Gustabo García. Un agente de policía de 24 años, enamorado perdidamente de su fiel amigo, Horacio Pérez, de 23.
Quizá ese amor realmente sea enfermizo, sobre todo cuando otra persona también lo siente por él.
Su nombre es Pogo, y, en un principio, s...
Tras el entierro de manolo y la emboscada del CNI, -que ya todos sabemos cómo sucedió- Gustabo, había terminado en la puerta de la iglesia, encontrándose a la vez con el padre Josecristo, quien le ofreció entrar al lugar sagrado para que explicase lo sucedido, y, ya que están, que se confiese “antes de morir”, como decía el hombrecillo con rostro pintado.
一 Espera aquí, criatura celestial. Y recuerda, todo lo que hago es por tu bien, y para que todo salga bien.
一 Ya lo sé, padre Josecristo…
El cura dejó solo al hombrecillo saliendo de la iglesia.
Pogo observó su mano. En ella había un control a distancia con un botón rojo en medio. Un botón que echaría a volar toda la iglesia con él dentro si fuese necesario. Miraba a su alrededor con una mirada cansada y desgastada, para luego volver a fijar su vista en el control.
Estaba a punto de pulsarlo, cuando otras dos figuras se hicieron presentes en su campo de visión. Eran Horacio y Conway… ¿el padre lo había vendido? Jo-der… qué putada.
一 Gustabo… 一 habló el más mayor apuntando con su arma 一 debes venir con nosotros, no tienes más salidas.
一 Gustabo, porfavor, no queremos hacerte nada 一 Continuó el de cresta
一 No queréis hacerme nada pero me apuntáis con una pipa, que lógica. 一 río cansado
一 Deja salir a Gustabo, Pogo.
一 Me temo… Conway, que eso sólo podrá ser posible cuando usted desaparezca.
一 Pero-- Cuál es el objetivo de-- 一 Horacio señaló todo su cuerpo de arriba a abajo con preocupación por la herida de bala 一 todo esto? No-- ¿no podríamos estar ahora mismo en comisaría cagandonos en todos los que vienen a denunciar? Como antes, cuando-- cuando éramos unos alumnos de mierda
一 Gustabo sólo fue policía por ti, Horacio. El siempre ha odiado la policía, solo entró contigo para verte feliz. Y así se lo pagas…
一 Pero-- él ha matado a Volkov… a más agentes… ¿eso sigue siendo por mi, enserio?
一 A esa gente los he matado yo, Horacio… Yo solo hago y consigo lo que Gustabo más ansía en su corazón. Todo aquello que él no se atreve a hacer, lo hago yo. ¿El objetivo? El mío es que Gustabo sea feliz, pero para que sea feliz tú debes estar con él, ya lo sabes. Y lo has abandonado…
一 Pogo, deja salir a Gustabo, iremos al hospital a que te saquen la bala y ahí ya podremos hablar en paz… Ahora mismo tú te estás muriendo… y te estás llevando a Gustabo contigo. 一 Conway bajó su arma, esperando una afirmación por parte del rubio
Silencio. Uno largo.
一 Creo… Está bien. Para que Gustabo sea feliz primero debo estar sano… 一 Se dió la vuelta caminando hasta la sala de confesiones 一 deja que coja una cosa…
Una vez dentro, sacó un machete y lo sostuvo con fuerza, pensando bien su próximo movimiento. Mientras Horacio y Conway solo se observaban entre sí esperando que Pogo saliese de ahí para ir juntos al hospital.
Cuando tuvo todo claro, salió, escondiendo un poco el arma, aunque no tardó en comenzar a correr hacia Conway.
一 Yo iré al hospital… PERO TÚ TE VIENES CONMIGO 一 Tras eso le clavó el machete en el hombro con fuerza provocando un escandaloso grito por parte del mayor
El cuerpo de Conway ahora estaba en el suelo, formando un charco de sangre.
一 ¡Pogo no!
Tiró su machete caminando alterado hasta el están donde reposaba la biblia, dejándose caer por él para terminar sentado. Su respiración era irregular y no podía ver con claridad.
一 ¡Pogo! ¿Pero-- por qué haces esto? ¿Por qué no venir sin hacer nada malo? 一 se colocó frente al cuerpo del rubio, guardando su pistola y agarrando sus mejillas
一 Todo esto… Horacio 一 su garganta dolía y su voz era muy aguda y desgastada 一 Todo esto, es porque Gustabo te ama… Pero tu tienes ojos para todos los demás… menos para él... Yo solo soy el fruto de su desesperación por tí… 一 se dejó caer hacia atrás, quedando inconsciente
一 Pero… ¡Pogo! Eh, ¡eh! ¡Despierta, joder! 一 Horacio comenzó a mover su cara bruscamente revolviendo su pelo 一 Gustabo… Vuelve por favor… joder no termines así…
Tras unos segundos el rubio volvió a despertar. Completamente tranquilo, con una expresión de tristeza, miedo y vergüenza.
Pogo cree que ya tenía su objetivo.
一 Lo siento mucho Horacio… No había podido retenerlo más, solo soy una mierda… 一 Sus finos dedos acariciaban las mejillas de Horacio secando las lágrimas que comenzaban a brotar de sus ojos, sintiendo que ahora los suyos también desprendían un fino río de lágrimas.
一 Gustabo, todo esto no es tu culpa, no lo es… si… si joder, yo también te quiero, Gustabo… todo eso de fijarme en los demás era por evitar pensar que tu jamás estarías conmigo, joder… 一 dijo acariciando su pelo mientras se colocaba frente al rubio, acariciando los suaves y finos pelos que caían por su frente
一 Pero ahora ya es demasiado tarde… 一 sonrió como pudo, siendo así una sonrisa cansada y pequeña
Horacio se quedó quieto y callado. Como si estuviese pensando, imagina Gustabo.
一 Quizá… no es demasiado tarde… 一 sus manos comenzaban a temblar y su voz sonaba nerviosa
一 Horacio… Acabo de terminar con el jefe de la puta ciudad… es demasiado tarde…
Horacio se puso rápidamente en pie, observando el cadáver de Conway y el charco de sangre que se formaba a su alrededor para devolver la vista a Gustabo.
一 Saldremos de aquí cagando hostias al hospital… nada más estés estable nos piramos de aquí… 一 volvió a acercarse a Gustabo para verle a pocos centímetros de él, con algo de miedo y sorpresa
一 ¿Quieres dejar atrás todo lo que hemos vivido aquí?
Horacio se mantuvo en silencio agarrando a Gustabo por la nuca, acercándolo a si para poder juntar sus labios. Gustabo no dudó en corresponder, sin poder moverse mucho agarró la mejilla del de cresta para poder sostenerse mejor. Haciendo un vaivén con sus labios, para pocos segundos después separarse por falta de aire.
一 Te lo debo… tu has dejado atrás todo por estar conmigo.一 Vio nuevamente su alrededor para luego extender su mano hacia Gustabo para que se levantase 一 Ahora vámonos, no tardarán en saber que estamos aquí.
Gustabo agarró la mano de Horacio para incorporarse y salir de la iglesia, sin encontrar a nadie…
Esa fue la última vez que alguien supo de aquellos sujetos…
🌼 🌼 🌼 🌼 🌼 🌼 🌼 🌼 🌼 🌼 🌼 🌼
Alap, fin de la historia. La verdad que es bastante corta pero se me empezaba a hacer algo pesado, así que aquí está.
Quería subirlo anoche, la verdad, pero me quedé dormido viendo caso cerradoxd
Ahora comenzaré a subir otra historia que tengo desde antes de esta pero no la subí xq me daba pereza xdd
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.