Stark.
—contestó Peter dejando sobre uno de los mesones el artefacto.
— ¿Te volvió a dar esa punzada? —preguntó esta vez viéndolo directo a la cara.
— No, no fue eso sr. Stark, lo traje por si algo así volvía a ocurrir y no quería salir corriendo a buscarlo. Ya me ha pasado con tía May. La otra vez estuvo intentando cocinar y se le incendió la olla en donde estaba cocinando, le pregunté antes si traía el extinguidor o algo para calmar el fuego, pero ella dijo que no y...
— ¿Osas compararme con tu tía que no sabe cocinar?
—  Yo-yo no quería hacer eso señor Stark, yo sólo decía....
— Tranquilo mocoso, sólo estaba bromeando. Ten, te tengo un regalo.
Peter observó la caja unos segundos, recordando como Ned le decía que Tony Stark era lo más parecido que tenía a un sugar daddy. El hombre le daba obsequios cada vez que lo veía, hacia unas dos semanas le había regalado un teléfono nuevo, porque el anterior lo perdió por ser Spider-Man, también le obsequió un reloj y varias mochilas, por el mismo tema. Incluso, pensó darle uno de los robots asistente que tenía, sólo porque Peter quedó fascinado. A veces, lo invitaba a comer y otras veces, le decía:
— Niño, me acaban de enviar esta cosa, aún no sale al mercado, por si quieres probarla —luego le entregaba una consola o juego que no saldría hasta dos meses más.
— No se va a incendiar —intervino Tony impaciente.
— ¿No cree que ya me ha dado demasiados regalos?
— ¿De qué hablas?
— Pues... Hace dos semanas me regaló un teléfono, antes me había regalado un videojuego y me dio el traje de Spider-Man también...
— Chico, no te preocupes.
— Es que...
— Tan sólo ábrelo.
La caja tenía un listón rojo y el papel del envoltorio era azul, una clara referencia al traje de super héroe. Lo abrió con sumo cuidado y se encontró con papel picado, miró a Tony y este le hizo un gesto para que siguiera revisando la caja.
Peter asintió, introdujo su mano hasta el fondo de la caja encontrando un papel... Trago seco.
Por un segundo sintió que no estaba en la base de los vengadores, ni que estaba en el taller de su héroe de infancia. Volvió a estar en esa casa llena de luz con unos ventanales que daban a la ciudad, la caja que abría esa vez era más sobria pero elegante, como la persona que le había dado el regalo.
Tomó el papel entre sus dedos y lo sacó, viendo que era un papel con un sello del gobierno y con su nombre escrito en el. Tal como la vez anterior.

"Certificado de adopción"

Miró el título de la hoja sintiendo una puñalada en el techo y luego observó a Sr. Stark que sonreía complacido.
Peter dejó la hoja a un lado de la caja, aún pasmado por lo que acababa de leer y ver.
Por un segundo, en vez de ver al castaño con barba de candado, vio a un hombre de facciones angulosas diciendo:
— Nunca te dejaré solo.
Una gran mentira, porque ya llevaba dos años sin saber de su padre adoptivo Stephen Strange.

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¡Hellow!
Este es mi primer fic de Marvel escrito y publicado en la vida, la idea nació el año pasado y mi intención era publicarlo antes de que se estrenará no way home, pero aquí estamos.
Espero les haya gustado y nos leemos pronto.

- J