Xiao Zhan un joven de 23 años, el hijo de un empresario no tan reconocido pero claro que ha salido en algunas revistas con su familia aparentando una hermosa familia feliz pero...
¿Quién imagina que el hijo menor hizo tal a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Ya se había hecho de noche a pesar de que le prometí a Yibo volver temprano, pero después de mi primer pelea con Wen Han no podía ir a verlo todo arañado y con mi ropa rasgada. Wen Han es peor que un gato...
Wen Han me pedía que lo salvará, se iría a Estados Unidos con nuestros tíos que son terapeutas y ellos cuidarían de Wen Han pero Wen Han no quería irse por su miedo a los aviones.
—Lo siento Wen Han... Pero tienes que ir—dije mirándole
Me dolía verlo de ese modo pero nunca espere que saltará sobre mí y me comenzará a arañar la cara, nuestros padres se alarmaron pero no pudieron alejar a Wen Han de mi y claro que yo le respondí no me iba a dejar así que también comencé a arañarlo o pegarle con mi puño, también le lance unas cachetadas que había reprimido por tantos años... Nunca antes habíamos peleado, Wen Han podía hacerme de todo pero nunca me golpeaba pero esta vez todo fue diferente.
Me encontraba sentado en el sofá mientras Wen Han se encontraba en el otro sofá acostado por el dolor. Mi cabello se encontraba desordenado.
《Estúpida, mi pelo idiota》
—A-Zhan, quédate estos días en casa para que Yibo no te vea así—dijo mi madre acomodando mi cabello—Nosotros llevaremos a A-Wen con tus tíos—
Asentí mientras vi a Wen Han hacer berrinche, mi padre se encontraba amenazandolo con el cinto y sí, solo nos separamos de nuestra pelea cuando nuestro padre nos pego con el cinto por unas ocho veces a cada quien.
Mis padres se despidieron de mí y se subieron al auto en donde se llevaron a Wen Han al aeropuerto. Me quedé un largo rato acostado en el sofá para luego ir a la habitación de la sirvienta principal.
—Saldré un momento... ¿Podría acompañarme? —
Quería salir a caminar al rededor de mi casa, no iría con Yibo porque no quería que me viera así de arañado y con el cabello desordenado pero tampoco quería estar solo y esa sirvienta ha estado conmigo desde niño así que puedo confiar en ella.
Cuando salimos pudimos ver a Yibo recargado en el auto lo cual me sorprendió y trate de huir pero la sirvienta no me lo permitió.
—A-Zhan, deberías hablar con él—sonríe y acaricia con cuidado mi mejilla—Ve—
Suspiré y asentí, la sirvienta entró y cerró con seguro mientras yo me acerque a Yibo tratando de esconder mi rostro y mi ropa rasgada. Yibo tomó mi cara con cuidado mirándome preocupado.
—¿Él te hizo esto?—cuestionó molesto
—... Yo también le pegue... —suspiré y también acaricie su mejilla—¿Qué haces aquí? Debes estar descansando—
—Vamos a un lugar—
Me tomó de la mano y me llevó hasta el auto en donde me hizo subirme, Yibo también subió pero no recargo su espalda al asiento, suspiré y me recargue al asiento. No quería que Yibo me viera así, todo arañado y con la ropa rasgada aunque yo deje peor a Wen Han que fue lo que me hizo feliz, lo único que no me gustó fue que mi papá me pego con el cinto ocho veces en el trasero...
