𝗛𝗜́𝗕𝗥𝖨𝖣𝖮𝖲 ; STRAYKIDS & ITZY

𝗗𝗜𝖷

Felix estaba en el baño, mirándose en el espejo. Mirando su cuerpo, no le gustaba lo que veía, como tampoco le gustaba recordar. Tenía cicatrices y cada una de ellas contaba una historia diferente, pero todas ocurridas en el mismo lugar. Odiaba todo eso.

JiSu y SeungMin siempre estuvieron con él cuándo comenzaba a sentirse de esta manera, pero ahora estaba solo. No tenía a sus amigos. Eso le dolía, le gustaba estar con Chan, él era realmente bueno con él, pero en estos momentos necesitaba a sus amigos, y que les digan que nada de eso iba a volver a ocurrir.

Lágrimas comenzaron a escapar de sus ojos, haciendo que sintiera como todo se rompía un poco más en su interior.

Chan estuva buscando al minino pero no lo encontraba y eso le causaba un poco de ansiedad. Vio la luz del baño encendida así que supuso que estaba allí por lo que se acercó y abrió la puerta, no le agradó del todo lo que vio. Chan podía asegurar que su alma dolía en ese momento.

ChangBin estaba recostado en la cama que compartía con MinHo, el aun no llegaba del trabajo así que solo estaba esperando oír la puerta principal para bajar y verlo.

Una de sus manos estaba sobre su cadera, tocando la cicatriz que allí tenía. No le gustaba recordar, simplemente intentaba olvidar todo eso. Pero no siempre podía alejar los recuerdos. Había comenzado a recordar el porqué de sus cicatrices, como también cómo se las habían hecho. Algunas eran por defender a JiSu, otras eran por intentar soltarse del agarre de esas personas, y algunas otras por el simple hecho de que le hacían daño. Cuando menos se dio cuenta, ya estaba comenzando a derramar lágrimas.

MinHo llegó y se sorprendió al no ver a ChangBin recibiéndolo. Tal vez se había dormido, eso era probable ya que era muy tarde. Subió las escaleras y entró despacio a la habitación. Su corazón se apretó al ver al menor llorar.

ChaeRyeong estaba aferrada completamente a YuNa mientras lloraba. La más alta no entendía el porqué de las lágrimas de la minina, cuando había llegado la vio llorando y no dudo en ir a abrazarla y preguntarle qué le sucedía, pero eso solo hizo que su llanto se intensificara. YuNa estaba preocupada. Acarició la cabeza de ChaeRyeong, mientras esta ocultaba su rostro en el espacio que había entre su cuello y su hombro. Le dolía verla así y no saber la razón del porqué de su llanto le dolía aún más.

ChaeRyeong se sentía protegida con YuNa, pero no podía detener sus lágrimas. Los recuerdos la habían estado atormentando, y eso dolía demasiado. Odiaba ser tan débil en esos momentos, odiaba todo de sí.

JiSung estaba encerrado en el baño, los recuerdos lo había atacado nuevamente. JeongIn estaba del otro lado de la puerta intentando que el más bajo le abriera, le dolía oír cómo lloraba.

JiSung estaba apoyado en la puerta, mientras sollozaba. Había oído a JeongIn del otro lado de la puerta, diciéndole que necesitaba saber qué le sucedía para poder ayudarlo. Pero ese era la maldición de JiSung, él nunca decía las cosas. Entendía que JeongIn quería ayudarlo, pero no quería que sepa la razón de su llanto. Tenía miedo, mucho miedo, más que la vez que intentaron golpearlo, el miedo que tenía ahora era mucho mayor. Estar solo y recordando todo esto no era bueno, no le hacía nada bien.

SeungMin estaba simplemente intentando que sus lágrimas no cayeran, eso era de débiles y él no era débil. No iba a dejar que HyunJin lo viera llorar. Iba a tragar sus penas y su llanto como lo había hecho otras tantas veces. Él no era débil, no iba a llorar.

Pero eso era lo peor que podía hacer, porque mientras intentaba tragar sus penas y su llanto, los recuerdos se hacían más fuertes e inundaban todo pensamiento. Las lágrimas salieron cuando notó que simplemente ya no quería seguir siendo fuerte.

HyunJin lo vio y se acercó a abrazarla, mientras le preguntaba qué le sucedía. SeungMin pensaba que si hubiese sido más fuerte no hubieran herido a JiSung de esa manera, se culpaba de todo eso.

JiSu pensaba que si tal vez hubiese sido más fuerte nada de eso hubiese pasado. También recordó todo los golpes que recibió ChangBin por ella. Recordó que la última vez que lo hirieron fueron realmente duros con él, a partir de ese momento se juró que iba a defenderlos a todos. No le importaba recibir golpes o que hagan experimentos con ella con tal de que no les suceda nada a los demás. Muchas veces simplemente no podía defenderlos y eso hacía que en momentos como estos, en los que los recuerdos volvían, se sintiera la peor persona del mundo.

Comenzó a llorar, realmente ya no le importaba que YeJi la viera así.

YeJi la miraba preocupada, había estado sentada mirando el suelo hace ya mucho tiempo. Vio las lágrimas resbalar por su rostro y no dudo en abrazarla. Pero se sorprendió cuando JiSu también la abrazó.