𝙽𝙾 𝚅𝙾𝚈 𝙰 𝚂𝙾𝙻𝚃𝙰𝚁𝚃𝙴 ~𝙱𝙰𝙺𝚄𝚃𝙾𝙳𝙾~

VENTANA

"Ya es hora" pensó Bakugo llamando a la puerta de Todoroki quien no daba señales de haber despertado.

Justo por el pasillo escucho a Tokoyami hablando con Lida así que instintivamente entro al cuarto.

Como se esperaba; Todoroki seguía dormido.

"¿Lo despierto o me voy?" Se preguntó acercando su oreja a la puerta "parece que siguen ahí"

Se acercó a la cama para ver si despertaría con el ruido pero no hubo respuesta.

"Parece un niño" pensó extendiendo la mano que sin percatarse acarició la mejilla de Todoroki. Al darse cuarenta la quitó de inmediato.

— ¿estás despierto? — preguntó muy bajito; no escuchó respuesta.

De un momento a otro, sin pensarlo detenidamente, como si fuera guiado por sus deseos, se acercó y le dio un beso en la frente.

Se retiró y luego pensó sobre lo que había hecho.

"¿Que estoy haciendo? Necesito descubrir por que me siento así. Esto no es normal, nunca había querido estar con nadie ni pensaba en otra cosa que no fuera ser el mejor héroe" volvió a acercar la oreja a la puerta "no escuchó nada, será mejor que lo deje dormir" hecho un último vistazo a Todoroki,  habrío la puerta y se fue.

Solo cuando sonó la puerta cerrarse Todoroki despertó y se quedo sorprendido.

"¿Que fue eso?" Se dijo frotando su frente, solo de recordar la escena su corazón comenzó a latir y su cara se puso roja.

El ambiente se puso caliente, el cuarto se llenó de feromonas, Todoroki entro en celo.

"Me hace mucho calor, no es fiebre entonces debe ser lo otro" agarro los supresores de la mesita a lado de su cama "con una, será suficiente" se la tomo y volvió a arroparse.

Su cabeza estaba llena de Bakugo, el olor de sus feromonas, el beso en la frente y la noche en que durmieron juntos.

"Debería decirle a Aizawa-sensei" tomo el teléfono y llamó explicándo la situación.

Esta vez el celo era más fuerte que el anterior y se había adelantado inesperadamente.

Miestras tanto en la clase todos se preguntaban sobre la ausencia de su compañero, en especial Bakugo que estuvo todo el tiempo de mal humor.

Al terminar las clases salio disparado hacia los dormitorios donde se topó con Aizawa-sensei en la puerta del cuarto de Todoroki.

— ¿que paso? — le pregunto a su maestro

— al parecer Todoroki entro en celo, ya lo examino la enfermera así que se quedara aislado hasta que termine. Le diré a los demás que es una gripe y que no se acerquen porque podrían contagiarse

— Pero no sé supone que esos días son dolorosos, no debería quedarse solo.

— ¿te preocupa?

— claro que no, solo era un comentario

— bien, pondré una alarma para que nadie entre.

Así termino la conversación, Bakugo estaba preocupado y no quería admitirlo, por la tarde todos cenaron y hablaron sobre el asunto.

— ¿Todoroki estará bien? — pregunto Uraraka

— claro, un resfriado se pasa rápido — respondió Mina

— pero es un poco raro, nunca he oído que se haya enfermado de gripe — comentó Midoriya

— talvez solo está agotado, hace días que lo noto muy ansioso — argumentó Lida

En medio de esa plática Bakugo solo comía en silencio, al terminar se retiró agradeciendo por la comida.

Todos lo notaron raro pero no dijeron nada.

Antes de entrar a su cuarto, Bakugo se detuvo unos segundos, sentía un fuerte deseo de ver a Todoroki pero al final decidió hacer caso a lo que dijo Aizawa-sensei.

Se metió a la cama e intentó dormir pero en su cabeza había una batalla.

"¿Estará bien? He oído que es muy doloroso"

"Nah, él no es débil"

"¿y si no ha comido? O talvez le falten pastillas"

"No, seguramente ya se encargaron de su comida y lo demas"

"¿Por qué se habrá adelantado su celo? ¿Estará enfermo?"

"Que fastidió... aunque quiera no puedo entrar"

"Pero... talvez si hay una manera"

Finalmente terminó levantándose de la cama, salió de los dormitorios y del establecimiento, agarro una piedra y la arrojo a la ventana de Todoroki.

Mientras Todoroki estaba intentado dormir.

— Tengo mucho calor, podría usar el hielo pero duele, cambiar la temperatura es agotador.

"Ya no tengo más supresores, y cada vez siento como palpita en ese lugar. Pero debo aguantar si tan solo... Bakugo estuviera aqui"

— No, ¿que estoy pensando? Bakugo me a ayudado mucho pero es solo porque se lo ordenaron... — se puso triste y abrazó su almohada — Sin embargo desearía que estuviera aquí

Justo después, escucho las piedras que impactaron contra el vidrio de la ventana. Las ignoro pero luego de oírlas por vigésima vez decidió levantarse e ir a observar.

Extendió las cortinas y se asomó, precisamente estaba ahí la persona que más anhelaba ver, no pudo evitar sonreír.

— Bakugo ¿que haces?

— Apártate — ordeno y con sus explosiones se impulsó hasta la ventana, entrando al cuarto de Todoroki, traía una bolsa entre los dientes, se la quitó y de inmediato comenzó a hablar — ¿estas bien? ¿Tienes hambre?¿Aún tienes pastillas?

— si estoy bien, solo me duele un poco y ya no tengo pastillas — respondió a la perfección cada una de las preguntas, ambos se sentaron en la cama para estar más cómodos.

— Sabia que necesitarías algo así que te traje bocadillos y pastillas — dijo mostrando las cosas.

— Gracias pero ¿por qué entraste por la ventana? Tu cuarto está al lado, solo tenías que llamar y te hubiera abierto — comenzó a probar los bocadillos

— No podía entrar por ahí... y además... no... era... — no podía hablar porque estaba ocupando observando a Todoroki comiendo muy a gusto

"Maldición por que se ve tan lindo, quisiera darle más comida"

— ¿estás bien? — esta vez Todoroki fue quien preguntó

— si, es solo que... el olor es fuerte

— oh, la enfermera dijo que durarían dos días.

— ¿no suelen durar cinco días?

— si, pero mi caso es distinto

Pasaron uno minutos en lo que Todoroki terminaba de comer, Bakugo lo observara como si viera la cosa más linda de todo el mundo.

— Gracias, ya puedes irte, es muy tarde

— esta bien, vendré mañana. ¿Que quieres que te traiga?

— umm... ¿se puede un plato de soba?

— bien... no olvides tomar tus pastilla y si pasa algo llámame — más que un consejo parecía una orden.

— esta bien

Bakugo salto por la ventana y tuvo un aterrizaje perfecto, pero se le olvido que Todoroki no lo tenía agregado en su teléfono.

Ahora si pudieron dormir bien, Todoroki estaba realmente feliz, se deseo se cumplió y Bakugo ya estaba tranquilo.