extra: LQR's pov

13.2K 1.2K 386
                                    

Importante: Referencia a muerte de personaje al principio.

La primera vez que Lan Qiren tuvo que acoger a alguien en su casa, su hermano había sido declarado incapaz de cuidar a sus hijos.

Recuerda a Xichen aferrado a la mano de su hermano pequeño, cuidando la única constante en su vida hasta ese momento, como si temiera que alguien se lo llevara lejos de él. Su otra mano se encontraba envuelta en las asideras de las dos mochilas que cargaba, algo sucias y con bordados de corazón hechos a mano.

Wangji, de cuatro años, correspondía el contacto del mayor, casi hundiendo las uñas en los dedos de Xichen mientras escalaba torpemente el pórtico de la casa. Sus ojos dorados miraban hacia todos lados y lucían algo confundidos.

Cuando la mujer del servicio social se despidió, no antes de susurrarle sus condolencias a Lan Qiren, él exhaló, olvidando momentáneamente guardar la compostura y cayendo en cuenta del reto que se le presentaba.

Dios, ni siquiera había tenido conocimiento de que su hermano había tenido hijos hasta hace un par de horas.

Habiendo conocido a sus sobrinos por poco menos de media hora y sabiendo cerca a nada de cómo debía tratar con ellos, les trajo una manta y preparó chocolate caliente. Usualmente las cosas dulces no eran de su gusto, pero solo esta vez haría la excepción.

(Fueron muchas veces, en realidad.)

Sorprendentemente, Wangji fue el primero en abrirse a él, siguiéndolo hacia todas partes con ojos rebosantes de curiosidad, siempre seguido de Xichen, quien al principio parecía aterrado de tan solo pensar en dejar a su hermano fuera de los límites de su vista. Con un poco de tiempo y ayuda profesional, Xichen sonreía cada vez más y confiaba paulatinamente en su entorno, siendo él el primero en cambiar el 'Lan-Qianbei' por 'Shufu'.

Pronto, Lan Qiren los inscribiría en la escuela, y luego irían a la universidad, siempre tratando de velar por el bienestar de ambos y a menudo teniendo debates silenciosos sobre el modelo de crianza que él había recibido contra el que él estimaba era correcto.

Y ahora, aquellos niños, tan asustadizos y serios y talentosos y resilientes, hallaban su lugar en el mundo por sí mismos. Xichen, como cabeza de GusuLan; y Wangji, como el segundo al mando.

Lan Qiren no podría estar más orgulloso.

==

La segunda vez que Lan Qiren tuvo que acoger a alguien en el hogar que sus sobrinos y él compartían, el cielo estaba cubierto de nubes grises y llovía a cántaros.

Y Wangji no se encontraba por ningún lado.

Justo cuando estaba a punto de pedirle ayuda a Xichen para llamar a su sobrino menor (porque aún no entendía los teléfonos celulares, esas chatarras complicadas), escucha la puerta principal abrirse y la vieja madera de la entrada crujir bajo el peso de dos personas: Wangji, tan mojado como uno puede estar luego de dar un tranquilo paseo bajo la lluvia torrencial, acompañado de nadie más que Wei Wuxian, uno de sus más inquietos ex-alumnos, igualmente o más mojado que el menor Lan.

—Wangji ¿Qué significa esto?—, pregunta, sin ánimos de reprocharlo pero en verdad tratar de saber qué estaba pasando. A su lado, Xichen pasa con toallas limpias para los recién llegados.

Seguro, Lan Qiren había escuchado lo sucedido entre parte del clan Wen e Industrias Jiang y los rumores de la posible desheredación de uno de los menores hijos de estos últimos, pero confiaba en que Wei Wuxian recibía el apoyo que necesitaba de su familia.

Observando la situación actual y el rojizo borde de los ojos del mencionado, no hacía falta ser un genio para saber que no había sido como pensaba.

Confeti (sobre tus mentiras) | WangXianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora