Capítulo 1

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Otro día más para ir al mismo infierno, el instituto. Me llamo Emma, tengo 17 años casi 18. Mis padres pasan de mi completamente salvo Mike, mi hermanastro, que él es el único que me hace caso. Mike y yo siempre hemos estado juntos desde pequeños. Aun que no sea mi hermano de sangre, para mi es como si lo fuera. Mike es adoptado y mis padres le hacen más caso a él que a mi todo por el simple hecho de que es mejor en todo según mis padres. Tiene 20 años y está estudiando psicologías infantil. Me termino de arreglar y bajo a desayunar. Como de costumbre, mis padres no están a si que Mike me llevará al instituto. Desayunamos juntos, cojo mis cosas y nos vamos. Cuando estamos en el coche, me pregunta sobre como me va en el instituto desde que Catherine, mi mejor amiga, ya no está. Trágicamente murió en un accidente de coche de vuelta del entrenamiento. Iba con su padre. No puedo evitar dejar caer una lágrima que, poco a poco, se va deslizando por mis mejillas. Realmente, desde lo que ocurrió no me va nada bién en el instituto. Mis notas han empeorado, no tengo a nadie, sufro acoso escolar pero no digo nada por miedo a lo que són capaces de llegar ha hacer. Para no preocupar a mi hermano le digo que me va bién.

-¿Te dejo dónde siempre?

-Claro, si quieres puedes dejarme más adelante.

Llegamos al lugar dónde suele dejarme y bajo del coche. Me despido de él y camino en dirección al instituto. Cuando estoy a punto de llegar, tropiezo con el cordón de mi zapatilla y caigo al suelo de frente. Mi carpeta se abrió y salieron todos mis apuntes. Los recojí y cuando me levanté, pude ver, no muy lejos de mi, un grupo de chicos que se estaban burlando de mi. Ya estoy acostumbrada, pero no puedo decir que no me duele al verlo. sigo con mi camino y porfín llego al instituto. Entro y me dirijo hacia mi taquilla. Abro la taquilla y saco mi libro de história. Cuando cerré mi taquilla, me encontré con Beth y sus "perritas falderas" por decirlo de alguna manera.

-No te favorecen esas mallas, te hacen ser más gorda de lo que estás- dijo Beth riéndose y burlándose de mi, como siempre.

-Pues vale, si yo me los quiero poner, me los pongo. Si no te gusta no mires.

-Mira cachalote, no me vengas con ese tono de chula que llevas si no quieres acabar en el cubo basura- Me dijo mientras me empujaba contra las taquillas.

No respondí solo por el simple hecho de ahorrarme problemas. Beth no ha parado de meterse conmigo desde que empezamos el instituto. en un pasado fuimos muy amigas, siempre estábamos juntas, lo hacíamos todo juntas y siempre estábamos con eso de que nadie ni nada nos separaría pero el instituto le hizo cambiar y empezó a odiarme. Cuando me soltó, me coloqué bién la sudadera y me dirijí hacia el aula de história. Al entrar, voy hacia mi sitio habitual y me sorprendo al ver a Daniel sentado en el asiento de delante. A su lado se encuentra Jake, su mejor amigo. Jake y Daniel són los chicos más populares del instituto y los más guapos. Cualquier chica (menos yo) desearía salir con uno de ellos dos. No le doy importancia y me siento. El profesor entra y da inicio a la clase. Durante la clase, nos explica que, por parejas, vamos ha hacer un trabajo sobre la antigua Grécia y que el sería quien hiciera los grupos. Ya que somos 20 en clase y el número de chicas es el mismo que el de chicos, hará los grupos mixtos. Se que si me toca con alguno de los vagos, lo tendré que hacer todo yo a si que me preparo para lo peor.

-Emma, tú harás el trabajo con Daniel.

Me quedé alucinada con las palabras del profesor. Vi como Beth se enfureció a causa de los celos y eso me gustó, pero tener que hacer el trabajo con Daniel era lo peor que me podía pasar. No aguantaré ni un solo minuto a ese creído hablando todo el rato de lo guapo que es y de lo bueno que es jugando a fútbol. Suena el timbre y todos salen escopeteados del aula. Solo quedamos Daniel y yo.

-Perdona, ¿Tú eres Emma?- me preguntó Daniel.

-Si, ¿y tú Daniel?- Pregunté para quedar bién aun que ya lo supiera.

-Si. Te quería preguntar si te va bién quedar este sábado para hacer el trabajo en mi casa.

-Mm... Claro, ¿a que hora?

- ¿A las 18:00 te va bién?

-Si.

-De a cuerdo, nos vemos- dijo con una sonrísa.

-Nos vemos- respondo igual.

Salgo de clase y voy a mi taquilla para guardar el libro y sacar el de física y química. cuando ya lo he cogido, me dirijo hacia el laboratorio. Choco con alguien y caigo al suelo. es una chica morena, ojos marrón claro, no muy alta, muy delgada, de piel pálida, vestía con colores oscuros y llevaba un pipo de color gris.

-Perdona, no te vi y sin querer te hice caer-Dijo la chica disculpándose por lo ocurrido.

-No te preocupes, ¿como te llamas?

-Abril ¿y tú?

-Emma, encantada de conocerte Abril-digo sonriendo.

-Igualmente Emma-me respondió devolviéndome la sonrísa.

-¿A que aula vas ahora?

-Me toca Física y Química y buscaba el laboratorio.

-Puedes venir conmigo, a mi también me toca lo mismo.

-Vale, es que soy nueva y me perdí. Mi hermano lo más seguro es que haya encontrado su clase-dijo y rió.

Nos dirijímos juntas hacia el laboratorio y de camino vamos hablando. Abril me cuenta que sus padres tuvieron que mudarse aquí por cuestión de trabajo y que ella quiso quedarse con su tía y seguir en su otro instituto pero sus padres no querían. Llegamos al laboratorio y la clase ya había empezado.

-Llegáis tarde a clase señoritas-nos dijo la profesora un tanto cabreada.

-Lo siento, no volverá a ocurrir-dijo Abril disculpándose

La profesora nos manda a sentarnos y justo encontramos dos pupitres libres juntos. Nos pasamos toda la hora hablando. Abril es una chica simpática y muy alegre aun que su aspecto a primera vista diga lo contrario. Después del accidente de Catherine, pasándolo mal en el instituto, por fin encuentro a alguien con quien poder hablar de todo y hacer de todo. Cosas que solo puedes hacer con una amiga. Quedan quince minutos para acabar esta clase y empiece la próxima, Teatro.

Aparta, imbécil Donde viven las historias. Descúbrelo ahora