goku x Jessica

Cap 10

Hola a todos, perdón por la tardanza, no me sentía muy bien así que no escribí en un tiempo, pero ya me siento mejor, Seguramente actualice esta historia antes que la de goku en naruto debido a que creo que algunas cosas que tenia planeadas no las podre poner por cosas que escribí antes así que tengo que planear nuevamente las cosas. La historia de goku en one punch man la actualizare una semana después de la publicación de este cap. Bueno, dejando eso de lado que empiece el cap.

"Te tardaste mucho, goku idiota", susurro jessica para sí misma con felicidad mientras empezaba a salir de su escondite, pero justo antes de salir sintió como sus heridas dolían haciéndola caer de regreso al escondite mientras se encogía de dolor, "arde", dijo jessica con dolor sintiendo como el pasta medicinal ardía en su herida. "Puedes hacer que el dolor pare", escucho una voz jessica detrás de ella haciéndola abrir sus ojos con miedo antes de alejarse de la voz quedando con la espalda contra la pared viendo con miedo al mismo espectro con el que hablo goku.

"¿Quién eres?, pregunto jessica adolorida mientras se sujetaba su estomago por el ardor. "Eso no importa, lo que importa, es que ahí una forma que tu dolor desaparezca", hablo el ente llamando la atención de jessica, pero aun desconfiaba de este. "¿Cuál seria esa forma?", pregunto jessica mientras el ente daba lo que supuso que era una sonrisa, "Debes matar a 2 persona, sus vidas te ayudaran a curarte, pero aumentara tu locura durante un momento, no tendrás control de tus actos en ese momento", dijo el demonio mientras jessica pensaba en eso, aun debía vengar a su madre, y después podría vivir feliz con su goku.

"ya te di tu solución niña, ahora, entretenme un poco, jajajaja", tras decir eso el ente se disolvió en la neblina entrando a la calavera mientras su risa aun se escuchaba en el lugar. Jessica miro el lugar donde desapareció el ente antes de levantarse nuevamente, jessica intento subir de nuevo por su escondite, pero nuevamente el dolor no la dejo, así que miro detrás suyo a la pared que separaba su escondite del sótano de su madre, "No quiero pasar por esa cosa, pero no creo que pueda subir", murmuro para sí misma jessica caminando a la pared, tras inspeccionarla por un momento encontró una tabla floja.

Jessica quito la tabla y la dejo lo más suavemente posible en el suelo para que no hiciera ruido, no sabia si goku aun seguía a los alrededores. Jessica paso su pierna por el espacio donde antes estaba la tabla para pasar, pero no pudo pasar por 4 razones. Jessica se sonrojo un poco antes de regresar su pierna y patear otra tabla aflojándola lo suficiente para que pudiera quitarla sin mucho esfuerzo. "Maldito crecimiento, solo estorban para hacer las cosas", se susurró jessica mientras miraba sus pechos y su parte trasera con un sonrojo, no era la primera vez que sus atributos le dificultaban hacer algunas cosas.

Jessica dejo de lado esos pensamientos y se dirigió a la escalera rodeando el circulo, no quería tocarlo, esa cosa le daba escalofríos, esta empezó a subir las escaleras llegando a la habitación de su madre donde un brillo capto su atención, encima de la meso junto a la cabeza de su madre estaba el cuchillo de esta. Parecía que goku lo había dejado ahí. "deje mis armas en casa de goku", se recordó jessica mirando el chuchillo, tardaría mucho en llegar a casa de goku y tomarlas, y aun más en volver. Con un poco de nerviosismo jessica tomo el cuchillo esperando que pasara algo, pero no paso nada, después de unos segundos jessica se dirigió a su cuarto preparándose para ir a matar como le dijo el ente. Después de eso se prepararía para la venganza de su madre.

Time skip

Esa noche en la entrada de cristal lake

Se podía ver una reja que cubría la entrada al campamento, en esta había un letrero que decía que el campamento fue clausurado, Michael después de la muerte de kiba se encargo por todos los medios posibles que los socios cerraran el lugar. No quería que nadie mas muriera. Pero enfrente de la reja había dos figuras una mujer de alrededor de 1.60 con cabello negro y ojos avellana y un hombre de alrededor de 1.70, algo delgado y llevaba consigo lo que parecían unas pinzas.