«En un mundo donde abundan las luces artificiales, a veces solo hace falta encontrar un rayito de sol»
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Armin y Lectora
Personajes originales de Hajime Isayama
El fanart de la portada no es de mi autoría, reservo los derechos a su res...
Así es, reviví de entre los muertos como diría mi diosa Taylor Swift.
Les ofrezco una disculpa ENORME por el tiempo que tarde, entenderé y respetaré si no continúan leyendo después de esto y les agradeceré infinitamente a quienes si.
Por último, les pido que comenten y voten, eso me anima mucho a continuar, ademas que disfruto la interacción con ustedes.
¡Sin más, disfruten!
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El día de hoy, por fortuna, solo tengo una práctica a las siete de la noche y como adelanté pendientes ayer por la mañana me tomé la libertad de dormir todo el día.
Eran aproximadamente las tres de la tarde, ya había tomado una ducha y preparado mi "desayuno", que más bien era almuerzo. Coloque mi plato de ensalada y mi taza con leche de fresa en la mesa, hoy me tocaba desayunar sola puesto que mis amigas iniciaron su día desde temprano.
A mitad del desayuno mi cabeza comenzó a punzar repetidamente "¡maldita llorona!" Pensé en voz alta reprochándome por todo el llanto que derramé anoche. Me levanté a buscar algún medicamento para mi afección en los cajones de la cocina. Encontré sólo la mitad de una pastilla, "espero que con esto sea suficiente".
Terminé de desayunar y mientras lavaba los trastes que utilicé, puse a enfriar unas rodajas de pepino para desinflamar mis ojos. Una vez que terminé, me recosté en el sillón, cerré los ojos y coloqué el pepino frío en mis párpados. En esta posición, comencé a procesar en mi mente todo lo que ocurrió el día de ayer.
Al final, caí en cuenta que, me guste o no, lo hecho, hecho está y es algo que no puedo cambiar aunque me arrepienta. Floch es un idiota resentido que pensó que tendríamos algo más allá de una sola noche, a pesar de habérselo aclarado, y por ello se ha encargado de joderme la vida durante los últimos meses. Sé que los fantasmas de mi pasado me atormentarán durante mucho tiempo, lo único que puedo hacer es intentar sobrellevarlo de la mejor manera posible.
Aún me siento culpable, sí. Aún me siento sucia, sí. Aún tengo inseguridades, sí. Y aún me preocupa lo que Armin pueda pensar de mí. Pero no pienso darle gusto a Forster ni al resto de personas que se han empeñado en verme mal. Ellos no saben por qué lo hice ni el peso de la cruz sobre mis hombros.
Solo espero que toda esta mierda pase pronto...
Estaba en una sesión terapéutica conmigo misma cuando alguien llamó a la puerta. Levante una de las rodajas de mis ojos para echar un vistazo a la entrada. "No pueden ser mis amigos, ellos tienen llaves del apartamento" "¿De quién se tratará?"
Me levanté para abrir e intenté caminar sin apoyarme del bastón.
-¡Voy! -Grité desganada.
Quité los seguros de la puerta y la abrí topándome con una gran sorpresa.
-H-Hola, _____.
-¿Armin? Hola. -Dije con tono de confusión. Su inesperada aparición me desconcertó.
