Esa misma tarde Souichi viò a sus dos hermanos y su tía en un restaurante donde solían almorzar.
el rubio expresó sus dudas sobre la propuesta de Morinaga a su familia.
-Bueno nii-San, tienes razón en dudarlo, que el hombre tiene un sentido de la moralidad muy cuestionable, por lo que es difícil confiar ciegamente en su propuesta.
Dijo Tomoe, su hermano menor a punto de casarse.
-Sin embargo, ¿escuchaste cuánto dinero le ofreció? Y solo en la fase inicial, piense en cuándo hará carrera.
También le aseguró que no solo podrá elegir los productos a utilizar, sino también los proveedores en los que confiar.
Respondio con urgencia la joven Kanako, hermana menor de Souichi.
-Sí lo sé, estoy evaluando todas las posibilidades que tengo frente a mí.
-Bueno, pero hijo mío, como dijo Sun tzu "mantén a tus amigos cerca, pero mantén a tus enemigos aún más cerca".
- En cualquier caso, es la única posibilidad que tengo en este momento de convertir a una de las mayores empresas a la sostenibilidad, sin olvidar los recursos económicos que puedo explotar para ayudar a la investigación en cada una de sus ramas.
Siempre seré una persona ética, siempre lucharé por los mismos ideales y no seré contaminado por ese hombre.
Dos semanas después.
-Señor Morinaga, he mirado la nueva lista de proveedores que me enviaron esta mañana y me gustaría consultarle sobre algunos nombres que han tenido un fuerte impacto ambiental con sus productos.
-Oh, absolutamente.
Sin embargo, también me gustaría consultarle sobre un asunto.
Morinaga sacó dos hojas para su membrete personal y se las expuso a Souichi.
- En tu opinión, ¿cuál es el mejor?
Souichi miró ambas hojas y estaba confundido al no ver ninguna diferencia.
- Son idénticos.
-Absolutamente no, el primero tiene un acabado de tela.
El otro en cambio en pergamino.
¿Luego? ¿Qué piensa usted al respecto?
Souichi continuó observándolos de manera confusa, hasta que abrió ambas bolsas y lamió la parte donde estaba presente el pegamento.
-Mmmh, no, este no.
Esto es mucho mejor.
Morinaga observó a Souichi con asombro e hizo lo mismo que el.
-¿Sabes? hice la misma pregunta a más de 80 personas, incluidos gerentes e investigadores, usted es el único que me dio esta respuesta.
Eres muy bueno.
Te conseguiré un laboratorio más grande.
Morinaga se fue, dejando a Souichi mirándolo con asombro.
Unos meses después.
- Entonces Souichi, ¿qué forro crees que debería poner en el sofá de mi oficina?
- Por supuesto algo lavable, ya que tienes la mala costumbre de sorber tu capuchino en posiciones muy desequilibradas, lo has manchado más de una vez.
Por lo tanto, elija una tela lavable que también sea sostenible y reciclable, ya que tiende a cansarse fácilmente de las cosas y reemplazarlas.
-Seguro, lavable y sostenible.
¡Oh, pero mira! Hay ramas entrelazadas en eso.
-No coincide con el color de tus cortinas.
