'en otra vida'
Asi cómo en desgracias de la naturaleza o conflictos de los humanos, las cosas no se repiten, la historia no se repite pero a veces rima.
[...]
Una gran feria con carruseles y una gran rueda de la fortuna, en medio de la noche, las luces sa hacían más intensas y daban una calidez de solo ver, entre la multitud estaban dos países quienes trataban de pasar desapercibidos, jugaban y comían entre risas, al ya no tener historia, podían ser más libre que los demás.
Y esos dos países eran México y Rusia, quienes se divertían en su primera cita, se conocían pero no han avanzado más allá de un abrazo. Un logro para el mexicano pues Rusia es difícil de persuadir.
En la rueda de la fortuna ambos decidieron subir emocionados, eran cabinas que subían varios metros de altura, cabinas con dos asientos donde podían estar frente a frente, subía poco a poco y se paraba al rededor de 1 o 2 minutos -mira rus, por allá se ve el puesto de crepas-
-cierto, interesante...- dijo Rusia quien se acercó demasiado al mexicano quien le dio un pequeño pánico apartandolo -sobres wey, tu pa' allá y yo pa' ca- Rusia ladio su cabeza confundido -¿te incómodo?-
-no, sólo que no es muy común en ti en acercarte pues, espantas- Rusia lo tomó de las mejillas -siempre me ha dado curiosidad-
-que wey- ni siquiera puedo responder pues el ruso lo interrumpió con un corto y breve beso tierno, cuando se separadon se quedaron viendo a los ojos, unos pétalos cayeron de la nada y de en cuestión de un parpadeo sus ojos tenían un solo color, Rusia sus ojos azul gris y México sus ojos café oscuro.
-yo... Bueno, no se tú pero yo sentí mariposas wey y- Rusia lo interrumpió -¿podemos ser algo más que amigos?- ahora México fue el que tomó la iniciativa tomando de las mejillas al ruso para darle un gran beso más profundo y un poco más lento, a la falta de aire ambos tuvieron que separarse quedando sus frentes unidas -ya te habías tardado- dijo México con una gran sonrisa.
[...]
Un par de mese pasaron desde ese día, en la habitación del mexicano estaban viendo por primera vez juntos, shrek, era la estación de invierno, a lo que tenían la calefacción prendida y México tenía ensima una colcha pues ese clima frío lo afectaba directamente a él.
Por su parte Rusia se limitaba a abrazarlo pues a él no le afectaba del todo -Oye wey, ¿y si te quedas a mimir?- pregunto México apenado escondiéndose en el pecho del ruso.
-mañana tenemos una reunión los dos cariño- mencionó el ruso -andaleeee, nos vamos de aquí por fa- Rusia sonrió levemente y le dio un pequeño beso en la frente del mexicano -está bien, pero nos vamos a levantar temprano-
México asintió alegre, por fin dormiría con su pareja.
[...]
En medio de la noche Rusia se despertó, al parecer el clima había bajado demasiado, queria taparse pero había un problema, México tenía toda la cobija -cariño... Dame un poco de cobija-
México se dio la vuelta dándole la espalda a su pareja -nel wey... Consiguete la tuya- Rusia abrazo de la cintura al mexicano para cargarlo y ponerlo en su pecho, de esa forma tendría cobija -eres un pinche tramposo poste-
-lo se, ahora duerme- México resoplo pero se limitó a acurrucarse en el pecho del ruso.
Las horas pasaron y los rayos del sol daban los buenos días, una alarma despertó al ruso, quien extendió su mano para apagarla -México... Despierta, tenemos que levantarnos-
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5 Minutos Más
Fantasi-si tan solo te tuviera 5 minutos más... Estaría contigo... A pesar que sea el fin del mundo- [Rusmex] [finalizada]