Capítulo 10

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Narra Charlotte

No, mi padre no me dejaba salir entre semana, por eso le dije que me iba a dormir y me escapé por la ventana de mi habitación.
Necesitaba desconectar, necesitaba estar con mis amigos y emborracharme para olvidar los jodidos problemas y los dolores de cabeza que te da la vida, aunque fuera un miércoles.

Me alegré de ver a Beth con ellos, riendo y pasándoselo bien mientras Tyler bailaba de aquella manera que siempre nos hacía carcajear a todos.
Tengo que reconocer que me gusta que Harris se lleve tan bien con nosotros, comenzaba a ser aburrido estar siempre los tres y de alguna manera ella augmentaba la diversión en el grupo.

Jamás pensé que me caería tan bien.

Había desaparecido hace un rato cuando Robin la tomó del brazo y la arrastró hacia los baños, y como me cansé de bailar decidí sentarme en un taburete frente la barra.

—¿Otra? —me preguntó Michael.

—Por favor.

Acepté con ganas esa cerveza fría que me tendió Michael y giré el taburete para quedar de caras a la gente.
Me entretuve mirando a Emily mientras intentaba coquetear con aquella chica de pelo negro que se le acercó hace un rato para pedirle el mechero.
Parecía que la chica le seguía el rollo a mi amiga.
Sonreí mientras me llevaba la cerveza a los labios.

Bien hecho, Ems.

—¿No bailas?

Giré mi cabeza hacia la chica que se había sentado a mi lado. Me miraba sonriente y con una ceja levantada.

—Estoy esperando a que pongan algún temazo. —contesté volviendo la vista a mi amiga.

—¿Esto no es suficiente temazo?

Volví a mirarla y se señaló de arriba a bajo.
Reí.

—Lo eres. —apoyé mis dos codos en la barra que estaba pegada a mi espalda. —Pero no tengo muchas ganas de bailar.

La chica hizo una mueca y miró al frente.

—¿Cómo te llamas? —pregunté observando su perfil.

Era guapa, y mucho.
Su pelo era oscuro y sus ojos también, sus cejas eran gruesas y bien perfiladas. Vestía unos vaqueros oscuros con una chaqueta de cuero que le quedaba genial con la camiseta blanca y corta que llevaba debajo.

—Beth. —contestó. Vaya, qué casualidad. —¿Y tú? —volvió a mirarme.

—Charlotte, pero todos me llaman Charlie.

Cuando miré al frente, vi a Robin tirando de la mano de Beth, saliendo de los baños y dirigiéndose a la terraza.

—Bien, Charlie... —se levantó de su asiento y se colocó frente a mí. —Te veo un pelín aburrida.

Dió un paso al frente, rozando mis rodillas.

—Ahora ya no tanto. —contesté mientras le daba una mirada descarada.

Ella sonrió y acabó por acercarse del todo, colocándose entre mis piernas pero sin tocarme del todo.

—Me gusta tu pose de chica mala. —soltó mientras miraba mis labios.

IT WAS YOUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora