—Recuerdo cuando era niño— dije nostálgico. —Todo era más fácil y feliz, pero ahora soy un adolescente lleno de problemas, rabia, depresión, y que odia a todo el mundo.— suspiré y negué con la cabeza —Desearía ser un niño otra vez; sonreír, llorar; abrazar a mis padres. Pero —hice una pausa— eso está en el pasado, esas emociones y esos sentimientos están en lo más profundo de mí. El pasado no volverá.
—Yo hubiese deseado tener al menos una infancia normal ¿Sabes? —el tono de tristeza en su voz era notable— Mis padres siempre dijeron que era un error, que debí haber muerto yo y no mi hermano.—pude sentir como su voz se iba rompiendo poco a poco pero contenía la respiración para no llorar
—Nunca se preocuparon por cómo estaba o que hacía; solo les importaba su imagen.— suspiró amargada.—Es triste.—hablé expulsando el humo que se encontraba en mis pulmones.
Río sin ganas. —Un día me cansé y le pegué un tiro a mi madre. Ojalá pudiera hacer lo mismo con mi padre.—su mirada estaba perdida en el horizonte.
—También desearía acabar con mi abuelo.— suspiré.
—Estamos rotos Marcus, y solo nosotros nos podemos arreglar.—me miró fijamente a los ojos y ahí lo sentí, me había enamorado, otra vez, aunque la conocía hace poco tiempo. Ella me hacía sentir enojado, feliz, ni tanto, pero con ella no me sentía mal, era la única que no me tenía miedo ni me juzgaba por lo que soy, y se sentía bien, era la única persona con la que podía ser yo realmente.
—¿Que te pasó en la cara? —pregunté mirándola a los ojos.
—Me caí.—respondió simplemente y se levantó para irse, no sé por qué pero no le creo, sé cuando alguien me miente y ella lo está haciendo ahora mismo.
Se fue y me dejó allí sólo, dándome cuenta de que me había enamorado otra vez. O eso creía. Estaba confundido. Pero lo único que sabía es que no quería joderlo todo esta vez.
La primera vez fue un error. Acabé matando al amor de mi vida y yo no quiero hacer lo mismo con ella.
Me levanté y acomodé mi ropa para dirigirme hacia mi casa, estaba tan cansado que solo quería tomar un baño y dormir.
Mientras caminaba hacia mi casa recibí un mensaje de un número desconocido, pensé que era Klaus así que lo ignoré y seguí mi camino hasta que volvió a sonar y lo atendí de mala gana.
—Hey snowflake.
¿Snowflake? ¿Quién es?
—¿Quién eres?— respondí el mensaje mientras caminaba.
—Que amargado, no tienes sentido del humor.
—No estoy para bromas, dime quién eres y por qué me dices snowflake.— ya me estaba irritando.
—Ya, tranquilo, soy Daniela.— ¿Daniela? ¿Cómo tenía mi número? Todavía no se el por qué de snowflake.
—Oh, la chica que no puede vivir sin mi.
—Tienes un gran ego, ¿Sabías?.
—Ya me lo dijiste y si lo sé, también te dije que no es lo único grande que tengo.
—Ya, espero algún día adivinar que es lo más grande que tienes.
—Jajaja, estás loca, ahora sí me disculpas, entraré a mi hermosa casa. Fresa.
Dejó de escribir y entré, ¿En qué momento puedo llegar a hablar con alguien sin enojarme?
Ella está jugando con fuego, aunque somos iguales, uno de nosotros es peor.
Entré a mi casa y no había nadie; absolutamente nadie, solo había un silencio ensordecedor. Era raro.
Subí a mi habitación para bañarme y sacarme toda la sangre.
Abrí la pluma y el agua fría cayó por mi cara y mi cuerpo.
Sentía como limpiaba mis heridas y toda mi suciedad física pero; no limpiaba mi alma.
Mi cabello negro se pegó a mi rostro y no me importaba, seguí bajo la ducha disfrutando del agua caer por mi cuerpo.
Apoyé mis brazos en la pared y bajé la cabeza.
—¿Que estoy haciendo? —pregunté para mí mismo.
Daniela Harrison
Odiaba cuando me preguntaban algo que no podía o no quería contestar.
Por esa razón me fui dejando a Marcus solo cuando me preguntó que me había pasado en la cara.
Obviamente no fue difícil conseguir su número si sabes donde trabaja.
Llegué a mi casa y le mandé un mensaje.
Se me ocurrió llamarle snowflake, no se porque pero....le pega. Aparte de lo de chimenea humana claro.
—No puedes hacer eso Edward.— escuché a la mujer de mi padre hablar.
—Si lo haré, cuando termine este año se irá a ese internado.— no, no no no no, no puede ser.
Mierda, pase las manos por mi cabello en forma de frustración.
Mi respiración se aceleró y no pude creer lo que estaba escuchando.
Joder, sabía que esto pasaría pero no tan rápido.
No, no puedo ir. Si voy nunca saldré de allí.
Debía hacer algo, ya casi se acaba el año, son solo tres meses y no puedo ir allá.
Marcus Miller
Después de mi larga ducha para relajarme decidí dibujar, cómo todos los días.
Era algo que estaba en mi y no podía dejarlo, igual que el cigarro. Cuando tomaba un lápiz y un cuaderno en mis manos me sentía diferente, libre.
Me olvidaba de todas las cosas horribles que había hecho por unos minutos.
—¡Marcus! —gritó mi abuelo desde abajo y yo ni me interesé en bajar rápidamente.
—¿Qué?
—Dame el dinero que haz ganado en la cafetería.— joder, ni siquiera un por favor.
—Esta es la mierda que gano, si quieres pagar tú deuda empieza a trabajar tú. —respondí cortante y le entregué el dinero.
—Mira niño.—sujetó fuerte mi brazo —si no pago ese dinero en dos meses tú estarás muerto. —¿En serio cree que me da miedo?
Me encogí de hombros y me solté de su agarre, fui directo a mi habitación, ignorándolo.
Me encontraba mirando el techo cuando de repente me llega un mensaje que me saca de mis pensamientos.
—Hey chimenea humana. —Daniela, lo sabía.
—¿Chimenea humana? Qué poco original. ¿Qué quieres? —respondí algo cortante, cosa característica de mí.
—Necesito hablar contigo.— ¿De qué quiere hablar ahora?
—Mañana, ahora voy a dormir, chao.— si, Marcus cortante como siempre.
Dejo el teléfono a un lado y me dispongo a dormir, ¿Qué querrá hablar conmigo Daniela?
Dios; debo salir de esta casa y para eso tengo que seguir trabajando.
Mañana es otro día, aunque de tortura para mi pero es otro día en el que planeare algunos de mis planes macabros.
Ayholaaaaa
ESTÁS LEYENDO
Amor de psicópatas© [Completa✔️] #PGP2023
Bí ẩn / Giật gân»No sentía nada y ella me hizo sentir todo» ¿Tendría la capacidad un psicópata de sentir un poco de amor? ¿Dos psicópatas juntos? Te viene a la mente muerte, violencia, venganza pero solo una palabra puede cambiar eso "Amor" Obra registrada en...