2.- Sal de mi cabeza

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Jisoo

Me encontraba en el salón de Cho, jadeando y con la cabeza echada hacia atrás sobre el respaldo del sofá.

Con el abdomen algo contraído, mientras, una de sus zorritas se aferraba a mi polla como si fuese una salvación divina. Lamía y succionaba con ganas mientras yo gruñía.

Aceleró el movimiento de su cabeza haciendo que mi miembro entrase más en su boca y eso logró que la tomara con brusquedad del pelo.

Soltó un quejido mudo al tener la boca ocupada y yo me estremecí al sentir la vibración de su boca. Esta puta no lo hace nada mal.

Abrí los ojos y la miré, tenía el rostro empapado en sudor y lágrimas de esfuerzo. Dejé ver una pequeña sonrisa de superioridad. Cuando se sacó el miembro de la boca tosió un poco.

— Joder, sigue duro. –dijo la agitada chica.

—Bueno, una lástima. –reí de forma arrogante– Quedas tú, Cho.

La nombrada me miró y se le dibujó una sonrisa perversa. Se arrodilló frente a mí y se hizo una coleta sin dejar de mirarme. Mordió su labio inferior y se acercó a mi querido amiguito.

—Eres la última, cuando acabes de chuparlo me iré. –dije colocando mis manos tras mi cabeza.

—Sin problemas, cielo. –ronroneó con un tono algo ronco.

Se lo metió en la boca y cerré los ojos. Empezó a moverse suave y mi respiración se agitó un poco. Sentía un calor tremendo y frente a mí ya no estaba Cho, veía a esa jodida nerd.

Besó mis labios con suavidad y su cintura se movía sobre mí con una coordinación de escándalo. Jadeaba por más sobre mi boca mientras aumentaba su contoneo.

—Jisoo... Q-quiero que me destroces... –dijo gimoteando, y joder, eso me puso como una moto.

Agarré su cabello y sin abrir los ojos empecé a empujar con fuerza mi cadera contra su boca. Con cada embestida soltaba un bramido y ella generaba un quejido ahogado.

Sus gemidos eran más intensos y seguidos mientras sus uñas se enterraban en mi piel. Ella tenía la cabeza echada hacia atrás y su cuerpo se movía desesperado.

—Jisoo... Si-sigue, necesito más... –dijo como pudo.

Volví mis movimientos más bruscos al punto en el que Cho tuvo que apoyar las manos sobre mis muslos para soportar un poco más la fuerza de mis embestidas.

Mi cuerpo se comenzó a tensar, las venas en mis antebrazos se marcaron con facilidad y mi abdomen se contrajo dejando ver la musculatura más definida en el torso.

Gemía y gemía mientras dejaba sus uñas marcadas en mí como una gata. Su cintura subía y bajaba por sus sentones mientras mis manos la ayudaban a llegar más abajo.

—¡Jisoo! –dijo casi en un grito subiendo una de mis manos a sus senos.

Escucharla gemir así era fantástico. La hice rebotar más y con la mano en uno de sus senos apreté con total descaro. Una sonrisa maliciosa se dibujaba en su rostro de éxtasis, estaba en el clímax y yo junto a ella.

Pegué del todo su cabeza contra mi pelvis y me corrí en su garganta. Cuando terminé solté su cabello y agarré su cara con mi mano sacando la polla de su boca.

—Buena chica. –sonreí respirando algo agotada.

Me levanté cerrando mi pantalón y las tres chicas me miraban con una sonrisita de complicidad. Todas con el maquillaje corrido y las coletas desalineadas.

—Ha sido un placer chicas, pasen buena noche. –dije saliendo por la puerta.

—Esperamos verte pronto. –dijo Cho apoyada en el marco de la entrada.

—No esperes tanto, no suelo repetir plato si ya lo he probado. –le miré y sonreí– pero considérame conocida tuya.

Tras decir esto me eché a andar hacia mi departamento mientras en mi cabeza cantaba una de mis canciones favoritas. Unos minutos después abrí mi puerta y estaba Jennie, en camisa ancha y cenando en el islote.

Jennie

La puerta del departamento se abrió y de frente me encontré a Jisoo, con las mejillas Rojas y la frente cubierta de sudor. La analicé un poco más y tenía una camiseta de tiras dejando ver sus tonificados brazos.

—Huele bien, ¿Hiciste la cena? –dijo ella a mi espalda sacándome del trance.

—Sí, hice lasaña de pollo con extra de queso. –le miré y ella sonrió.

—Que detalle por tu parte. –dijo en su irritante tono burlesco.

—En ningún momento dije que fuera para ti. –le dije de forma seca.

Ella me miró por unos segundos y su mirada bajó a lo que llevaba puesto, sólo una camiseta enorme. Tragué saliva y ella se acercó dejándome acorralada contra el islote.

Su respiración era cálida y olía a cerveza. Su aroma corporal era suave y dulce y contrastaba con ese olor a alcohol. Subí mi mirada de su cuello a su rostro y su expresión era fría.

—Veo que a alguien se le subió la confianza como para hablarme así. –dijo tranquila pero su voz sonaba más ronca de lo normal.

—Apestas a alcohol Jisoo. –dije un poco más lasciva tratando de evitar una discusión.

—Y tú hueles jodidamente bien... –dijo hundiendo su rostro en mi cuello– que por el momento sea amable no significa que estés a salvo.

Su respiración chocaba contra mi cuello y mi piel se erizaba ante esto. Mis mejillas se calentaron y cerré los ojos para controlar mi respiración. La chica que lleva jodiéndome casi cuatro años me está calentando las bragas en segundos.

Al estar sentada en el taburete ella estaba entre mis piernas. Miré hacia abajo y pude ver una enorme, y no es broma, erección en su jean negro. Suspiré y ella se alejó.

—Así que trátame con respeto, niñata. –se sirvió comida en un plato y se fue al salón.

"¿Qué diablos acaba de pasar?" Me pregunté en estado de shock mientras miraba mi plato. Acabo de tener deseos sexuales por la bruta que me jode desde hace años.

Sacudí un poco la cabeza y terminé de cenar. Eché el plato a lavar y fui al cuarto. Ella no estaba así que di por hecho que se quedaría hasta tarde en el salón, suerte que mañana es domingo.

Me metí en mi cama y miré el techo por unos minutos. Cerré los ojos frustrada y suspiré. Sólo se me pasaba por la cabeza esa escena en la cocina. Su voz, su olor...

Bramé molesta ya que no conseguía dejar de pensar en eso. Tapé mi cara con la almohada y suspiré nuevamente. ¡Sal de mi cabeza!

Bueno mis amores espero que lo disfruten y nos vemos en el siguiente capítulo.❤️✨

-Jaëck. D.

No soy tan mala [Jensoo G!P]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora