Capitulo 1

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El cuarto se sentía frío y solo. Era de colores neutros, recuerdo que mi hermano y yo peleamos por ver quien decidía el color de este. Por razones obvias perdí yo. También recuerdo el dia que lo pintamos, el había convencido a nuestros padres para hacerlo el mismo, al final tuvimos que llamar a los expertos. Una pequeña y nostálgica sonrisa salio de mis labios.

Con el corazón en la garganta mire  hacia mi lado izquierdo, con la nula esperanza de que el estuviera ahí. No era asi, solo había una cama bien hecha,como si nadie la hubiese usado. Y eso dolía.

Trague las ganas de llorar, me levante de la cama, tome mi mochila y salí del aire asfixiante. Necesitaba respirar.

— ¿Como dormiste, cielo? — preguntó mi madre con una cálida sonrisa.

— Bien. — pase una mano por mi cara y deje mi mochila en la mesa.

Mi madre suspiro y puso una sonrisa. — Tu padre y yo....

La mire instintivamente. Ella me miro con dulzura, pero también con algo de cansancio.

— Pensamos en hacer una tarde de películas, ya sabes pasar tiempo en familia. — dejo un tazón de cereal para mi en la barra de la cocina . — ¿que dices?.

—Podemos ver esa película que tanto te gusta y ordenar una pizza. —a completo mi padre que todo este tiempo estuvo mirando el periódico.

Amaba a mis padres. La manera en la que trataban de sobrellevar las cosas era de admirar.

— Podemos rentar las de Harry Potter, ¿que dices? — hablo mi madre al ver mi silencio.

Aprete mi mano izquierda. — Esas eran las películas favoritas de Nick.

Silencio.

— Finn.... — suspiro mi madre.

— Se me hace tarde. — tome mi mochila con rapidez y fui en dirección a la puerta.

— Aun es temprano y no has... ¡Finn!.

Cerré la puerta detrás mío y a pasos rápido me aleje lo mas que pude.

Por mas que quisiera ya no pensar en el, me era imposible. El aun dolía. Fue una madrugada en verano cuando mi hermano fue reportado como muerto. Desde ese dia todo cambió, nuestra familia se desmoronó.

Llegue a la escuela y apenas puse un pie en el edificio, sentí las miradas de todos sobre mi, porque, para bien o para mal, todos me conocían como el hermano del capitan del equipo.

—¡Mi pequeño Wolfhard! — grito Will para luego darme un pequeño abrazo. — ¿como va tu día?.

— He recibido alrededor de unos diez pésames, muy alentador para comenzar la escuela. — suspiré cansado.

El me miró con comprensión. — ¿cómo siguen tus padres?.

— Empiezan a manejarlo. — cerré mi casillero. — creo que lo llevan mejor que yo.

El sonrío levemente. — Ya pasará.

— ¿y tu, como estas?. — pregunté y ambos comenzamos a caminar.

Will era el mejor amigo de mi hermano. Lo conocía desde de pequeño asi que también era algo duro para el.

— Algunos días me hace falta. — metió las manos a sus bolsillos.— pero todo bien, pudo vivir con ello. ¿Y tu?

— Voy bien.

—Eso me alegra, Finn

Me dio una leve sonrisa sin despegar los labios, se la devolví.

— Ahora, vayamos a clases que no queremos empezar con el pie derecho. Nos vemos Finn, cuidate.

Dio unas palmadas en mi espalda y se alejo en dirección contraria.

—Eso haré....

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