Loco, loco, loco de amor por ti.

Capitulo 1

Ese día, como todos los demás desde hace un tiempo, me sentía aburrido y de mal humor.
Estaba sentado a la mesa de ese bar, reflexionando sobre mi fracaso sentimental y la sensación de vacío que me había causado.
De vez en cuando una gota de agua salada acariciaba mi mejilla, mientras me preguntaba por qué Elise había tomado la decisión de dejarme.
Habíamos roto miles de veces, pero esta vez realmente sucedió.  A las pocas horas, tomó sus cosas y se fue.
Debería haberlo esperado, me decía todo el tiempo ...
"Tarde o temprano me iré, si no cambias me iré .."
¡¿Por qué no puedes ser más cariñoso ?! "
"Siempre tengo que sacarte las palabras de la boca, no me haces sentir amada"

No fue mi culpa, lo juro.
Realmente amaba a Elise, pero nunca pude decírselo.
Pero se lo había mostrado una y otra vez, había estado presente y habría apoyato cada deicision de ella.
pero esto no fue suficiente.
Y así, fui castigado por mi carácter, perdiendo a la única persona que había amado.

Rápidamente tomé un sorbo de café y dejé el bar antes de deprimirme aún más.

no era lo que quería, habría comprometido todas mis citas.
Así que me puse la mochila al hombro y fui a la universidad.
Saludé a mis compañeros, a algunos conocidos y me dediqué a mi trabajo, a todo lo que amaba, lo único que nunca me abandonaría y que me aceptaría como era.

Al final del día fui a la librería, necesitaba algunos tomos para la universidad y mientras hurgaba, mi mirada se posó en el título de un libro.
Era una novela romántica, la conocía bien, era la favorita de Elise, la novela se titulaba "loco, loco, loco de amor por ti".

Instintivamente, sin pensarlo, lo agregué al montón de libros que había tomado. 

No me malinterpretes, definitivamente no es el tipo de lectura que amaba, y claramente nunca hubiera visto ese libro si hubiera estado sobrio, pero en ese momento me hizo sentir cerca de ella, así que lo agregué.

Fui al cajero a pagar y para mi inmensa sorpresa me di cuenta que no podía pagar todo con el dinero que tenía conmigo, los tomos de la universidad me quitaban mucho dinero, así que resoplando decidí que era mejor poner ese libro fuera. 

Lo dejé en el lugar donde lo había llevado y volví a casa.
Estaba solo, como siempre, y cada día más.

Me quedé dormido triste, y no soñé, no había soñado en mucho tiempo.
Quizás algo dentro de mí se había roto.

Al día siguiente llegó rápido, me preparé el café y arreglé la bolsa con los libros para llevar a la universidad, me sentía cada vez más triste y aburrido, hice mis acciones habituales de forma mecánica, sin tener ningún sentido particular.

Pero una cosa fue diferente esa mañana.
El buzón, había algo dentro.
¿Quien podría ser?
¿Una de las postales de viaje de mi padre?
  ¿Mi hermana que se aseguraba periódicamente de que no me hubiera muerto de hambre desde que volví a vivir solo?
¿O mi hermano con su estúpido marido que me propuso ir allí unas semanas para estar todos juntos?  (Esta invitación nunca fue espontánea, siempre fue dictada por mi hermana que temía que me muriera de hambre viviendo solo, y luego le pidió a mi hermano que me invitara a visitarlo y ver si todo estaba bien).

Pero no.
Cuando abrí la caja, vi un pequeño paquete verde adentro.
Rompí el papel y para mi inmensa sorpresa vi el libro que había dejado en la estantería ayer.
Mi corazón dio un vuelco, ¿cómo llegó este libro aquí?

Instintivamente abrí la primera página y debajo del título había una dedicatoria.

"Yo estoy loco, pero tú eres hermoso.  "
T.
Con un número de teléfono.

Lo escaneé varias veces rápidamente.
No era el número de Elise ... o al menos no era el que tenía en mi libreta de direcciones.

Fui a la universidad para seguir mis cursos habituales, pero seguía intrigado por ese don, ¿quién lo había hecho?

Ella se había firmado con la letra T., eso excluía a Elise, pero entonces, ¿quién podría ser?  No tenía idea, pero sobre todo cómo sabía dónde vivía.

Durante la pausa del almuerzo seguí mirando el teléfono celular y la charla de T.

No tenía fotos, solo un número de teléfono.
Un gesto tan simple no podía ocupar tanto mis pensamientos.
Quizás por aburrimiento, quizás por una búsqueda desesperada de emociones ... Instintivamente envié un mensaje.

Envié la foto con la dedicatoria y agregué:

S:
-Hola T.
pensé un rato antes de escribirte, No seré informal.
Creo que es un gesto muy bonito.
Tanto por la dedicatoria como por el libro en sí, quisiera devolverle tu amabilidad si te gusta la idea.

No recibí respuesta durante el día, seguí mirando el teléfono como hacen los niños cuando se enamoran por primera vez.
Esto era obviamente estúpido, no estaba enamorado, simplemente estaba aburrido e intrigado por el asunto.
Al menos esta fue la justificación que me había dado.

Ese día tuve mucho tiempo para hacer mis quehaceres, T. No se hizo oír.
Hasta que llegó la hora de la cena.
Cuando sentí la vibración del teléfono, esperé con todas mis fuerzas que fuera ella, y lo era.

T:
-Estoy muy feliz de que te haya gustado, yo estaba allí cuando lo encontraste y no tenías dinero para comprarlo, seguro que no me habrás notado, pero yo sì, no es la primera vez que te veo allí. Un poco creo de conocerte.
Te lo hubiera dado en persona, pero dudo que hubieras aceptado, además soy una persona demasiado tímida, no hubiera podido darte personalmente mi número.

S:
-Es definitivamente una forma innovadora de hacerse notar.
Y sobre todo me sorprende, la gente suele evitarme.

T:
-Fue un gesto instintivo.
De todos modos... ¿te gustaría decirme tu nombre?

S:

-Mi nombre es Souichi, gusto en conocerte T, ¿y tú?  ¿Cómo te llama?

T:
-Digamos que T. está bien como nombre.

S:
- ¿Quieres ser una persona misteriosa?

T:

-No eso no es.
Es solo que ni siquiera me has notado, tal vez no te importe....

S:
-Bueno, es diferente, estaba buscando mis libros y estaba absorto la mayor parte del tiempo, y también frustrado por no poder pagar la novela.

T:
-Bueno eso estuvo bien, logré dar un paso adelante, sin embargo te noté de inmediato S. (Así que estamos parejos)
Tienes linda a manos , y tu cabello también es hermoso, nunca había visto a un hombre con un cabello tan limpio.

S:
-Gracias ... en cualquier caso, tu gesto me sorprendió, nunca me había pasado algo así.

T:
-¿Te incomoda?

S:
-Un poco'...

Quedé totalmente impresionado por esa situación, para mí fue totalmente surrealista.
Perder el tiempo en una chat.
Otra cosa que Elise me regañaba a menudo era el hecho de que siempre estaba inalcanzable por teléfono.
Odiaba el celular.
¿Ahora que?  ¡Estaba perdiendo el tiempo con un extraño del que no sabía por nada!
Me estaba volviendo loco, no había otra solución.

T:
-Souichi .. ¿estás comprometido?

S:
-No.

T:
-Bueno, me alegro.

S:
- Me gustaría saber quién eres.

T:
- Quizás algún día te lo cuente, por ahora mantengo esta charla con una enorme sonrisa en mi rostro, y te deseo buenas noches.
¡Hola Souichi!

S:
-mmh, está bien.
¡Buenas noches!

Resoplé con impaciencia, no había sacado nada de esto más que una terrible confusión.