Capituló 42.Callejon Diagon

347 17 1
                                    

Isis.
Papá y Julian decidieron acompañarle al Callejón Diagon ya que me había llegado la carta de Hogwarts esta mañana.

—Oh..Ollivanders era la mejor tienda de varitas,una lástima lo que sucedió.—dijo mi hermano triste.

—Lo sé,la ventaja es que aún tengo mi varita sana y salva conmigo.—dije.

—Vamos hija,necesitarás una nueva túnica estás un poco más alta y esa que llevas puesta se ve un poco chica.—dijo mi padre.

—Ya tiene 16,es obvio que tiene que crecer padre.—dijo Julián.

Solté una risa a lo bajo,decidimos ir Madame Malkin para comprar túnicas y al entrar vi a Hermione,Ron y Harry con Molly.

—¡Chicos!—dije emocionada.—Es un alivio verlos por aquí.—concluí.

—Is¿cómo estás?—dijo Harry y Ron al unísono.

—Estoy muy bien,pero tú ¿cómo estás Harry?Siento tanto tu perdida.—dije bajando la mirada.

Estoy bien pequeña,será mejor que nos retiremos de aquí.—dijo Harry con voz arrogante.

—Pero si aún no compran nada..—dije bajando la voz hasta que escuché alguien detrás de mi.

—Si te preguntas porque huele mal,madre,es que acaba de entrar una sangre sucia.—anunció la persona que estaba detrás de mi.

—No hay ninguna necesidad de emplear ese lenguaje.—le dijo la Madame.

Al dirigir mi vista hacia el chico que estaba molestando a Hermione lo vi...
Ahí estaba el parecía pálido,con sus facciones más afiladas,y aún lucia su cabello rubio platinado.

—Draco...—dije en voz baja.

El pareció notarme pero me ignoró y se dirigió hacia Harry,en un momento ambos estaban levantando sus varitas y se que esto sería una pelea.

—¡Y tampoco quiero ver varitas en mi tienda!—se apresuró a añadir la Madame.

Déjalo,no vale la pena Harry.—dijo Hermione agachando la mirada.

—¡Bah,como si se atrevieras a hacer magia fuera del colegio!—se burló Draco.—¿Quien te ha puesto el ojo morado,Granger?me gustaría enviarle flores.—dijo Draco.

—¡Basta ya!—anunció Madame Malkin y buscaba ayuda con la mirada.—Por favor señora..—dijo.

Detrás de Madame Malkin salió una señora,con cabello azabache y lucia unos mechones rubios platinados debajo de ese cabello azabache.

Guardad las varitas.—exigió con frialdad a Ron y Harry.—Si vuelven a atacar a mi hijo,me encargaré de que sea lo último que hagan.—anunció.

Reí por lo bajo,si su madre se enterara de que su hijo es quien siempre empieza estas peleas...

—¿Lo dice enserio?—la desafió Harry con la mirada.—¿Que piensa hacer?¿Pedirle a algunos mortífagos amigos suyos que nos liquiden?—dijo con voz furiosa.

Madame Malkin soltó un gritito y se llevó las manos al pecho.

—Chicos, no deberíais acusar... Es peligroso decir cosas así. ¡Guardad las varitas, por favor!

Mi pequeña Hufflepuf.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora