< duele >

417 45 9
                                    

Sabes... me lastimas, lo haces sin darte cuenta y eso lo sé, se que no lo haces a propósito, pero aún así me duele.

Me duele el saber que soy tu sucio secreto, me frustra el no poder tomar tu mano en los pasillos de la escuela, no poder darte un simple beso, el tener que fingir qué no nos amamos locamente; sabes, realmente me molesta, me molesta tanto que me dan ganas de sólo terminar con toda ésta vil farsa.

¿Por qué yo tengo que ser siempre el que da el cien porciento?

¿Acaso te doy pena?

¿No soy lo suficientemente bueno para tí?

¿Qué me falta? ¿Por qué no me lo dices a la cara?


Entiendo que todavía no sales abiertamente a enfrentar el mundo, se lo difícil que es cariño, no sabes lo mucho que he sufrido sin tu ayuda y la verdad es que yo ya me cansé de todo ésto.

Tres años. Tres malditos años tememos cómo pareja y no puedo ni darte la mano en público.

Tres años aguantando por los dos todo ese rechazo, todos esos insultos, un sin fin de golpes. Hasta los tuyos.

¿En serio me amas tanto cómo me aseguras?


Me siento tonto.

Por confiar en tu gran poder con las palabras; creer que de verdad dejarías todo por nosotros, que no te importaría el ser señalado con tal de amarnos libremente.

Pero al parecer solo fui yo el que pone el pecho por nuestra relación, el que sufre por todo lo que haces, el que tiene que ver cómo besas a alguien que no soy yo.


¿Realmente vale la pena todo el sufrimiento que paso a diario?

Me siento completamente tonto.

Por dejar que ése día me levantes la mano, por no ser lo suficiente fuerte para detenerte, por solo dejar pasar esos moretones que adornan toda mi piel, nunca debí callar mi voz, nunca debí ser sumiso ante ti.

Recuerdo la primera vez que me golpeaste.

Todo el día te estuviste disculpando y en un punto llegaste a llorar, me prometiste que no iba a suceder de nuevo, y yo realmente te creí, pensé que solo pasó por el calor de la discusión y toda la abrumadora pelea, hasta llegué a pensar qué, la verdad, no era la gran cosa; sabes, me arrepiento tanto de no haber puesto un alto en ése mismo instante.

Y de la noche a la mañana los golpes cada vez se volvían más frecuentes, hasta que en cierto punto todos se daban cuenta de mis grandes moretones, pero nadie hacía nada; en algún momento ya ni pena te daba el pegarme en lugares públicos, de solo recordar las caras de toda la gente que nos veía me regresan las ganas de vomitar y de poder terminar con todo.

Pero no puedo, no quiero alejarme de tu lado.

Cuando me picó la araña días después me sentí capaz de todo, sin embargo tú acabaste con todo eso, me hiciste sentir la persona más asquerosa y débil de todo el mundo.

Ya no era capaz de nada, y aún con todos mis miedos, logré salir al mundo cómo spiderman.

No sabes lo feliz que me hizo el saber que tú admiras con todo tu ser a spiderman, a mí.

Pero todo se derrumbó cuando empezaste a compararnos y hacerme menos por según tú "no ser lo suficiente valiente", ¿cómo te atreves a decir eso de mí?

El que carga con todo el peso de ser gay abiertamente, el que soporta todos tus arranques de ira, el que tuvo que soportar tus malditos golpes y el de todos tus jodidos amigos.

No sé porque diablos sigo aquí.

¿Será porque eres adictivo?


Adictivo pero tóxico.

A veces pienso que soy de tu propiedad, pero luego te vas, dejando aquí cómo un preso sin salvación, sácame de este dolor, por favor.


¿Por qué no sólo me dejas?


¿Por qué te vas sin mí?

Si hubiera sabido todo el sufrimiento que me causaría estar contigo, sin duda lo volvería a hacer, porque me hiciste tan sumiso a tí que sin dudas lo repetiría todo sin mirar atrás, aún así te esperaría hasta que vuelvas por mí.

Verdaderamente doy asco, estoy harto de todo, y siento que si no termino con ésto, tú terminarás conmigo, de manera literal.



Te odio tanto.




















Pero aún así te quiero a mi lado.



















¿Qué me hiciste?

















¿Por qué no puedo sentir mi cuerpo?









Tengo miedo.





































No entiendo porque estás llorando.
































No puedo ver nada.










































¿Vas a venir por mí?


















































¿Me salvarás?





















































































































Fin.

◇Me lastimas◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora