Ackerbond

Parte 1

Tomó un profundo suspiro. Siempre lo hacía antes de entrar al Colegio. Como lo odiaba. Aún no había sonado la campana, y todos los estudiantes estaban esparcidos en el patio. Algunos jugaban fútbol, otros estaban sentados en los banquillos, algunos en el suelo. Cuando dirigió la mirada hacia un rincón, vio a Farlan sentado, recostando la espalda contra un muro.

Farlan estaba rodeado de hojas sueltas que observaba con meticulosidad, a simple vista estaban llenas de números, letras, y lo que parecían ser unos gráficos. Nada de eso tenía sentido para Levi que había faltado una semana a clases, o quizás dos.

"Hey" musitó Levi, agachándose a un lado de Farlan. "¿Qué es todo eso?"

Farlan levantó la mirada. "¡Hmp!... nuestros deberes". El rubio negó con la cabeza reprobatoriamente.

"¿Nuestros?" Levi arqueó una ceja. Cara inexpresiva como siempre.

"Toma, estos son los tuyos". Farlan organizó una pila de papeles y la puso en las manos de Levi. "Sacaste 20 en el examen de química".

"¿Cuál examen?"

Farlan alzó una ceja. "El examen del miércoles"

"No vine el miércoles"

"Lo sé. Firmé la asistencia por ti ese día, y entregué tu examen junto con el mío. Estaba muriendo de nervios... incluso creo que se me bajaron las defensas, me dio fiebre... "

Levi rodó los ojos hacia arriba.

Farlan bajó la voz "Pero no te preocupes, estoy seguro de que la profesora Hange no se dio cuenta. Esperé hasta último momento, cuando sonó el timbre todos se levantaron al mismo tiempo a entregar sus exámenes, Hange tenía las manos tan llenas que estoy seguro de que no notó que le entregué dos exámenes al mismo tiempo".

Levi alborotó el cabello de Farlan. "¿Qué haría sin ti?"

"Sí sí, lo sé..."

Levi apreció lo bien hechos que se veían sus deberes. Impecables. Se nota que su amigo había estado ocupado. Sin duda Farlan le había hecho un gran favor, si no reprobaba el año sería gracias a él.

"Pero no puedes seguir faltando a clases tan seguido, Levi... pronto tenemos un parcial de Matemáticas. Hice un cálculo de tu promedio. Si no apruebas ese examen, va a ser difícil que te recuperes y te pueden reprobar. No voy a poder ayudarte con eso, sabes cómo es Shadis"

Levi chasqueó la lengua.

La presencia de Levi no se notaba mucho. Siempre se sentaba en la parte de atrás, recargando la cabeza contra la pared. Soñando despierto. No tenía mucho en qué pensar. Su vida era una mierda después de todo. Odiaba estar en el departamento con Kenny, y también odiaba estar en el Colegio. Lo único que podía desear era largarse lejos algún día, y por suerte conseguir un lugar en donde se sintiera vivo, con sangre en las venas...  no tener que volver a ver a Kenny, ni tener que lidiar con los idiotas del Colegio.

"Farlan... ¿alguna vez te has preguntado qué sentido tiene la vida?"

Estaban en la hora del almuerzo. Siempre era igual. Farlan se sentaba a leer un libro, y Levi solo estaba a su lado, con la mirada en sus rodillas. En el fondo se escuchaba el bullicio de los estudiantes que platicaban animadamente.

Farlan alzó una ceja. "Esa es una pregunta muy profunda." Hizo una pausa para pensar seriamente. "No lo sé... quizás... cumplir metas".

"Metas..." repitió Levi para sí mismo. No tenía metas. Todo le parecía tan estúpido, cada día exactamente igual al anterior. Echó un vistazo al título del libro que estaba leyendo Farlan.