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𝐗𝐕𝐈

Capítulo 16

ㅤㅤOctubre llega con un clima terrible y una forma de enfrentarnos a la -prácticamente- dictadura que había traído Umbridge al castillo. A pesar de los rodeos que le di, finalmente había accedido a la propuesta de Harry y me había unido a lo que ahora llamábamos el Ejército de Dumbledore. Con las complicaciones que nos daba pasar la voz cada vez que nos reuníamos y mantenerlo en secreto, Hermione había creado unos muy útiles galeones que revelaban la fecha y hora del encuentro, me parecía lo más ingenioso que había visto en la vida, principalmente porque aquel hechizo era muy avanzado para nuestro curso. Irina también se había unido conmigo, así que ahora practicábamos hechizos incluso en nuestro cuarto, cuando ya todo el castillo estaba en silencio, era algo bastante divertido de hecho, pues los duelos con ella terminaban con ambas en el suelo muertas de risa -y también de dolor. Habíamos hecho amigos nuevos, aunque nuestro grupo se seguía reduciendo a los gemelos, Lee, Irina y yo, sin embargo, de vez en cuando nos íbamos por ahí con Ginny y Luna; algunas veces hasta entablábamos conversación con Cho, aunque eso era muy de vez en cuando porque la chica no dejaba de preguntar por Cédric y siempre que lo hacía los recuerdos robados y aquella sensación de pérdida venían a mi y me estrujaban el pecho, por lo cual si podía, la evitaba.

ㅤㅤEl mal clima y el ED no fue lo único que llegó con octubre. Un enorme espíritu deportivo inundó el castillo cuando la fecha del primer partido de Quiddich se acercó. Todos estaban eufóricos, pero más allá de eso, el pasillo se había convertido en una guerra campal entre Slytherin y Gryffindor, los dos rivales. Para mi mala suerte, el chico con el que salía y mis amigos estaban en bandos diferentes.

ㅤㅤ-¿Te veré de esmeralda mañana, verdad?

ㅤㅤDraco estaba tirado en su cama, su cabello estaba despeinado y para mi se veía como una completa obra de arte. Ahora la sala común de Gryffindor, no era la única que frecuentaba. Había pasado muchos días en las mazmorras, conviviendo con los Slytherin a los cuales para mi sorpresa, no les desagradaba tanto mi presencia. Era eso, o que Draco ya había amenazado a toda su casa.

ㅤㅤ-Ya te dije que no tomaré partido en esto.

ㅤㅤCrucé mis brazos, estaba sentada a su lado, apoyada en el respaldo de la cama. Mis piernas estaban cruzadas a lo indio e iba descalza. Pasaba tanto tiempo en ese lugar que ya hasta me sentía cómoda. A Draco le encantaba hablar y a mi me encantaba escucharlo, nuestra conversaciones podían pasar desde nuestra vida, nuestro futuro o hasta cosas del colegio. Había descubierto un par de cosas del chico de ojos grises que no me había imaginado jamás, por ejemplo, que tocaba el piano, aunque al parecer sólo lo hacía para complacer a su madre a quien amaba profundamente.

ㅤㅤDraco frunció el ceño, observándome detenidamente. Por un momento pensé que me había perdido tanto en mis pensamientos que no lo había escuchado pero entonces él se movió hasta apoyar su cabeza en mis muslos y bufó.

ㅤㅤ-Siempre dices eso pero sé que vas a estar de su lado.

ㅤㅤSolté a reír al escuchar aquello, a veces se comportaba como un pequeño y aunque sabía que reírme sólo empeoraba su enojo, no podía evitarlo.

ㅤㅤ-Claro que no, lo estaré del lado del equipo ganador, así diré que siempre los apoyé. -Bromee para intentar aligerar la situación.

ㅤㅤAcaricié el ceño fruncido de mi chico para que lo quitara y rodee los ojos cuando él intentó mantenerlo a la fuerza.