Desde el incidente del día de la vida Hux a veces se encontraba pensando en el Lord berrinchudo más de lo que quería. Se había encontrado a Kylo Ren en la sala del trono, haciendo alarde de su título y bailando al ritmo de una muy improvisada canción que decía "Líder Supremo, Líder Supremo", de pie sobre su trono. Y sin camisa. Ese día, todos le habían deseado un "muy feliz día de la vida, Líder Supremo", al parecer eso lo puso de muy buen humor; la parte racional y fría de Hux pensaba que el hecho de que todos se mostraran subordinados a él recordándole su título era lo que lo había puesto así. Pero la parte que le pensaba involuntariamente, que le había puesto tan nervioso al verle sin camisa y que le había hecho sonreír las veces que encontró a Kylo haciendo algo cuando pensaba que nadie veía, le llevó a pensar que tal vez, se puso de buen humor al pensar en que la Primera Orden le deseaba felicidad.
Otra cosa que aprendió desde aquel día, era que a veces entrar sin tocar no es tan malo (claro, si la persona dentro del lugar se encuentra de buenas). Lo hizo solo un par de veces, porque tampoco quería verse sospechoso o colmar la paciencia de Kylo. Pero hubo una ocasión en la que Hux sintió que incluso casi morir asfixiado había valido la pena.
Había entrado para informar al Líder Supremo de que sus Caballeros de Ren habían llegado de la misión solicitada y querían hablar con él. Al hacerlo, la música chocó contra sus oídos de inmediato, acallando cualquier anuncio de su llegada.
Kylo Ren se encontraba entrenando con su sable de luz, pero casi combinado épicamente con lo que lucía como una coreografía, o por lo menos movimientos rítmicos y letales. Hux reconoció vagamente que la música era en otro idioma, en el de la raza Bardottan más exactamente, así que lo que sonaba a un grupo de féminas bardottanas cantaba en su idioma nativo con algunas palabras o frases en el idioma universal.
"S-A-V-A-G-E, keep it pretty, pretty savage"
Esa frase describía perfectamente a Kylo en esos momentos, siempre de negro, con sus pants de entrenamiento, un crop top deportivo con el logo de la Primera Orden en el centro, guantes tácticos de cuero y su sable rojo. El chico parecía llevar rato en sus asuntos, sudando y con músculos marcados. Lanzaba golpes con el láser en su mano, en distintas direcciones.
"You better run, run, run"
Hizo movimientos expertos con su sable para luego lanzarlo hacia arriba y dar un salto muy alto hacia atrás, atrapándolo en el aire con éxito. Calló de pie, con apenas un dobles de rodillas antes de incorporarse. Apagó el sable para dar golpes como si de una lucha cuerpo a cuerpo se tratase.
"So pretty, pretty, pretty, savage"
Hux sabe que estuvo observando demasiado cuando la canción concluye, dándole un descanso a Ren y haciéndole poner más atención a su entorno. Y Armitage solo espera a ser descubierto, pues es inevitable, no puede huir. Entonces los dos hombres hacen contacto visual y es cuestión de segundos para que el General siente sus pies despegarse del suelo, su espalda golpear contra la pared y su respiración cortarse. Kylo lo está asfixiando con la fuerza. Como innumerables veces.
-¿¡Qué haces aquí!? – pregunta un pelinegro que quiere sonar intimidante, pero el temblor en su voz hace notar que está apenado.
-Sus caballeros volvieron señor – dice con poca voz.
-¿¡Y por qué entraste sin avisar!?
-Sí avisé señor – tuvo miedo de continuar – Pero su música no le permitió escuchar.
-Esa n-no, no era m-mi música – se excusó soltando un poco el agarre de Hux, aunque no por qué quisiera, sino porque había un dejo de vulnerabilidad en su mirada. Hux aprovechó para inhalar rápido por si el aire le era arrebatado de nuevo.
-De acuerdo Líder Supremo, lo que usted diga – aún suspendido en el aire, Hux buscaba salir de ahí.
Pero volvió a sentir la presión en su garganta – Aun así no quiero que le digas a nadie sobre esto – se adentró entonces a su mente para saber cuánto había visto, pero se encontró no solo con que disfruto de casi todo el espectáculo reciente, sino que en su mente rondaban los recuerdos de la reunión y el incidente de los audífonos, de la ocasión nocturna del gimnasio y del reciente viaje. Todos con relación a momentos en que el General Hux se dio cuenta de que el caballero tenía un gusto particular por el género pop – ¿Le has dicho a alguien sobre... la música? – el pelirrojo negó de inmediato y Kylo indagó en su cerebro, pero al parecer no mentía. Entonces lo soltó, de golpe, haciéndole caer en el suelo recuperando la respiración - ¿Por qué te interesa tanto? – preguntó menos colérico.
-Era solo curiosidad – habló con voz ronca y aun recuperando la respiración – No lo sé Ren, no cualquiera sabría eso de ti, necesitaba confirmármelo varias veces para creerlo.
-¿Y por qué querías saber sobre mí más allá de que soy tu Líder Supremo? – había tanto enojo como seria confusión en su pregunta.
El General rodó los ojos – Bueno, pienso que por qué, quizá, es lo que hacen los seres vivos – se puso de pie – Tal vez, solo tal vez, quería conocer un poco mejor a Kylo Ren, Líder Supremo. Tenemos más en común de lo que cree.
-¿También te gusta Blackpink o Dua Lipa? – preguntó agachando la mirada.
-¿Qué? No, me refiero a que tú y yo tenemos una actitud, una forma más similar de ver el mundo y estuve pensando en que nuestros roces se podían deber más porque no nos hemos tratado más allá de nuestro trabajo – dice ya habiendo recuperado casi por completo su voz normal.
-¿Y por qué la música que escucho serviría de algo?
Armitage dio un suspiro profundo pero sin sonido – Porque son trivialidades Ren, cosas comunes que podrían salir en una conversación casual. Platicas amistosas que no tienen nada que ver con la cantidad de bombas que llegaron o la ubicación de una nave de la resistencia.
Hubo un silencio por unos momentos - ¿Quieres que sea tu amigo?
Hux no sabía si la respuesta era sí o no, realmente – Quizá – nadie dijo nada por casi un minuto, y el General decidió retirarse.
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𝟓 𝐕𝐄𝐂𝐄𝐒 - 𝙺𝚢𝚕𝚞𝚡
FanfictionCinco veces en las que el General Hux encontró a Kylo Ren escuchando música que delataba sus verdaderos gustos musicales. + 1 vez en la que él puso la música.