OBSESIÓN ➡️ [HyunJin]

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Karina miró fijamente. No pudo evitarlo. Era extraño ver a RyuJin tan abatida, tan... diferente a ella.

Había dos lados de RyuJin con los que Karina se había familiarizado. Estaba la gatita obediente que pretendía complacer a su dueño a toda costa.  Como mascota, RyuJin era servil, siempre tan metida en su papel que si pasabas suficiente tiempo con ella, te olvidabas de que era humana. Luego estaba el lado engreído y ligeramente arrogante de RyuJin, que Karina sabía que JiSung no conocía bien.

Karina había pasado suficiente tiempo sola con RyuJin, cuando Tn las invitó a salir de compras o ver una película. RyuJin parecía una persona diferente cuando no estaba con JiSung. 

Parecía una persona.

RyuJin tenía el potencial de ser molesta, con sus juicios no solicitados, sus fuertes opiniones y esa mirada de complicidad que siempre tenía en sus ojos, como si guardara un millón de secretos que sabía que te morías por saber. Pero aun así, Karina disfrutó de su compañía. Debajo de la arrogancia había algo cálido. Escuchó las preocupaciones de Karina y Tn. A veces les dio buenos consejos, y otras veces les ofreció abrazos muy necesarios e inesperados.

Karina se preguntó si RyuJin alguna vez le había mostrado a JiSung ese lado suyo. Quizás JiSung solo estaba contento con una mascota. Y tal vez eso fue lo que condujo a su gran discusión.

Ni BangChan ni RyuJin realmente habían explicado por qué RyuJin de repente estaba viviendo en casa de BangChan. Fue realmente inesperado. Todo lo que RyuJin había dicho era que ella y JiSung habían discutido y que se estaban tomando un tiempo separados.

Karina miró su teléfono. Winter estaría aquí pronto. Tenían algo que hablar sobre toda la situación de ChangBin-Tn-HyunJin

Volvió a mirar hacia arriba, sus ojos se movieron hacia donde BangChan estaba frotando distraídamente el dobladillo de la camisa de RyuJin entre las yemas de sus dedos. Estaban uno al lado del otro en el sofá. RyuJin fingía ver un programa de televisión, mientras que BangChan solo… la miraba fijamente. Él hizo eso mucho. Tenía que tener cuidado o YeJi se daría cuenta.

Eso sería terrible, Karina lo sabía. BangChan amaba mucho a YeJi. Si estropeaba eso… Pero RyuJin había estado aquí por una semana y las cosas parecían estar perfectamente bien entre BangChan y RyuJin. No había nada de qué preocuparse, esperaba. A menos que RyuJin y BangChan...

Karina se estremeció. No, eso rompería a YeJi. Había pasado toda la noche anterior con Karina y BangChan. Ella hizo eso a veces.

Había sido incómodo para Karina las primeras veces, sabiendo que estaba follando con el novio de otra persona justo en frente de ellos. Pero luego conoció a YeJi. Y le había confiado a Karina lo insegura que se sentía cada vez que BangChan se follaba a otra persona. YeJi entendía la necesidad sexual de BangChan, pero odiaba su propia insuficiencia cuando se trataba de satisfacer las necesidades de BangChan. Fue difícil para ella, pero aun así, amaba a BangChan y apreciaba que Karina estuviera allí para él de una manera que ella no podía estar.

—Gracias por prestármela -Winter agradeció a BangChan en la puerta principal, sonriendo a Karina, quien estaba pacientemente a su lado.

BangChan asintió.

—Deberíamos hacer algo juntos pronto -tocó la mejilla de Karina- Nosotros tres.

Karina estudió a Winter. Nunca pareció desanimarse por esa idea.

Cuando Winter se mudó a la ciudad para investigar la desaparición de Giselle, no sabía en qué tipo de cosas había estado Giselle. Y cuando Karina le dio una breve presentación, estaba segura de que Winter nunca estaría dispuesta a sumergirse en este mundo solo por una investigación.